Larga noche

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Caminar por las calles de Zaun de noche resultaba ya de por si difícil, pero caminar por las calles de Zaun, en la noche, cargando a una chica y sus armas, lo era aún más; era difícil cargar tantas armas, no entiendo como es que ella lo hace.

Seguí caminando y entonces sentí como acurrucaba su cara en mi pecho y me abrazaba por el cuello. Sentí como mi cara se ruborizaba, sentir su cara en mi pecho me hacía sentir muy nervioso e imaginar lo que haría si se despertaba no ayudaba.

Luego de un rato caminando, por fin pude divisar mi departamento; era un gran edificio de ladrillos, bastante lindo en mi opinión. Llegué a la entrada y comencé a subir las escaleras hasta el tercer piso. Con gran esfuerzo conseguí llegar hasta la puerta de mi cuarto. La abrí con cuidado y la cerré con aún más. Caminé hacia mi habitación, encendí la luz y rápidamente deje todas sus armas sobre la mesa de noche.

Ella era más ligera de lo que pensaba, quizás el peso se debía a las armas.
La recosté en la cama con cuidado, sintiendo su piel rozar mis dedos. Era muy suave, como el algodón. Sonreí. La tape con una manta y vi como se acurrucaba en ella. Sonreí ante esa reacción y salí de la habitación.

Llegué a la sala y me senté en el sofá pesadamente. Mi mente aún no había procesado bien lo que había pasado. Luego de años sin ver a Jinx, ella aparece de la nada e intenta matarme, luego sin previo aviso se duerme y la traigo a mi casa...

-Lo normal -dije sarcasticamente-
Fui a mi cuarto de nuevo y deje mi espada y el Z-drive en el armario, no era el mejor lugar para guardarlo pero no tenía muchos lugares donde dejarlo. Cerré el armario lentamente y salí del cuarto. Fui al baño y decidí tomar un refrescante baño. Dejé mi ropa en el suelo del baño y entre a la regadera.

Sentir el agua golpear mi cara era relajante. Comencé a lavarme y a pensar en Jinx, ¿Por qué tendría esas enormes ojeras?, era obvio que por falta de sueño, pero ¿A que se debía?.
Salí de la regadera y me seque rápidamente. Me cambié y salí del baño.

Fui directo a mi habitación y revisé que Jinx aún estuviera ahí, quizás dejarla dormir con sus armas no fue la mejor idea, pero supongo que así se sentirá más cómoda cuando despierte.
Mire dentro del cuarto y vi a Jinx aún dormida, sus largas coletas azules colgaban de la cama al igual que su brazo.

Comencé a deambular por la casa revisando a Jinx cada 3 minutos. Me preocupaba mucho lo que pasaría cuando despertara, quizás intentaría continuar su labor de matarme, pero por ahora no importaba mucho.

Fui a la cocina y tome una manzana, sólo para llenar el estómago, mientras comía recordé cuando Jinx me gustaba, ella siempre solía ser muy divertida, siempre estábamos juntos, pero un día, de la nada, cambió... Comenzó a actuar como una loca, gritaba y reía sin parar. Recordar las últimas palabras que me dijo antes de desaparecer era duro... Senti un ligero nudo en la garganta.
Luego de comer revisé a Jinx de nuevo, había cambiado de posición, ahora estaba acostada boca abajo abrazando la almohada. Antes de salir del cuarto tome una manta, revisando a Jinx por última vez, fui a la sala y me recosté en el sillón.

Cerré los ojos inconcientemente y me deje llevar por el sueño.

*Notas del sexy autor:
Este capítulo está algo corto ya que lo hice por la emoción xD espero disfruten la historia tanto como yo disfruto escribirla :3 bueno... Quizás agregue un poco de drama, el lemmon aún no se si ponerlo xD todo dependerá de si me dan ganas ewe xD
Chao~ <3

¡Me estás volviendo loco! (JinxXEkko) League of legendsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora