El auto se detuvo frente al edificio, y Jeonghan soltó un suspiro pesado mientras se desabrochaba el cinturón de seguridad.
Su garganta ardía, sus manos estaban frías y su cabeza palpitaba con frustración.
El día había sido un desastre. Su voz se quebró una y otra vez en la cabina de grabación, obligándolo a repetir tomas hasta que el productor finalmente decidió posponer la sesión. Wonwoo intentó intervenir, ofreciéndose a grabar más partes para cubrirlo, pero no había mucho que hacer. El productor los despidió temprano con la indicación de que Jeonghan descansara y se recuperara lo antes posible.
Jeonghan se dejó caer contra el asiento, con la mirada perdida en el parabrisas. Wonwoo apagó el motor y lo observó en silencio por un momento antes de hablar.
—Fue un día difícil.
Jeonghan dejó escapar una risa sarcástica.
—Difícil es poco. Fue un desastre.
Wonwoo no discutió, pero tampoco intentó consolarlo con frases vacías. Simplemente salió del auto y Jeonghan lo siguió con pasos pesados hasta el ascensor.
El silencio entre ellos se volvió denso mientras subían. Jeonghan apoyó la cabeza contra la pared del ascensor y cerró los ojos, sintiendo la presión de un dolor sordo en las sienes.
—No te presiones tanto —dijo Wonwoo de pronto—. Tu voz sigue mal, no era el mejor día para grabar.
Jeonghan chasqueó la lengua, sin abrir los ojos.
—Lo sé. Pero sigue siendo frustrante.
Wonwoo no respondió de inmediato. Solo dejó escapar un suspiro cuando el ascensor se detuvo en el piso de Jeonghan.
Entraron al departamento en completo silencio. Jeonghan se quitó los zapatos con movimientos mecánicos y se dejó caer en el sofá, mientras Wonwoo caminaba hacia la cocina con total confianza, como siempre. Sin decir nada, puso agua a calentar y sacó un par de recipientes de la bolsa que había traído.
Jeonghan dejó caer la cabeza contra el respaldo y cerró los ojos por un momento, sintiéndose agotado.
—No tengo hambre —murmuró, sin siquiera abrir los ojos.
—Tienes que comer algo —insistió Wonwoo, revolviendo la sopa en el recipiente—. Si no comes, la medicina no surtirá efecto.
Jeonghan no respondió. Escuchó el sonido del agua vertiéndose en una taza, el tintineo de los cubiertos y el roce de los envases al colocarlos en la mesa.
Finalmente, Wonwoo caminó hasta él y se quedó de pie a su lado.
—Come algo antes de dormir —dijo Wonwoo mientras dejaba la comida servida sobre la mesa—. Y tómate las medicinas.
Jeonghan, aún con el abrigo puesto, se cruzó de brazos y dejó caer la mirada en el suelo. No tenía hambre, ni ganas de nada. Solo quería meterse bajo las sábanas y olvidar que este día había sucedido.
—Te estás sobreexigiendo demasiado —continuó Wonwoo con un tono más suave, pero con la firmeza de alguien que conocía bien a su amigo—. No puedes seguir llorando hasta desgarrarte la garganta y luego esperar que funcione como si nada.
Jeonghan alzó la vista y lo miró de mala manera, pero Wonwoo no se inmutó.
—Solo digo la verdad.
La mandíbula de Jeonghan se tensó. Quería replicar, decir que estaba exagerando, pero no era así. Wonwoo tenía razón. Jeonghan había llorado la noche anterior, demasiado, y su mejor amigo había sido testigo de tan patética escena. Y hoy, en el estudio, su voz había sido un desastre. Era su culpa.
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▸ Verano en Jeonju ៸៸ 𝙅𝙚𝙤𝙣𝙜𝘾𝙝𝙚𝙤𝙡
Fanfiction꒰ 𝗼𝗿𝗶𝗴𝗶𝗻𝗮𝗹 .𖧧 ࣪ Jeonghan, un chico de la ciudad de Seúl visita un pueblo pequeño llamado Jeonju durante el verano, donde se enamora de el local Choi Seungcheol, descubriendo la belleza de la vida rural. 𓍯 🌱 ˖ ࣪ 𝘱𝘭𝘦𝘢𝘴𝘦, 𝘴𝘵𝘢𝘺 �...
