Lluvia y ruinas. Fictober 2024

25.- Caballero

The Legend of Zelda y todos sus personajes son propiedad de Miyamoto Shigeru, Tezuka Takashi y Nintendo.
Palabras: 415.

25.- Caballero

Se arrodilló ante el rey y la princesa, la cabeza baja y el puño en el pecho. Creía haber hecho un buen papel defendiendo las posiciones durante la invasión de monstruos en el recinto del castillo. Pero le habían citado, sólo a él. Tal vez el rey había descubierto que se veía a escondidas con su hija, que eran amigos y le citaba para condenarle a muerte por traición o algo así.

—Decidme, joven, ¿cuál es vuestro nombre?

—Link, majestad —contestó sin alzar la vista.

—¿Qué edad tenéis, Link?

—Quince, majestad.

Esperaba que su edad no le jugase en contra, era joven, pero ya no era un niño. Había crecido a marchas forzadas.

—¿Qué hace alguien tan joven en el ejercito?

—Mi padre fue soldado, aquí, en el castillo.

—Un joven siguiendo los pasos de su padre. No hay mayor orgullo que ese —declaró el rey. Debería de haber sonado como un halago, pero a Link le sonó más como un reproche—. Ponte en pie, joven Link.

»Lo que has hecho en el campo de batalla ha sido impresionante. Has derrotado tú sólo a varios mobilns, has ido de un puesto de guardia a otro hasta lograr asegurarlos todos. Eres un guerrero fuera de serie.

Zelda le sonrió con amabilidad y se sintió tranquilo al momento.

—A pesar de tu juventud, voy a hacerte una propuesta, Link. En vista de tu gran valía y habilidad, voy a nombrarte caballero de la princesa.

—Sería un honor, majestad.

El rey Rhoam rió.

—No aceptes tan rápido, joven —musitó divertido—. Si aceptas serás su guardaespaldas. Eso implica que mantenerla a salvo y con vida será tu prioridad. La acompañarás a cualquier lugar al que vaya. Deberás de ser discreto, no quiero rumores sobre Zelda o sobre mí extendiéndose por el reino. No serás más un soldado, no dormirás en los barracones, lo harás en la antesala de las dependencias de la princesa. Si incumples con tu deber te espera la horca. ¿Aún está dispuesto a aceptar el cargo?

Link le miró con determinación y asintió.

—Será un honor, majestad.

—En ese caso te confío la vida de mi hija, joven Link.

—Le he pedido al servicio que te prepare un baño caliente y que curen tus heridas —explicó Zelda—. Pídeles todo lo que necesites, Link.

No necesitaba nada más, recogería las pocas cosas que tenía y las trasladaría a dónde le indicasen.

Protegería a Zelda. Le demostraría al rey que era digno de su confianza.

Fin

Notas de la autora:
¡Hola! Siento que sea tan cortito, quería escribir algo largo con este tema, pero me encuentro fatal y mi cabeza no ha dado para más.
Mañana más.