Una mente oscura [EunHae]

Capítulo 45: Un Corazón Herido.

Kibum apretó la maleta que llevaba. Ya era lunes y al fin era tiempo de volver a la escuela. No llevaba el uniforme porque aún tenía su equipaje en casa de Donghae. Pero no quería regresar... no tan de mañana. Así que se había vestido medio formal con alguna ropa que Leeteuk le había prestado.

Terminó de recorrer la última calle hasta encontrarse con el instituto. Tomó aire y cruzó las puertas, sintiendo las miradas sobre sí. No era de extrañar... hacía mucho que no asistía a clases.

Mientras tanto el azabache ya se hallaba en el instituto. Estaba preocupado y agobiado, ya que al despertarse, había visto la cama de Kibum vacía. Se sentía demasiado culpable pero sabía que no podía hacer nada. Deseaba hablar con él aunque tenía miedo de ser rechazado.

-¡Eh, Kibum!- dijo un chico acercándose, seguido de otros.- ¡Qué bueno verte, hombre!

-Hola chicos.- dijo sonriendo sin mucho ánimo.

-Oye, te ves bien.... Te ha caído bien el descanso ¿eh? ¡Y nosotros aquí de esclavos estudiando!

-Bah, ya echaba de menos la escuela.- dijo el moreno comenzando a caminar con el grupo.

Todos los chicos le hacían comentarios, pero el moreno nos los escuchaba. De reojo pudo ver al azabache en uno de los pasillos... y su corazón se encogió. Empuñó las manos y siguió caminando, hasta que llegó al salón.

Donghae se quedó congelado al oír aquella voz. Se quedó quieto mirándole, quiso acercarse pero su cuerpo no reaccionó. Se mordió el labio inferior y pensó que hacer rápidamente.

Reuniendo el poco valor que tenía dirigió sus inseguros pasos hacia la clase de Kibum. Probablemente Hyukjae estaría allí. Asomó la cabeza por la puerta, con vergüenza de estar en un salón en el que apenas conocía a nadie y llamó al moreno.

Kibum escuchó la voz del azabache y en verdad no quiso atender. Pero si demostraba que estaba realmente enfadado con él, los demás comenzarían a hacer preguntas estúpidas. Todo mundo los hacía los mejores amigos. Casi con pesadez, se levantó de su asiento y salió del salón, apenas viendo a Donghae.

-¿Qué pasa?- dijo viendo hacia otra dirección.

Donghae miraba al suelo, con un nudo en la garganta.

-Estaba... preocupado porque anoche no regresaste....

-Me quedé con Leeteuk.- dijo sin más.

-¿Hoy tampoco vendrás?- murmuró levantando al fin la vista.

-No... de hecho, al salir iré por mis cosas.- dijo cruzándose de brazos.- si no tienes planes y estarás en casa, claro...

El azabache sintió un vuelco al corazón.

-¿Te... te vas?- preguntó con hilo de voz.- K-Kibum... no...

-Será más sencillo.- dijo metiendo las manos en sus bolsillos.- tú no puedes decidir... y yo no lo puedo aceptar.... ¿Qué más queda?

-P-Pero....- Donghae apretó los puños, conteniendo las ganas de gritar que tenía en ese momento. En un gesto de reflejo agarró la camiseta de Kibum.- K-Kibum... yo no quiero perderte, eres mi mejor amigo ante todo y... y....

-Sigo siendo tu amigo.- dijo tomándole la mano suavemente para apartarlo.- aunque realmente sea difícil pretende que no... tengo otros sentimientos....

Donghae apretó su mano, haciendo grandes esfuerzos para no llorar. ¿Por qué tenía de ser tan sumamente estúpido de no poder elegir?

-¿Seguirás siendo mi amigo... de verdad?- le murmuró.