Love is love

La vi...

Al día siguiente sonó mi despertador, me duche, me cambie y baje a desayunar con mi padre.

- Buenos Días hija

-Buenos Días Pa - le respondí, platicamos un rato y después él se dirigió a su trabajo y yo al colegio.
Iba caminando tranquilamente ya que tenía tiempo, debo confesar que el volver a ver a Vane me tenía realmente nerviosa, pero ansiaba que eso pasara, cuando de repente escuche un claxon el cual me asusto, voltee y vi a Nat.

- Hola guapa, ¿no quieres subir a mi auto? - me dijo con una voz muy seductora.

- Jaja disculpa pero no me subo con desconocidas - le dije a Nat bromeando.

- Jajaja ya me besaste, hasta me desnudaste y... ¿Me consideras una desconocida? Jaja - dijo Nat orgullosa de su respuesta.

Al escuchar eso quede en shock, ya que no esperaba una respuesta de ese tipo, sobre todo porque no habíamos tocado el tema desde que paso.

- Yo... - le decía mientras intentaba responderle, pero me puso tan nerviosa que no pude.

- Si... Suelo causar ese efecto de dejar sin palabras a las personas... pero vamos, sube - me dijo Nat con un enorme ego, abriendo la puerta del copiloto para que me subiera a su auto, lo cual hice.

- Eres tan poco modesta Nat... ¡Que aarrgg! - le dije una vez dentro de su auto.

- ¡Que arrgg... Te encanto! jaja - dijo Nat agregando su parte a lo que había dicho.

- Basta por favor Nat jaja - ¡Ay! Esta chica sí que sabía cómo volverme loca, pensé; llegamos al colegio y baje de su auto, nos dirigimos a nuestros salones.

- Luego te veo guapa - me dijo Nat.

Continúe caminando hacia mi salón, cada vez que me acercaba más mi corazón latía más rápido, sin duda alguna estaba completamente nerviosa, el volver a ver a Vane definitivamente me alteraba de alguna forma, más bien... De muchas formas. Cuando por fin llegue me detuve antes de entrar tome una gran bocanada de aire para intentar relajarme lo cual fue inútil, entre al salón y cuando volteé al lugar donde siempre nos sentábamos la vi, estaba ahí, sentada al final de la fila con sus audífonos y un libro que leía, se veía tan concentrada, tan hermosa... Mi corazón comenzó a acelerarse aún más, sentía esa necesidad de abrazarla, besarla, hablar con ella y decirle lo mucho que la extrañaba; sin embargo decidí reprimir dichos sentimientos.
En seguida entro el profesor y detrás suyo mis compañeros de clase; en un intento de tener algún tipo de acercamiento a Vane, me senté a su lado. Era raro ya que por un lado quería estar con ella y por el otro estaba su traición.

~Vane~

Llegue al salón de clase minutos antes como de costumbre, escuchaba un poco de música clásica mientras leía, cuando de repente una chica se sentó a mi lado no hice mucho caso ya que mi libro lograba captar toda mi atención, cuando tome un poco de aire, pero... ese perfume... yo lo conozco a la perfección, inmediatamente me tense, mi corazón se aceleró y por ende mi respiración, intentaba calmarme un poco lo cual fue imposible, deje de leer y baje el libro, me sentía muy nerviosa, mi atención se centró en dicha fragancia, gire la cabeza y si, ahí estaba Alice, mí Alice... Tan hermosa como siempre, con una pequeña sonrisa que al parecer me había dedicado a la cual correspondí sin dudar, por fin la veía nuevamente; he de confesar que estaba realmente sorprendida, es increíble el efecto que ella causa en mí... esa forma de paralizarme, con tan sólo estar cerca de mi, sin necesidad de hablarme, esa sonrisa tan jodidamente sexy... Cuando me di cuenta de que la seguía mirando, rápidamente me volteé y comencé a sonrojarme.
La clase paso y yo seguía muy nerviosa y a decir verdad algo incómoda, era muy raro no poder hablar con Alice, no tómala de la mano ni nada de eso; la clase término y decidí hablarle a Alice.