OSCURO

13. NO TAN BORDE

Intenté no parecer afectado por lo que acababa de pasar cuando toqué la puerta del cuarto de Lola. Ella me dio permiso para pasar y lo hice rápidamente. Tess estaba allí, tenían el balcón abierto y ellas estaban sentadas junto a él, dentro del cuarto, la una frente a la otra. Ambas fumaban un cigarrillo.

— ¿Qué te ha pasado?—pregunté mientras me acercaba a ella y miraba su pierna vendada sobre un taburete y un almohadón.

—Tess ha intentado enseñarme a montar a caballo—ella hizo una mueca de dolor y luego me sonrió y le dio una calada a su cigarro—. No lo intentes.

—No pensaba hacerlo—Tess me hizo un sitio y me senté a su lado, frente a mi amiga—. ¿Te has caído?

—En realidad creo que no ha llegado a estar encima—rió Tess y me hizo sonreír por la broma.

—Cállate, me duele de verdad—Lola agitó la mano frente a nuestras caras, como si intentara espantarnos con ella—. ¿Y qué tal tú con él chico misterio?

—Yo he flipado cuando Lola me ha dicho que Cam te había invitado a ir de viaje con él—Tess me miró como si fuera de otro planeta.

— ¿Por qué?—le pregunté.

—Cam no se relaciona con nadie, nunca—afirmó ella—. Debes de haberle impresionado mucho. Lola me ha dicho que tú y él...—dejó la frase en el aire y sonrió. Yo desvié la mirada avergonzado—. De todos modos me alegro por Cam. Tú ten cuidado con él ¿Vale?

—No es nada—le quité importancia—. Que dos personas se gusten no quiere decir que se vayan a casarse.

—Pero es que a Cam no le gusta nadie—sonrió su hermana—. Suerte.

—Creo que no soy como él esperaba—me perdí en mis pensamientos.

— ¿Qué quieres decir?—Lola se inclinó hacia delante—. ¿Te refieres a lo de los chicos Diggs? ¿Qué tiene que ver Cam con eso? Él no podía saber si serías de una manera u otra. Es tú madre quien elige a los candidatos de intercambio ¿Verdad?

—Supongo que sí—Tess se encogió de hombros y supe que la pobre estaba tan mimada en su mundo que no se enteraba de nada—. Oye ¿Qué es eso de los chicos Diggs?

—Ahora te lo cuenta Lola—le alcé una mano para que me dejara hablar durante un momento—. Lola ¿No deberíamos ir al médico?

—Joey me llevará mañana—me informó mientras yo me ponía de pie—. No iré a clase.

—Vale—me encogí de hombros—. Esperó que no sea nada.

—Yo también—ella me sonrió mientras yo me dirigía a la puerta—. Espera ¿No nos vas a contar nada? ¿Qué has hecho? ¿Cómo es Los Ángeles?

—Eh, en realidad solo vi Downtown—respondí.

— ¿En todo el fin de semana?—alzó una ceja—. Ya entiendo—me guiñó un ojo de manera pícara.

—Oh, cállate—la despaché con la mano y salí de allí.

Corrí hasta mi cuarto y entré dentro. Mi maleta estaba junto a la puerta, alguien debía de haberla sacado del coche de Cam y le había llevado hasta allí. La dejé en un rincón y me tumbé sobre la cama, no podía dejar de pensar en Cameron ¿Por qué se había puesto así? Yo solo estaba intentando explicarle que Cole solo era un amigo y él se había puesto tan difícil... Y luego yo... Oh, Dios, como me había pasado y que capullo se había comportado él. Sin darme cuenta me quedé dormido sobre la cama, en algún momento el sueño pudo conmigo y me ayudó a dejar de pensar.

Me desperté sobresaltado cuando ya era de día. Miré el reloj y salté de la cama. Se me hacía tarde. Me di una ducha rápida, desayuné a toda prisa y luego busqué a Emma.