Una vez que Victoria consiguió calmar a su amiga, y el guardia las dejara solas, la llevó a una de las habitaciones de invitados. La dejó para que se refrescara y fue con Matt.
Nada más entrar, lo encontró de pie junto a la cuna de la pequeña Alice, estaba muy serio
-Hola... -susurró muy despacio
-Cariño, ¿va todo bien? ¿Te sientes bien? –se apresuró a preguntar al tiempo que se acercaba a ella a grandes zancadas
-Sí, estoy bien ¿Por qué estás despierto? –se inquieta
-No te sentí regresar, no has pegado un ojo desde que vine a la cama, ¿Qué te tiene inquieta? –inquiere con preocupación
-Es Sue... me preocupa. Desde que hablé con Adam, esta tarde, que no estoy tranquila
-Puedo hablar con David para que la traiga –sugirió Matt
-No será necesario, ella ya está aquí –suspira aliviada de tener a su amiga cerca, aunque no esté pasando un buen momento
-¿Acaba de llegar? ¿Ya lo sabías? –pregunta sorprendido
-No, solo bajé por un poco de agua y... ella acababa de llegar –se encoge de hombros
-Entonces te quedarás con ella ¿no es así?
-Sí, ¿vas a estar bien con Alice?
-Ya veremos cómo resulta –susurra algo nervioso
-Estoy en el segundo nivel, en la habitación de huéspedes individual, ve si me necesitas
-Ya veré como me las arreglo, no te desveles mucho
Y con un beso se despiden.
Decidida a averiguar qué es lo que está sucediendo con su amiga, Victoria regresa a la habitación en la que la dejó.
Sue, está sentada en el centro de la gran cama, esperándola. Tomando una larga respiración, se quita la chaqueta y toma asiento junto a su amiga.
-La he cagado, Vic –susurra nada más sentirla cerca
-No funcionan los lamentos, Sue, no conmigo, estas aquí, en Londres, quiero saber la historia completa
-Soy un desastre en cuanto a mi vida amorosa, eso lo tienes más que claro –aclara con amargura
-Sí, bastante claro, como cuando te dije que Adam es diferente
-Lo sé, Vic, no me mires así, voy a contártelo todo
-Es lo que pido, así que comienza a hablar –insistió Victoria, con paciencia, sabía que si ella misma era complicada, entonces su amiga era un caso aparte.
-Todo comenzó cuando conocí al sexy Adam, fue en casa del bombón ricachón con el que te vas a casar -le dedica una sonrisa de aprobación a su amiga-. Tú estabas en la clínica, creo que Eric fue quien lo llamó, fue cuando Matt estaba hecho un desastre, todo golpeado y desesperado porque te despertaras, hablamos y me encantó enseguida, el es un caballero, no dijo nada, pero sentía como me miraba, ya sabes, cuando repasan todo de ti, la primera mirada es física, escanean tu cuerpo, y la segunda es cuando analizan lo que traes y tratan de armarse una imagen de "quien podrías ser".
Todos estuvimos muy preocupados, Matt desaparecido, Eric hecho un manojo de nervios al no ver que mejorabas, y Adam comenzó a pasar, al comienzo el era ese sexy y atento macho que trata de hacerte sentir mejor, que te coquetea con cortesía para hacerte sentir linda... hasta que comenzamos a tocarnos, no de manera sexual, tontamente, lo cual me fastidiaba hasta que él lo comenzó a hacer.
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El Contrato II: Rompiendo las reglas
RomanceTras vivir la noche que tanto tiempo evitó vivir, Victoria decidió que era hora de pasar la página, y para eso tenía a un hombre a su lado dispuesto a ayudarla. Las constantes desilusiones de sus seres queridos la llevaron a convertirse en una perso...