CAPÍTULO 17: Inepta

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Ya era el tercer cadáver que me hacía caer contra el suelo al tratar de clavarle mi navaja. Y Jody siempre tenía que intervenir agarrándolo por detrás y aplastándole la cabeza con su bate con toda la normalidad del mundo. Pero creo que yo estaba agotando su paciencia porque a veces me miraba con decepción.

-¡Así no es cómo te enseñé!- exclamó -¿¡Y cómo es!?- dije ya molesta. -¡¿Es tan difícil recordarlo y hacer esto?!- venía un cadáver de entre los arbustos.

Jody fue hacia él y gritó -¡Opción uno!- el cadáver intentó tomarlo de los hombros pero no pudo porque Jody lo empujó del pecho, haciendo que éste retroceda, aprovechó el momento y le clavó una enorme navaja que traía en su pantalón.

-¡Opción dos!- volteó muy activo, pero no había ninguno de ellos. Miró al cielo -¡¿En serio?!- alzó los brazos a sus costados. Nos llamó la atención de que una vez más OTRO cadáver se acercaba a nosotros. -¿¡Era tan difícil?!- miró de nuevo al cielo.

Esperó a que esa cosa llegase junto a él. Para luego patearlo en su pierna izquierda haciendo que el muerto caiga tendido al césped salvaje. Una vez ahí, Jody se inclinó y clavó su navaja en el cráneo de éste. Luego se puso de pie -¿Quedó claro?- preguntó.

Al ver que no respondí, se contestó a él mismo -claro que sí, es la mierda más fácil de estos tiempos. -Ahí viene uno- avisó mientras sacaba una caja de cigarrillos de su chamarra. Luego encendió uno -¿vas a ir a matarlo o qué?-. (Imagen disponible al inicio del capítulo 17)

Me acerqué al cadáver, el cual caminaba "cojo". -¿Revólver?- dudé. Jody negó con la cabeza -Cuchillo. Armas de fuego serán mañana- respondió.

-Es más fácil matarlos con un arma de fuego que con un cuchillo- comenté -con un arma de fuego no es tan fácil, ya lo verás cuando lleguemos a esa parte-.

-¿Cuántas partes son?- pregunté -tres- ¿y qué haremos en la tercera?- dudé -"harás"- me corrigió -y tengo pensado ver qué es lo que harías sin ningún tipo de las dos armas-.

-¿Cómo piedras o algo así?- volví a la duda -no lo sé, como ramas o... ¡¿por qué estoy discutiendo con una inépta?!- exclamó.

Lo ignoré, porque quería dejar las ofensas para después, ya que me centré en el cadáver frente a mí. Me acerqué y le pateé su pierna debajo del muslo para hacerlo caer fuertemente al suelo. Y justo iba a clavarle el cuchillo que traía en mis manos cuando de pronto una bala le pasó, seguido de un estruendo, llenando mi ropa de sesos y sangre.

Había sido Jody, quién sólo estaba jugando conmigo. Yo no tenía tiempo para juegos, así que me levanté enfadada y lo miré -sabía que no le darías así que me aseguré yo mismo- dijo sarcástico. Respiré profundo, pero estallé.

- Inépta ¿Es lo que piensas de mí?- volví al tema -sí, pienso que eres sólo una niñita estúpida e inmadura que no está preparada para este mundo. Tuviste suerte y sólo suerte al dispararle a ese frasco de vidrio, sólo SUERTE, mierda-.

-YO no estoy preparada para este mundo, pero tú sí- supuse. Jody me miró en respuesta de obvio. -Pues, tal vez deberías enseñarme a cómo el "chico perfecto" para este mundo de mierda se comporta, porque a todo el mundo en este lugar le importa cómo se hace rebelde este IMBÉCIL. Si crees que besuquearte con la pareja del líder es ser maduro y hecho para este mundo, eres el mayor IDIOTA que conozco- finalicé furiosa y me fui de allí.

Me hubiera gustado ver la cara de ese cretino de atrás, el cual se creía experto en esto de las armas. Veremos quién es el verdadero experto.

MORDIDAS QUE CONVIERTENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora