Confusiones

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~Nat~
Al día siguiente desperté y cuando intente moverme no pude, abrí los ojos y ahí estaba Alice recargada en mi pecho aun durmiendo, se veía tan linda... He de admitir que, desde que conocí a Alice se me hizo una chica muy atractiva y no solo físicamente, ella tiene una personalidad que encantaría a cualquiera, es tan positiva, alegre y con un enorme sentido del humor.

Pero... ¿Qué es lo que siento por Alice? - me pregunté, sé que entre ella y yo hubo un click al instante, que seguía mis bromas y juegos como si me conociera desde hace mucho, me gustaba mucho estar con ella realmente la pasaba muy bien, pero... No, no, no, Nat deja de pensar en ello - me reproche -, mejor disfruta el momento, ya después tendrás tiempo para analizarlo. -note como Alice comenzaba a despertar.

-Buenos Días - le dije a Alice con una gran sonrisa.

Ella alzó un poco la cabeza e intento mirarme, ya que apenas iba despertando.

-Buenos Días Nat - me respondió abrazándome.

Por un momento no dijimos nada, pero el silencio sentaba bien, mire a Alice y su mirada era algo vaga... Tal vez sólo este cansada.

~Alice~
Desperté y lo primero que escuche fue la voz de Nat, no quería decir nada así que me aferre a su cuerpo evitando cualquier tipo de mirada, de repente se me vino a la mente Vane... Por alguna extraña razón me sentía muy mal, era como sí le hubiera fallado pero... ¿En qué? Sí ya no éramos nada.

Debía apartarla de mis pensamientos, al menos por ahora y simplemente disfrutar del viaje, me percaté de que entre Nat y yo había un silencio así que decidí romperlo.

-¿Dormiste bien? - le pregunte, vaya que pregunta la mía pero era lo que se me había ocurrido.

-Muy bien ¿Y tú?

-Bastante bien - me gire para mirarla y dedicarle una sonrisa la cual fue correspondida.

Nos duchamos y mientras nos cambiábamos, platicamos algunas cosas de la noche anterior, nada referente a nosotras claro... Más bien, de cómo la habíamos pasado.

Nat es tan jodidamente sexy, que ahora entiendo la obsesión de Irina hacia ella, su sonrisa tan perfecta, sus ojos, ese abdomen tan marcado, su cabello, sus labios... Wooow y pensar que por fin los probé provocando que me hiciera adicta a ellos...

-¿Alice? - me dijo Nat sacándome de mis pensamientos.

- Amm... ¿Si? - le respondí algo desubicada.

- ¿Quieres decirme algo?  O... Lo interpreto de tus gestos y tú mirada jaja mira que... He de confesar, que me siento violada por tu mirada. - me dijo Nat curiosa.

Al escuchar a Nat sentí como me sonrojaba y no sabía que responder ante eso; "Nat pensaba en lo sexy que eres" jaja definitivamente no era una opción - Si... yo te iba a preguntar que si... ya bajamos a desayunar - dije por fin.

-Jajajaja claro... eso, jaja vamos - me dijo Nat nada convencida por mi respuesta y con una enorme sonrisa.

Al parecer se imaginaba lo que pensaba; pero el volver a besarla era un pensamiento que tendría presente, algo que sin duda desearía volver hacer; así que no lo pensé más y justo antes de salir de la habitación Nat abrió la puerta, mientras yo en un impulso la cerré un poco dejándola emparejada para obtener su atención, lo cual, logré.

La tome de la cadera y me acerque a ella provocando que nuestros cuerpos quedarán pegados el uno al otro, le dedique una mirada, que después la desvíe para ver sus labios; veía la sorpresa de Nat en su rostro, pero también el deseo; y sin pensarlo pose mis labios sobre los suyos, nos besamos... Fue un beso que con tan sólo sentir sus labios capturando los míos me estremeció, mordí un poco su labio inferior, nuestro beso comenzaba a tornarse fuerte y apasionado, por lo cual nuestra respiración era agitada.

Love is loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora