Capítulo 13. nunca nadie había venido a verme

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El concurso dio comienzo a las 17:30 con la bienvenida de la alcaldesa del pueblo acompañada de otras figuras importantes infundados en trajes de corbata. El salón de actos estaba decorado de manera elegante y sofisticada. Su discurso se basó en dar las gracias a que los jóvenes siguieran interesados en perpetuar la música clásica en una generación sumida en el reggaeton y el rap obsceno. Ganándose un par de aplausos y risas de los hombres casposos trajeados que se encontraban en el público.

 Posteriormente, explicó el funcionamiento de la prueba y recordó el premio valorado en 200 euros en metálico para el ganador del mismo en su continuación de estudios. El segundo premio era una semana de clases con un prestigioso profesor europeo. Los nervios se palpaban en el ambiente, todos los estudiantes se movían nerviosos en la parte oculta del escenario mientras se susurraban palabras de ánimo. Dani dejó un suave apretón de hombros a sus alumnos para desaparecer en el espacio y acomodarse en una butaca libre.

El jurado se situaba en la primera fila de butacas de color rojo aterciopelado, acompañados de sus respectivas libretas para hacer anotaciones con las que posteriormente dialogar entre ellos y llegar a un consenso. El número total de participantes fue de diez.

Martin, Juanjo y Denna vieron pasar todo tipo de estudiantes con sus variopintos instrumentos, desde un fagot hasta un contrabajo, continuando por flautas traveseras y oboes. Todos tenían un nivel bastante elevado. Martin nunca se sintió amedrentado por el nivel de los demás. Siempre sabía que tenía que dar lo mejor de él mismo sin fijarse en lo que el resto hiciera. Es algo bueno que aprendió de su madre. De lo poco reseñable si le preguntáis. Estaba acostumbrado a tocar para todo tipo de gente, por lo que el miedo escénico ya nunca corría por sus venas. Básicamente estaba tranquilo esperando su momento.

El grupo de Martin era el último en participar. Habían colocado a los alumnos según el curso en el que estuvieran en el Conservatorio. Solo quedaban por salir al escenario el grupo de Sergio y ya sería el turno de nuestros protagonistas.

Todos estaban en silencio, entre bambalinas, esperando a que la Sonata de Mozart de piano a cuatro manos que estaban interpretando unos alumnos de quinto curso cesara de sonar. Almudena estaba mirando a través de las cortinas del escenario a ver si reconocía a sus familiares.

-Mira Juanji, tus padres acaban de llegar y se han sentado con los míos - dijo llamando su atención para que se asomara junto a él.

Martin estaba jugueteando con los dedos mientras realizaba respiraciones profundas. No esperaba a nadie entre el público. 

-Oye Martin - dijo Denna - ¿ese no es tu profesor de violín?

Martin elevó la cabeza y se acercó a sus compañeros. 

-Mira ahí - añadió la rubia señalando la tercera fila - ¿es ese no?

-Anda pues sí, que curioso. No sabía que tuviera algún alumno que se presentase al concurso - respondió sin importancia.

Casi sin darse cuenta, el presentador del concurso les llamó para que acudieran al escenario. Antes de que pudiera salir, sintió el brazo de Juanjo agarrándole.

-Imagínate que estamos en la clase de Dani, con los ojos cerrados y nuestras espaldas juntas - susurró el maño en su oído - vamos a demostrarles a todos lo que somos capaces de hacer - terminó, guiñándole un ojo.

Martin le sonrió de manera sincera y salió al escenario. Una vez en el centro del mismo, los tres se miraron e hicieron una pequeña reverencia al jurado, antes de comenzar a tocar. 

Juanjo fue el primero en tomar asiento con la espalda erguida. Colocó sus manos encima de las teclas del piano de cola, en una postura elegante a la vez que profesional. Echó un vistazo a sus compañeros, la rubia ya estaba preparada y le sonreía sin dientes. Finalmente, su mirada viajó al vasco que era el último en colocarse el violín al cuello y el arco encima de las cuerdas, dispuesto a comenzar. Martin le guiñó el ojo de manera sutil y Juanjo le devolvió el gesto.

CONTRA LAS CUERDASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora