Capitulo VII

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Martes.

Oí el molesto sonido del despertador y con pereza me levanté.

-Señorita ____. Ya es hora.-Habló Carol, una de las criadas de la casa, entrando a mi habitación.

-Claro. Gracias Carol- Sonreí.- Por cierto, llámame ____; eso de "señorita" me hace sentir vieja- Reí.

-Como digas _____- Gruiño a lo que carcajeé aún más.

-Bien- Extendí mis brazos y piernas.- Iré a asearme, discúlpame.

-Está bien.

Tomé unas cuantas toallas y me dirigí al baño.

Tras bañarme, vestirme y comer algo fuì directamente hacia el instituto, donde, al divisar a Angela, me encontré con una escena que no me agradó apreciar mucho.

Hablaba con Nat y sonreía cuando el abría la boca. Pero... ¡Alto! ¿No le tiene miedo?... Además, ella solo sonríe cuando a un chico cuando le gusta, y eso no es nada bueno.

Una extraña sensación recorrió mi cuerpo, me sentía furiosa, pero no veía la razón. Comencé a acercarme donde ambos se encontraban, pero a pleno camino, descubrí que fue aquel sentimiento de furia....celos. Pero, ¿Por qué?

-Angela- Le llamé mientras colocaba una de mis manos en su hombro.

-¡____!- Volteó sonriente y me rodeó con sus brazos, formando un abrazo.

Que raro Angela no es asi de cariñosa en publico, solo en situaciones cuando esta nerviosa.

-¿Qué haces con el?- Murmuré a su oído.

-¿Con Nat?

Diablos, ¿Desde cuando le llama Nat?- pensé.

-¿No le temías?- Interrogué confundida.

-Eso es tiempo pasado ____-Rió.

-Ayer- Susurré a penas audible.

Observé a Nat, quien tenía sus ojos clavados en mi persona de una manera fría.

-Wolff- Le saludé dura.

-____(ta)-Respondió.

Sin razón alguna, que me llamase por mi apellido afecto mis sentimientos. La tarde del día anterior habíamos estado a milímetros de distancia, para así, unir nuestros labios.¡Pero no! un telefonor celular arruinó todo. Alto,¿Por qué mierda pienso en esa estupidez? No fue nada más que un error.

-Bien, adiós Nat- Se despidió Angela.

-Claro, hasta luego Santana- Contestó él.

Cuando estuvo lo suficientemente lejos tomé a Angela del brazo y comencé a interrogarla.

-No logro comprenderte. Ayer le temías y hoy no.¿Qué mierda ocurre contigo?- Musité furiosa.

-Hey, hey, hey. Bajale a tus celos- Rió.

-No son celos- Mentí fulminandola con la mirada.

-Nat es tierno... aunque no lo creas...

-¿Bromeas?¡Es un jodido idiota!- Exclamé.

-No lo es- le defendió.

-¿Te gusta o atrae?

-Su mirada color verde y cuando te mira fijamente se torna marrón... su cabello tan despeinado... su sonrisa- Sonrió como boba.

-Angela, no...

-¡¿Qué mierda tienes contra él, ____?!-Gritó.

-¿Yo? Por favor, ¿Qué tienes tú con Nat?

-Pareciera que le odias, que le amas,¡Que estas celosa!- Dijo moviendo sus brazos de un lado a otro.

Su mirada lo decía todo, le gustaba y mucho. Es increíble como eso puede ocurrir en, tan solo,¿una mañana?

-¿A Nat?¿Celos? -Reí irónica- Bufé- Madura de jna vez.

Sin decir más, me dirigí al aula correspondiente para mi clase de biología, sin Angela, por suerte, ya que estaba totalmente enfadada con ella. Al entar a ésta, divisé a Julio por los últimos asientos,¿Julio no estaba dos años adelante? ¿Qué hacía aquí?

-¿Qué diablos haces en mi aula?- Cuestioné furiosa.

-Ayudaré al profesor en tus clases- Me regaló una sonrisa victoriosa.

Julio es perfecto en todas las clases, exceptuando Artes plásticas, es un asco en eso.

-¿Bromeas no?- Interrogué fría, nunca fuí muy sociable con mi familia, solo con papá. Además, lo seré mucho menos con alguien que solo pertenece a mi familia por ser el hijo del segundo marido muerto de mamá. Claramente él era mi padrastro y Julio mi hermanastro.

-No- Sonrió nuevamente.

Realmente odio cuando lo hace, odio que él exista, lo odio a él.

-¿Podrias dejar de sonreir, tarado?

-Denegado- Sonrió una vez más.

-Agh, imbécil- Bufé y tomé asiento delante de Julio, ya que los otros se encontraban ocupados.

El odio a Julio se debe a su estúpido carácter, su responsabilidad, su irritante sonrisa y su molesta voz. Él era odioso.

-Buenos días estudiantes- Saludó el maestro entrando al aula.

-Buen día- Respondimos al unisono.

-Joven Julio,¿Qué hace tan atrás?- Dijo el viejo.

-Oh, creí que estaría mejor aquí para no estorbar en su clase. Pero si quiere, puedo...

-Tome asiento a un lado de su hermana ____- Interrumpió.

Adiós vida.

-Ahm...-Realizó una corta pausa.- Vale.

Oi el sonido de sus libros unirse y visualice como los dejaba caer sobre el banco a un lado mío. Se dejó caer pesadamente sobre la silla y suspiro.

-Maldito seas Julio- Susurré.

-Lo mismo digo, hermanita.

Volteé la mirada a la ventana. El cielo estaba gris y triste, como yo. Recordé el momento que rompí con Eduardo.

Una solitaria lágrima cayó por mi mejilla, la cual, rápidamente limpié. Cerré los ojos con fuerza y la mirada verde oscuro volvió a mi cabeza. Ningún otro par de ojos se compara con los de él, ni los de mk ex novio color negro. Aquel chico de cabello negro y tan despeinado, de un momento a otro, pasó de ser algo más importante en mi vida que un simple "chico malo" del instituto. Las cosas ocurren tan rápido, al igual que como brotan los sentimientos.

Abrí los ojos y me levanté del asiento- Llamando la atención de todos.- ¿Qué diablos ocurría conmigo? Me sentía mariada, y sin recordar nada más... todo se volvió negro.

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Espero que les haya gustado, no se olviden de votar y comentar. Sin más, los quiero y subire el proximo capítulo en un rato...hasta entonces

Blue.-

No te tengo miedoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora