Capítulo 68: Descubriéndote.

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Hangeng se removió entre las sábanas y abrió los ojos. Llevó una mano a su cabeza y recordó una vez más por qué nunca debía beber vino. Nunca le sentaba bien. Ni ese ni ningún otro licor. Se incorporó lentamente, tratando de ordenar los sucesos de la noche anterior. De repente se quedó helado... recordó claramente todo lo que le dijo a Heechul.

"N-No puede ser". Pensó sonrojándose.- ¿Qué le he dicho? ¡Demonios!

Saltó de la cama y observó hacia todos lados. Trató de calmarse, respirando profundo y tomando un poco de agua que siempre dejaba en su mesita.

-Tranquilo, Tranquilo... no has hecho nada malo.- repetía para sí.- no dijiste nada más... ahora puedes fingir demencia y asunto resuelto... sí, sí... demencia... sí...

Salió de la habitación rumbo al cuarto de Heechul, pero se dio cuenta que la cama estaba perfectamente tendida. ¿Acaso se habría ido?

-Lo asusté, pero claro... ¡Qué idiota soy!

Alborotó sus cabellos con sus manos, pero aun así siguieron tan lacios como siempre. Salió caminando desganado hasta llegar a la cocina y para su sorpresa, el pelirrojo estaba en la mesa comiendo un poco de cereal. Su corazón dio un vuelco y tuvo que contenerse para no sonrojarse demasiado.

-B-Buenos días.- dijo comenzando a fingir demencia.

Heechul alzó la vista al sentirlo llegar.

-Vaya, pensé que aún tardarías mucho más en despertar.- dijo volviendo a su desayuno.

-No me digas.... Bebí demasiado vino, ¿Cierto?- dijo sacando agua fría del refrigerados.- Nunca me hace bien... ¿Dije muchas tonterías?- dijo comenzando a beber de la botella.

-¿No recuerdas.... Nada?- Preguntó Heechul perplejo mirándolo fijamente.

-N-No- dijo fingiendo.- ¿Por qué?.... ¿Hice algo indebido?

-No, nada.- mintió Heechul bajando la mirada a su plato con cereal.- Dijiste alguna que otra tontería, producto del alcohol supongo.- murmuró.

-Recuérdame no volver a beber así.- dijo sentándose frente a él, más calmado. No quería fingir, pero se moría de vergüenza de pensar en todo lo que le había dicho a Heechul.

-Sí, lo recordaré. Si me llego a dejar hubiera acabado acostándome contigo y ni te hubieras acordado.- contestó fingiendo indiferencia.

Hangeng sintió aquello como un golpe directo. Se sonrojó completamente y tuvo que bajar la mirada para no delatarse.

-L-Lo siento.- atinó a decir.

-No pasa nada.- dijo el pelirrojo tomando otra cucharada más.- Todos decimos tonterías cuando bebemos de más.

-No han sido tonterías...

-Ni siquiera recuerdas lo que dijiste, claro que lo eran.

-Fue la verdad.- dijo casi en un susurro, agachando la cabeza más rojo que un tomate.

-¿Qué era verdad?- Preguntó entonces el otro, alzando la mirada, observándolo algo molesto.

-¡Todo!- dijo viéndolo al fin, sin poder bajar su sonrojo. Enseguida se arrepintió de haber dicho aquello... obviamente Heechul sabía que estaba fingiendo todo aquello del "No recuerdo".

-Olvídalo.- dijo levantándose sumamente avergonzado.

Heechul no entendía nada. Lo miró entre sorprendido y enfadado y se puso en pie agarrándolo del brazo con firmeza para impedirle la huida.

-¿Se puede saber a qué estás jugando? No eres un niño, pero te comportas como tal. ¿Me quieres decir qué es lo que pasa?

Hangeng desvió la mirada y buscó la manera de decir las cosas. ¿Qué le pasaba? No lo sabía. No sabía por qué ayudaba a un perfecto desconocido, a un hombre que sabía algo acerca del caso y que era tan apuesto como para llamar su atención. ¿Acaso era que quería protegerlo?, ¿Con qué derecho? Heechul ni siquiera confiaba en él... eso era seguro.

Una mente oscura [EunHae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora