-Lo detesto. Simplemente detesto como nos hace ir cualquier día de la semana solamente porque es primer día de mes.
Asentí aunque Hernán no pudiera verme a través del teléfono.
-Es una cojudez. Eso de que un año empezamos lunes y otro iniciamos miércoles y así... No lo aplica cuando cae fin de semana solo porque es ilegal -me uní a la queja.
-Para colmo solo vamos a que nos cuenten de qué va el curso hagamos unos pocos ejercicios a medias porque ya se gastó más de la mitad de la hora e intenten traumarnos -oí las protestas de Tamara, también al otro lado de la línea.
-No entiendo cómo funciona para ustedes pero en mi colegio las clases iniciaban siempre y absolutamente siempre viernes -comentó Andreas, un amigo de Tamara y Hernán al que yo solo conocía de vista.
Por lo que había entendido, se habían reunido y de momento, yo estaba en altavoz. Tenía que tener cuidado con lo que decía. O debería tenerlo.
-¿Viernes? -inquirí extrañado -Este año se ha dado, pero es bastante raro.
-Sí. Solo se repartían materiales y se explicaban los cursos. A veces te presentaban algunos profesores. Nada más.
-Deberíamos obligar a nuestro amadísimo director a hacer lo mismo. Que mañana solo tengamos que aparecernos a recibir horarios y cosas así y empezar recién el lunes en vez de que finjan intentar hacer clase y dejen deberes -suspiró Tamara en un quejido.
-¿Obligarlo? -me mofé -Aunque no estaría nada mal...
-La cosa sería... ¿Cómo? -Hernán habló por todos.
-¿Realmente lo están considerando? -Andreas sonó divertido e incrédulo.
-Sí.
-Sip.
-Eh... sí...
Las tres respuestas sonaron casi a la vez.
-¡Castiel! -la voz de mi hermanito requirió mi atención.
Pidiendo un momento y tapando el micrófono de mi celular, me asomé a ver qué ocurría.
-¿Qué diablos quieres? -gruñí.
-Valerie te llamó.
-Valerie... -repetí empezando a maquinar un plan -¡Gracias peque! -solté un grito antes de volver a centrar mi atención en el celular.
-Valerie podría ser la solución a nuestros problemas -solté de golpe en cuando me concentré nuevamente en la conversación a través del celular.
-¿Valerie? -Hernán dejó escapar una risita incrédula -Disculpa que lo dude.
-Ella hará lo que sea menos meterse en problemas, Castiel. Perdona pero yo tampoco veo cómo nos puede ayudar -Tamara pareció dudar un poco al apoyar a mi hermano.
Cómo se notaba que no tenían idea.
-Sé lo que les digo.
-¿Qué puede hacer ella? -preguntó con interés Hernán.
Al ver que no decía nada, Tamara admitió que no le sorprendía mi silencio al respecto.
-Ustedes dos siempre se tienen algo entre manos pero jamás vemos qué diantres planean -sonó acusadora mientras reía.
-¿De qué me he perdido? -la voz de Andreas me recordó que él seguía ahí.
-¿Qué queremos exactamente? -decidí agilizar la conversación -¿Que las clases no comiencen mañana sino el lunes?
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The Real Bad Boy (PUBLICADO)
Teen Fiction-Ni sueñes con que pasará el estúpido y típico cliché. -¡Pues me alegro! -¿Ah sí? A mí me parece que ya estás loquita por mí. -¡Loquitas tus neuronas! Tú eres el que sueña con el cliché. Bien que te mueres de ganas de que me enamore de ti. -Si quisi...