Una mente oscura [EunHae]

Capítulo 66: Arreglando Asuntos.

Dave estacionó el auto con premura. Aquel sábado pintaba ser un día un poco más cálido, así que se le antojó ir a traer a Kibum temprano para pasar todo el día con él. Llegó hasta la cabaña y sin demasiado reparo, abrió la puerta. No se escuchaba ningún movimiento, así que supuso que Kibum aun dormía. Se quitó la chaqueta y caminó hasta la sala, buscando algún indicio de Donghae. Tendría que ser condescendiente una vez más. No quería ser tan cínico, pero algunas veces le dejaba ir indirectas que el pobre azabache no captaba.

Donghae salió del baño con el cabello mojado y ojos dormidos. No hacía mucho que se había levantado. Al ver a Dave de pie en el centro de la sala sintió que la sangre le hervía.

-Hola.- le dijo sin mucha delicadeza entrando a la cocina para prepararse el desayuno. Había pensado tantas cosas que decirle anoche y ahora... ahora se había quedado en blanco.

-Hola Haaaeee.- dijo caminando tras él.- buena mañana ¿No? ¿Ya se levantó el travieso?- dijo con cierta sonrisita cínica.

Donghae no se dio vuelta para mirarlo. Apretó el vaso en su mano por la rabia, dándose cuenta hasta ahora de cuántos dobles sentidos había hecho Dave riéndose de la ignorancia de él.

-Sigue durmiendo.- contestó con sequedad.

-Será que está cansado.- dijo jugando con uno de los tenedores.- Trabaja mucho...

El azabache no pudo aguantarlo más. Posó la taza en la meseta dando un gran golpe y se encaró a Dave.

-¿¡Te crees que soy tonto!?- le gritó de pronto.

Dave alzó una ceja al observar la actitud del azabache. ¿Qué le pasaba?, ¿Acaso lo habría descubierto?

-¿Tonto por qué?- dijo con vocecilla casi infantil.

-¡No te hagas el inocente!- le contestó Donghae con un grito, sin si quiera darse cuenta de que podía despertar a Kibum.- Tú... eres... eres un... ¿¡Cómo pudiste hacerme eso!?

Dave sonrió al fin, comprobando lo temido. Donghae se había dado cuenta de todo.

-Te dije que él se volvería codiciado.... Pero simplemente no me hiciste caso... tenía que quitarte del camino. Para quedarme con él. Y ahora lo tengo.

El azabache se quedó en blanco ante aquellas palabras. Lo miró como si no le conociera, dolía demasiado ver lo que él creía amistad no había existido.

-¡Creía que eras mi amigo! ¡No eres mal que un imbécil!- le gritó abalanzándose sobre él sin poder contenerse. Lo único en lo que podía pensar era un borrarle aquella estúpida sonrisa de la cara.

Dave se hizo a un lado, empujándolo. No creía que aquello se iba a complicar así. Sin embargo se sentía enfadado, pues a pesar de todo y aunque viera a Kibum como a "algo pasajero", se había encaprichado y no renunciaría a aquel sentimiento de protección tan fácilmente.

-¿Qué culpa tengo de que seas tan confiado y tonto?- dijo sin quitar la sonrisa.- lo tenías allí... haciendo todo para ti... y simplemente lo ignoraste. ¿Qué querías?, si no hubiera sido yo... hubiera sido cualquier otro... cualquier otro que le diera lo que tú siempre le negaste....

-¡No tienes por qué meterte en eso! Además... lo que me da rabia no es lo que hayas hecho con Kibum... si no ¡¡Qué te aprovechaste de nuestra amistad!!

Donghae apretó los puños con rabia tratando de contenerse, poniéndose rojo. Finalmente no lo aguanto más, estampó un puñetazo en el labio de Dave, haciéndole caer al suelo pues lo había cogido de improvisto.

Dave limpió la sangre que le salió ante aquel golpe. Debía aceptar que el azabache pegaba fuerte. ¿Se merecía ese golpe? Quizá sí... después de todo, había sido bastante aprovechado con esos dos.