El Dibujo del Destino |Editando|

Capítulo 3 (Parte 1)-"El Restaurante"

Realmente estaba agradecida con Fernanda. Aquel restaurante en el cual la habían recomendado realmente se veía bien. Había pasado las días posteriores leyendo respecto al lugar para estar más familiarizada cuando llegara.

El jefe de personal le había informado que, a pesar de tener experiencia previa en otros restaurantes, era un requisito en aquel lugar contar con al menos un certificado de asistencia a algún curso de capacitación.

Lo cual, evidentemente, ella no tenía. 

Pensó que ya estaría todo perdido, pero días después la llamaron diciendo que lo dejarían pasar pues estaban necesitados de personal. Sin embargo, no empezaría a trabajar de inmediato pues primero recibiría una especie de "entrenamiento" previo. No le parecía mal... mejor dicho, con lo que le pagarían incluso habría aceptado hacer aquel curso de capacitación.

Gracias al cielo no fue necesario.

Se puso sus lentes de contacto y cuando estaba a punto de maquillarse recordó las palabras de Fernanda... no creía que ir con tantas sombras y delineador fuera apropiado.

Suspiró. 

No estaba acostumbrada pero valía la pena. Si conseguía ese trabajo algunas cosas mejorarían.

Se puso algo básico, recogió su cabello en una coleta alta pues afuera hacía bastante calor y tendría que caminar un poco.

Aquel lugar no estaba muy cerca pero intentaba ignorar esos detalles desagradables. 

Al llegar suspiró pesadamente y acomodo su bolso. Solo había visto fotos del lugar por la noche ya que al parecer aquel era su horario más concurrido, pero de día se veía igual de elegante. Dos pisos y muchos estacionamientos, incluso algunos bajo techo. Una fachada impecable, moderno y elegante.

Caminó un poco hasta le entrada donde había un chico de pie. Estaba distraído en su celular, pero al escucharla acercarse levantó el rostro.

—Buenos días —dijo Alicia. 

El joven se vio algo aturdido al verla.

Alto y bien fornido, cabello negro, bien peinado, un pantalón de tela negra, un chaleco del mismo color, una camisa manga larga blanca y un gatito negro. Supuso que era el uniforme.

—Bienvenida al restaurante "Blue Sky"—dijo el chico con una sonrisa gigante llena de amabilidad. Parecía haber caído en cuenta de algo, pues seguía escudriñando el rostro de la chica con genuina curiosidad.

Wao.

Asintió y continuó caminando intentando ignorar aquella actitud.

Sin embargo, luego de tres pasos giró y miró hacia la puerta ahora cerrada. Por el papel ahumado no podía ver nada hacia el exterior pero... ¿Por qué se le hacia conocido aquel chico?

Sacudió la cabeza apartando el pensamiento y continuó.

Su vista se encontró con una pequeña sala o recepción, la que supuso era la de espera cuando el lugar estaba lleno. Detrás de un pequeño mostrador, había una muchacha con una falda negra de tela, por encima de su rodilla, una camisa blanca manga larga y un chaleco negro como el del otro joven.

La chica le sonrió amablemente. Tenía el cabello largo y negro, lo llevaba elegantemente recogido  lado. Pasaba sus ojos sobre una gran cantidad de papeles de forma tranquila y pausada. 

Al notar su presencia, puso su atención en Alicia y le sonrió con amabilidad.

—¿Tiene una reservación? —preguntó con un tono de voz tranquilo.