Sirius era parte de la orden del fénix.
Sirius ni siquiera tenía intenciones de convertirse en Auror, ¡Era parte de la Orden del Fénix!
¡Sirius era parte de la orden del fénix!
Aquella confesión llego a su mente como una flecha atravesándolo, no podía ser mentira, era verdad, Sirius se lo confeso estando borracho, y una de las mayores verdades universales era que los borrachos y los niños siempre decían la verdad.
Sirius estando en ese estado era algo poco comun, pero, cuando se juntaba con sus amigos, un fin de semana, podía pasar, en especial si quien traía el licor era James Potter.
Aquel día James Potter apareció sin avisar, a dar una noticia, alguien de la Orden del Fénix había fallecido, o al menos es lo que se rumoraba ya que llevaba desaparecido. Él estaba de casualidad en la casa, habían comido algo, estaban pasando la tarde sin ninguna clase de molestia cuando se escuchó la aparición y el timbre sonó, Sirius fue a atender y al ver quien era le dijo a Severus que fuera al cuarto a ocultarse, seguramente James tendría algo que decirle y se iría pronto.
Potter no se fue pronto, le comento la noticia a Sirius, comenzaron a charlar, y James dijo un dato muy relevante, la Orden del Fénix no tenía una taza de supervivencia muy alentadora, pero, aun así, peleaban por lo que era correcto.
La primera confesión: James Potter era parte de la orden del fénix.
Oculto en la habitación, escuchaba el sonido de las botellas de cerveza abrirse, escuchaba a Sirius animar a su amigo. Y cuando la noche llego, no podía irse, haría un estruendoso sonido de aparición y eso podría hacer pensar a Potter que su amigo podría haberlo traicionado, se quedó escuchando entonces.
Chocaron las botellas de cerveza, James Potter lloro, al parecer quien había fallecido era alguien con quien compartió poco tiempo, pero le caía bien. Potter le confeso que confiaba ciegamente en Sirius, lo que tranquilizo la charla en un momento, y Sirius le dijo que nunca dude, él era de confianza, era su amigo, su hermano, era leal a él.
Entonces llego la siguiente confesión.
— Creo que vas a tener que ser más activo, Padfoot — dijo Potter antes de beber otro sorbo largo de cerveza —. Sé que temes encontrarte con tu hermano, pero...debes hacer lo correcto.
—No es por mi hermano, Prongs, sé que se unirá eventualmente, el aun esta en Hogwarts, sabes que sí. Yo quiero pelear por lo que es correcto, para eso me uní a la orden del fénix, para hacer las cosas bien, pelear por el bien, por un buen futuro.
— Moony, Wormtail y yo estamos comenzando a ser más activos, ahora con las nuevas bajas, no podemos bajar los brazos, faltas tu... ¿Te unes Padfoot?
— No lo dudes, mándame un mensaje, y de inmediato actuare, estaremos en contacto Prongs.
Chocaron otra vez las botellas.
No supo cuando tiempo siguieron bebiendo, y de pronto comenzaron a reír de cosas sin sentido, sobre un incidente con la policía Muggle, sobre como terminarían, en un plan poderoso, contra los Mortifagos.
A media noche, James Potter se fue, se quedó esperando el sonido de la aparición, y así fue, fue cuando salió.
— ¡Eres parte de la Orden del Fénix! — le grito, pero era tarde para pedir explicaciones, Sirius se había dormido en el sofá.
La Orden del Fénix, era una legión, conocida, de magos y brujas, que no concordaban con como actuaba el Ministerio de Magia, en lo más mínimo, considerandos brutales ya que usaban abiertamente maldiciones imperdonables. Todos comandados por Albus Dumbledore, quien guiaba, de la mejor manera redadas contra los Mortifagos.
Los Mortifagos, al igual que el Ministerio de Magia, no se medían en atacar a los miembros de la Orden del Fénix, el número de bajas era notable, Los Mortifagos y la Orden eran acérrimos enemigos, al punto que ninguno se detenía en su actuar.
Se sentó, mirando a Sirius dormir, y se detuvo a pensar en lo que seguía.
Notas: si si ya se, voy un dia atrasada, el finde me pongo al dia
ESTÁS LEYENDO
Magic Love
FanfictionSeverus Snape y Sirius Black, una pareja un tanto contradictoria, que nadie esperaba como tal.