ɪ ɴ ᴅ ᴇ ᴍ ɴ ᴇ
XXVI. ᴛᴇʟᴀʀᴀɴ̃ᴀ
❛ 𝘦𝘳𝘦𝘴 𝘷𝘦𝘯𝘦𝘯𝘰 𝘤𝘰𝘳𝘳𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘱𝘰𝘳 𝘮𝘪𝘴 𝘷𝘦𝘯𝘢𝘴 ❜
Nunca había llorado tanto. Sigo atragantándome con mi propia saliva cada vez que intento de tomar un bocado de aire fresco para mis pulmones, tosiendo como si estuviese a punto de morir de eso a lo que todos llaman bronquiectasia.
No sé qué es lo que no ha dejado de doler exactamente en las siguientes horas, si las marcas moradas que tiñen la piel de mi brazo, o mi debilitado corazón que apenas si bombardea sangre en prolongadas pausas.
Desde que volví de la piscina, he permanecido encerrada en mi habitación. Kathleen no se encuentra en casa, pero sé que llegará en cualquier momento. Y cuando lo haga, va hacerme contarle todo al respecto y yo terminaré desmoronándome en sus brazos como una chiquilla indefensa.
Sin embargo, prefería saltarme esa parte y fingir que nada malo ha sucedido. Sollozando, trato de convencerme de que Billy sólo estaba de mal humor y que el verme fue un detonante en su sistema. Sorbo la nariz, y trato de imaginar un escenario no muy alejado de la realidad de mi Billy abandonando su casa después de tener una discusión con su padre sobre cuál universidad estará aplicando en los próximos dos años.
Trato, con lágrimas frescas resbalando por mis mejillas, de crear cualquier otra situación que podría excusar su comportamiento.
«Billy no me haría esto. Billy no me lastimaría. Billy no...»
¿Cómo no habría de hacerlo? Es un chico roto. Está lleno de moretones y sangre. Se ha cocido a sí mismo las heridas y ha ocultado las cicatrices. Sonríe, pero en la oscuridad de su habitación llora. Ríe, pero frente al espejo grita. Por las noches, cuando la piscina está cerrada, se sumerge y se queda en el fondo del agua hasta que sus pulmones arden en busca de aire, porque sé que allí dentro se siente más seguro que en la superficie.
¿Realmente era Billy incapaz de lastimarme?
El timbre del teléfono me rompe los tímpanos, pero al menos hace que mi llanto cese por un instante. La sola idea de que sea Kathleen quien se encuentra al otro lado de la línea me da escalofríos, y hace que me levante del suelo y comience a limpiarme el rostro con el borde de mi blusa.
Tomo una respiración profunda antes de atender y rezo hacia la nada para que mi voz no suene pastosa y arrastrada.
—¿Diga?
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𝗶𝗻𝗱𝗲𝗺𝗻𝗲 ─ STRANGER THINGS.
Fiksi Penggemar𝗜𝗡𝗗𝗘𝗠𝗡𝗘 | ❝ ¿Es que acaso aún no lo ves, Eve? Todo este tiempo, lo hemos estado construyendo con un sólo propósito... Lo hemos construido especialmente para ti. ❞ ━━ Para Helena el adaptarse a esa pequeña y misteriosa lo...