Haciendo lo que ella le pidió, Matt le indicó la dirección del apartamento de Hank a su chofer y le ordenó explícitamente que tomara el camino largo, Victoria necesitaba calmarse antes de hablar con su papá.
-¿Matt? –preguntó luego de un gran y confortante silencio
-Dime -contestó con suavidad, mientras seguía acariciando su espalda
-¿No vas a preguntar nada?
-la curiosidad podía con ella-¿De qué hablas?
-preguntó confundido-¿No lo quieres? ¿Es eso? ¿No quieres ver al bebé? -soltó casi sin aliento, aterrada por su respuesta
-Victoria, Victoria... calma -pidió la mar de tranquilo
-Estoy hecha una histérica -dijo en un quejido, intentando tomar distancia, pero Matt no le permitió moverse un solo centímetro
-Sólo no es el momento, debes tener la cabeza colapsada con todo lo que está pasando, no quiero ensuciar tus lindos momentos con... con nuestro... bebé –finalmente lo había dicho, y no pudo evitar una sensación de alivio tremendo.
-¿Estás enojado conmigo?
-En absoluto
-¿Por qué no?
-Soy el único responsable de que las cosas sean de este modo
-...pero no lo sabías
-intentó ponerse del lado de Matt-Tengo toda una vida para preocuparme por el bebe, y no desperdiciaré un solo día... pero ahora tenemos que superar esto, para poder darle solo alegrías... respeto tus decisiones, se que está bien, confió en ti a ojos cerrados
-Matt –intenta decir algo, pero nuevamente no se lo permite
-Sólo... vas a tener que tenerme paciencia... Por muchos años pensé que no podría ser padre y, la verdad es que no sé cómo sentirme, no quiero decir nada que pueda hacerte sentir mal -hizo una pausa para medir su reacción-.Di que me entiendes...
Conmovida por su confesión, no pudo más que contemplar aquellos ojos azules, sinceros y arrepentidos. No sabía si debía darle la razón, aun no sabía si entendía su reacción, seguía igual o más confundida que antes
-Ya lo sabías, ¿Evan siempre lo supo? -decidió volver al desagradable tema que la llevó a perder todo su autocontrol
-Victoria, yo... -intentó explicarle, con la culpa reflejada en el rostro, aunque no era su culpa
-Me tengo que ir a penas dicten el veredicto -soltó a penas termino de hablar, algo molesta por la respuesta no dicha-¿Qué? ¿Por qué? –se alarmó
-Tengo... -intentó explicarse
-No te vayas -pidió alarmado, con un pequeño brillo de pánico en los ojo
-El bebe no está aquí, es muy pequeño y delicado para subirlo a un avión -explicó a la defensiva
-¿Dónde está? -se asustó
-Lo cuidan en la clínica, y la señora Rossi, le hace compañía
-Victoria, quiero que vuelvas a mí, ambos, los necesito
-Yo también quiero, pero tengo que resolver mi mierda antes
-¿Nos vamos a casar? -preguntó Matt, nervioso e incómodo
-¿Quieres hacerlo? ¿Conmigo?
-preguntó Victoria, muy seria-Más que nada en el mundo, Victoria
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El Contrato II: Rompiendo las reglas
RomanceTras vivir la noche que tanto tiempo evitó vivir, Victoria decidió que era hora de pasar la página, y para eso tenía a un hombre a su lado dispuesto a ayudarla. Las constantes desilusiones de sus seres queridos la llevaron a convertirse en una perso...