Capitulo 39: piensas

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— Yo... yo no sé quien es—contesto ella nerviosa

— Entonces...

— No te lo había querido decir, pero creo que hace dos mese, pues tengo un acosador

— ¿alguna pista de quien sea?

— Realmente no lo sé, no reconozco su voz, sabe todo acerca de mi. Todo

— Como empezó todo

— Una simple llamada, luego una carta, luego una foto, dije que no le prestaría atención, pero después de esto, me estoy empezando a estresar

El camino hasta a ella y la miro fijamente. Noto que ella tenía los ojos cristalizados, era de tristeza o de enfado, una de las dos.

— ¿ por qué no me lo habías dicho?—pregunto él con un tono dulce

— Pues... no sé, realmente, no lo creí importante—sollozo

— Esto sí es importante, todo lo que tenga que ver contigo me importa, estoy para ti, no dejare que ningún hijo de puta te ponga un dedo encima, así tú puedas cuidarte sola yo siempre estaré

— Gracias—lloriqueo ella de nuevo, y él la envolvió con sus brazos y le dio un tierno beso

— No tienes que agradecer nada, ahora cambiaremos ese número por uno privado, y tendrás un guardaespaldas

— Me siento como una niña pequeña

— Eres como mi niña pequeña créeme que no me perdonaría que algo te pasara

Tres meses habían pasado, ellos habían regresado a Miami, Niall no había vuelto a viajar, pero si había recibido extrañas visitas. Mientras que Daniela para no levantar sospechas de nada se desempeñaba como fotógrafa y maquillista en una revista de Miami, y en importantes eventos de famosos en los Ángeles. Y de vez en cuando como doble de riesgos ya que se decidió por el maquillaje.

Era fin de semana, después de varios días podía descansar. Abrió sus ojos lentamente y se incorporo lentamente a luz que arrasaba con sus ojos. Cubierta por las sabanas y a medio vestir se levanto, amarro su cabello en un pequeño tomate alborotado, se estiro y salió de la cama, camino hasta al baño, lavo su cara, boba y peino correctamente su cabello que ahora estaba un poco más largo y se podía ver la raíz negra de este. Salió del baño y busco con su vista la ropa que tenia puesta por la noche, la localizo y se vistió.

Salió del cuarto, pero todo estaba solo, cerró la puerta tras su espalda y salió. Se asomo por las escaleras y ahí estaba Niall hablando con un tipo grande y de piel chocolate, ambos reían de algo, pero lo más curioso era que en medio de los dos habían por lo menos cinco maletines abiertos y todos aquellos lleno de dinero. Aquel hombre moreno se levanto le dio un apretón de manos a Niall y se marcho. Mientras que el rubio tomaba un fajo de billetes y jugaba con él.

— Que mirada tan poderosa tienes cariño—rio Niall, haciendo que la chica se sorprendiera

— ¿ cómo supiste que era yo?—cuestiono ella

— La casa está sola, le di el día libre a todos los empleados... y la única que podía estar mirando eres tu

— Que astuto Horan—rio

— Algo, ahora baja... te quiero decir algo

— Está bien

A paso rápido bajo ella las escaleras, hasta que llego donde estaba el, se acerco le dio un beso y luego hizo que se sentara en sus piernas. Mientras le daba varios besos por todo el cuello.

My drug [N.H.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora