Una mente oscura [EunHae]

Capítulo 32: Reencuentro

Kibum caminaba sin rumbo, aun abrumado por lo que había visto. Imágenes de cuando era más pequeño inundaba su mente, al recordar que su hermano había estado así con Kangin.

No podía creer que Donghae... que Donghae gustara de ello. Pero se miraba que lo disfrutaba. Se sonrojó al recordar la escena y se quedó parado un momento. Aquello era de locos. Pero lo que más le inquietaba era ese sentimiento en su pecho.... ¿Acaso eran celos? Se sentía celoso de ver que Donghae amaba a Hyukjae. ¿Acaso no le había profesado ese amor a él?

Empuñó las manos y se obligó a guardar la cordura. Era natural y obvio que Donghae buscara a otra persona a quien amar si él no le correspondía. Porque no podría corresponderle... ¿o sí?

-Estoy perdido.- dijo sentándose en un bordillo.- Donghae....

Sin darse cuenta, había llegado a unas pocas casas de su antiguo "hogar". Suspiró melancólicamente y se levantó, con intención de regresar a su nueva casa. Quizá Hyukjae ya no estuviera allí.

Mientras tanto, y precisamente en aquel antiguo hogar de Kibum, un hombre alto, de tez blanca y pelo castaño costo, salí de allí sumamente preocupado. Cerró casi de un portazo, en haber visto la casa en aquel estado le hizo reprocharse una vez más el no haber podido llegar antes a la ciudad.

Caminó raudo por las escaleras hasta llegar a la calle, mientras el roce de las telas de su traje entre si era lo único que se escuchaba en aquella solitaria calle.

Se mantuvo en dirección recta, calle abajo, de camino al hotel. Sacó el móvil de su bolsillo y se dispuso a marcar un número cuando una silueta no muy lejana llamó su atención. Sus ojos, de un café oscuro, se clavaron en esa persona y entonces se quedó de piedra, congelado, mientras los latidos de su corazón se aceleraban.

-¿Kibum?- Llamó desde allí, algo inseguro. No tenía la certeza de que fuese el chico que buscaba pues, habían pasado tantos años... pero algo le decía, quizás fuera la intuición, que no se equivocaba.

Kibum giró la cabeza al escuchar su nombre y se quedó parado contemplando al hombre que caminaba en su dirección. Vestía un traje bastante formal y se notaba que tenía ese aire de ejecutivo que tenían todos los de su clase.

-¿No me reconoces, hermano?

Kibum abrió los ojos cuando aquel hombre dijo aquellas palabras. Estaba en lo cierto... era su hermano.

-¿Leeteuk?- dijo frunciendo un poco el ceño.

Leeteuk asintió, con gesto grave. Tuvo el impulso de acercarse y darle un abrazo que compensara todos esos años de ausencia. Pero el miedo al rechazo estaba latente, así que dudó.

-Han pasado tanto años...- atinó a decir.

Kibum supuso que aquel no era el mejor de sus días. Justamente pensando en su hermano y ahora se le aparecía justo en frente de él. ¿Qué podría decirle? Había tantas cosas guardadas en su mente.... Pero no encontraba cómo expresarlas. Aparte del resentimiento que aun guardaba por haberlo abandonado junto a su padre.

-¿Qué haces aquí?- dijo viéndolo serio.

-Es una larga historia...- murmuró.- resumiré: he venido por lo que pasó con nuestro padre. En cuanto me enteré traté de coger el primer avión pero por muchas complicaciones no pude llegar antes.... Lo siento.

-Estoy bien.- dijo a secas-sobreviví.... Como todos estos años...

-Kibum.... Sé que te he decepcionado y que debería haber.... Haber hecho señales de vida. Pero tenía miedo a esto...

-Y tenías razón.- dijo dándose la vuelta.- no te preocupes... estaré bien y no necesitas dejar tu perfecta vida para ver si aún vivo o muero.... Despreocúpate....