Extreme Makeover (Maluma)

Cap. 34: Una nueva y mejorada versión

- ¿Verdad que esta hermoso mi anillo?- dice Leila por quinta vez desde que hablamos por Skype.

- Si Leila, esta hermoso, lo he visto un millón de veces, desde hace seis meses lo estoy viendo.- digo irritada.

- Lo siento amiga, se que me vuelvo cansona, pero creo que son los nervios, es que la boda esta tan cerca.- irradia tanta felicidad que parece que no le cupiera en el cuerpo.

- Créeme Leila, no es por la boda, tu siempre eres cansona, es tu naturalidad.- digo reprimiendo un carcajada.

- ¡Danielle!- chilla- No seas cruel.

- Lo siento- me aclaro la garganta- Solo cálmate Leila, deja que todo fluya, yo estaré por allá dentro de poco ¿okey?.

- Okey- dice mas calmada.- Ya quiero que estés aquí Dani.

- Los días se pasan volando Leila, ya veras que en un abrir y cerrar de ojos estaré allá contigo.

-¿ Por que siempre sabes que decir?

- Asistir a terapia por tres años me sirvió de algo- le guiño una ojo y ella sonríe. Observo que ella se vuelve a un punto a su izquierda y luego sonríe.

- Dani, te dejo, porque mi mama me acaba de avisar que mi futuro esposo acaba de llegar.- su expresión cambio de alegre a extremadamente feliz.

- Esta bien amiga, cuídate- dicho esto finalice la vídeo llamada.

- ¿Como esta Leila?- pregunto mi tía apareciendo en la sala, sentándose junto a mi en el sofá grande.

- Bien, muy emocionada con la boda- dije cerrando mi portátil.

- Y tu ¿te sientes preparada para regresar?- me miro fijamente.

- Si, me siento mas preparada que nunca.- dije con la mayor seguridad que había en mi.

Han pasado cuatro años, cuatro años en los que ha sucedido de todo. Mi vida tuvo muchos cambios, me aleje de todo lo que conocía para enfrentarme a un mundo desconocido. Tuve que acostumbrarme a otro país, otro idioma, otra casa, otros amigos, otra universidad, otra familia. Muchos lo tomarían como algo negativo, pero yo aprendí a vivir con ello, yo misma tome la decisión y yo misma asumí mi responsabilidad. No puedo negar que al principio me afecto mucho todo este cambio, pero día tras día iba volviéndome mas fuerte.

Durante los primeros tres años estuve yendo a terapia, un especialista trato mi caso, puedo decir que el trauma que sufrí debido a la perdida de mi madre, fue superado, así que solo basta que tome un tratamiento medico para que el asma no afecte mi sistema. Hace mucho tiempo que no sufro ataques de asma. También seguí con mis estudios de arquitectura en el instituto de arquitectura de la ciudad, hace un mes que me gradué y me siento muy orgullosa por haber alcanzado otra meta mas.

Por otro lado, mis amigos siempre han estado al pendiente, siempre me mantuve en contacto con ellos. Todos los jueves se reunían en un lugar en especifico para hablar via Skype conmigo, era muy divertido verlos a todos peleando por un turno para hablar y contarme como les estaba yendo. Ademas cada uno por su lado me escribía o me llamaba. Puedo decir que sigo conservando a mis viejos amigos y eso me hace sentir muy feliz. En una ocasión me dieron una sorpresa, viniendo a París todos juntos, pasamos un fin de semana grandioso. Leila y Theo vinieron a visitarme el invierno pasado, fue genial poder compartir con ellos. Realmente todos los días me levanto extrañando a mis viejos amigos, no es que aquí en París no haya hecho ninguna amistad, porque tengo varios amigos, pero ninguno como los chicos, ellos son muy especiales para mi y no creo que alguien pueda llenar ese espacio.

Estos cuatro años han sido cruciales para mi, he cambiado en muchos aspectos, de la vieja Danielle Jhonson que se desvivía por un chico y que se encerraba en su habitación a llorar a mares, no queda ni el rastro. Ahora me siento mucho mas segura que antes, ahora se que yo misma elijo quien quiero ser y que es lo mejor para mi.