El Contrato II: Rompiendo las reglas

CAPÍTULO 10: "Victoria"

Victoria

En el momento que Matt regresa a la mesa, en donde Adam y Cami están teniendo una extraña conversación sobre hadas y mundos ficticios, mi estómago se llena de mariposas, ¿acaso nunca me acostumbraré a verlo tan perfecto con sus trajes y lindas corbatas, perfectamente combinadas? Si a eso le sumamos su perfume, que me deja medio borracha de enamoramiento, huele sexy, a macho alfa, a él.
   Se ve tranquilo, quiero preguntarle de que hablaron, pero cuando veo sus preciosos ojos mirándome, acompañados de esa sonrisa quita alientos, mi cerebro definitivamente se detiene, solo lo puedo ver a él. Como si fuera lo habitual, se inclina y me besa, yo como tonta, me quedo congelada, vuelve a besarme y entonces recuerdo que está Adam, no puedo evitarlo, estoy como un tomate, lo sé, nunca me han gustado las demostraciones de cariño en público. A él parece no importarle, y sonriente se va a trabajar.

-¿Porqué te ruborizas? -maldición ¿por qué me pasa esto?
-¿Porqué pasas tanto tiempo con mi hermanita? ¿Debería comenzar a preocuparme? -me burlo de él para cambiar de tema
-¡Claro que no! adoro a los niños -dice de inmediato, aun que no puede disimular una sonrisa, este es listo...
-Eso es extraño viniendo de don alérgico al compromiso -no te rías Victoria, no te rías
-Es cierto, pero eso no quiere decir que no quiera tener hijos
-No te veo cambiando pañales -debe estar bromeando, es normal en el
-No te veo a ti cambiándolos -maldito, no me gusta hablar de eso
-Cállate -digo porque no se qué más decir
-Vic, ¿puedo pedirle a Kim un poquito de gelatina? Sólo un poquito
-Sólo un poco -le advierto, porque sé que para ella un poco, significa mucho más que para mí
-¡Lo prometo!

Cami y su obsesión por la gelatina. Estoy a punto de decirle algo más a Adam, cuando aparece Evan, ya se va, se que tiene que ir a clases, pero lo voy a extrañar

-Vic, tienes que ir a visitarme, no me gusta estar tanto tiempo sin verte -está muy serio, no me gusta
-Lo prometo

Y del abrazo más largo y extraño, me despido de mi hermano, Adam es mucho más cálido que Matt, lo invita a regresar y pasar tiempo en la casa, y se marcha, está raro, pero decido no preguntar nada.

-¿Porqué mi hermano te sigue poniendo nerviosa? -vuelve a insistir
-Porque siento que para el todo esto es mucho más serio y... su presencia me... no sé, no me acostumbro, antes... solo vivía aquí, hace muy poco que tenemos una "relación" y...
-¿Acaso te asusta el compromiso? -Adam es demasiado intuitivo, lo odio
-Su mundo es muy... "sofisticado", no me acomoda mucho que tenga tanto dinero, no se
-¡Que insegura eres!
-No te burles, estoy hablando enserio
-Dime una cosa... -me mira en silencio unos instantes, va a preguntar algo privado ¡lo sé!

-Puedes...

-¿Es igual de serio en la cama? -¡lo sabía!

-No, y es todo lo que voy a decir

-Muy bien, con eso me basta por ahora

-Vaya, cuanto me alegro -esa sonrisa burlona

-Victoria, mi hermano está loquito por ti, comienza a creértelo, solo así conseguirás sentirte cómoda contigo misma, no seas tontita, eres una preciosura -y me guiña un ojo, es hermano de Matt, el maldito es atractivo, tengo que admitirlo

-Ok, ok, gracias, pero no es necesario un discursito que termine con declaraciones incómodas

-Ve por tus cosas, nos vamos

-Tengo que ver a Cami

-Deja al tío Adam

-Claro que no, tengo que cuidar de ella, aun que solo sea por un rato

-Bien, nos vamos en una hora

Me gusta Adam, para ser un mujeriego es bastante intuitivo, se que ayer estuvo todo el día con Cami porque yo parecía alma en pena, triste como una estúpida, y pensando que Matt me ignoraba a propósito.