Unión (saga lux- fanfic )

Capítulo 15

Al día siguiente desperté muy temprano, entre más horas pasara con Kat mejor me sentiría aunque solo fuera por un momento.

Sentí a Kat en mi espalda así que me di media vuelta, aun seguía dormida era como mirar a un ángel, me sentía como un tonto al estar al lado de ella, un tonto enamorado, ella es mi barco nunca ha hecho algo malo para que cayéramos y ahora yo era el que estaba a punto de hundirnos.

Hoy sería un día especial, ayer antes de cerrar profundamente mis ojos decidí que era tiempo de salir de aquel lugar, pero no sin antes pedirle permiso al general Eaton. Me sentía como un adolescente pidiéndole permiso a los padres de su novia.

En la tarde decidí darle la noticia a Katy de que saldríamos a caminar, pero lamentablemente no íbamos solos; nos tenían que acompañar un par de guardias, quería privacidad pero que se le podía hacer. Salimos de la base con una canasta de picnic, el día estaba maravilloso y al lugar que iríamos quedaba a pocos metros de ahí, así que no tardaríamos en llegar.

El lugar era precioso había muchas flores, árboles, pinos, aves cantando, había de todo, a la mitad de aquel pequeño pero encantador bosque se encontraba una pequeña cascada que gracias a los reflejos del sol, era lo que adornaba aquel lugar.

Íbamos tomados de la mano como dos novios románticos, quería que siempre fuesen así nuestros días, que nunca nos preocupáramos de quien nos perseguía, de disfrutar todos los pequeños momentos.

Guíe a Kat debajo de un frondoso árbol que daba una grandiosa sombra y una magnifica vista a la cascada, saqué una manta de la canasta y la extendí en el pasto, ayudé a Kat a que se sentara y comencé a sacar la comida. Cada minuto daba las gracias por poder encontrarme a una persona tan especial como lo es mi princesa, la dueña de mi corazón, la futura madre de mi bebé, mi Kitten.

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Narra Katy

Me encantó el lugar a donde me llevó Daemon, se respiraba un ambiente agradable, por un momento olvidé que nos seguían un par de guardias pero el ir de la mano con Daemon me hacía sentir única y especial.

Estábamos comiendo unos deliciosos sándwiches hechos por mi esposo. Al acabar de comer nos encontramos platicando y riendo de cualquier tontería, me sentía bastante bien le hacía muy bien al bebé sentir mi alegría y escuchar a su padre.

-Vamos a caminar princesa, este lugar es magnífico- dijo Daemon, mirándome a los ojos y con una linda sonrisa de esas que me derriten.

-Está bien, seria perder el tiempo al no ir a caminar- le respondí con una sonrisa.

Me ayudó a levantarme y tomó de nuevo mi mano, caminamos alrededor de unas grandes rocas, nos tomamos algunas fotos con mi teléfono, y poco a poco nos fuimos acercando a la cascada, me encantaba este lugar tanta naturaleza junta era extremadamente fabuloso.

Llegamos a la orilla del rÍo por donde la cascada bajaba, Daemon se posicionó detrás mío y me abrazó, nos mantuvimos en silencio por unos minutos que se volvieron eternos, pero no de esos minutos extraños que te hacen sentir incomoda, era un silencio agradable que no quería que se acabara.

Caminamos de regreso a nuestra manta, Daemon se sentó recargando su espalda al tronco del árbol, y yo lo hice en el medio de sus piernas. Me gustaba estar así con esta paz y esta tranquilidad.

Las manos de mi luxen se posicionaron en mi vientre ya crecido, y comenzó a hablarle a nuestro bebé.

-Hola mi bebé hermoso, ya estamos esperando tu llegada con ansias ya queremos verte, tomarte de tus pequeñas manos. Mirarte dormir, sacarte sonrisas, jugar contigo en la bañera, leerte un libro porque eso es lo que vas hacer un lector o una lectora igual que tu madre y también tendrás un blog. Mi bebé te amo y nunca dejaré de hacerlo porque ustedes son mi razón de vivir.

Hermosas palabras le susurró Daemon, mis mejillas estaban realmente mojadas con mis lágrimas, me encantaba esta parte de mi luxen, cariñoso y amoroso, simplemente perfecto. Y después continúo conmigo.

-Te amo Kitten, te amo por sobre todas las cosas, siempre estaré a tu lado, nunca te dejaré, compartiremos todos los días de nuestra existencia y viviremos como la gran familia que somos y vamos a ser siempre, okay?- me reí por esa última palabra, se notaba que Daemon tomo uno de mis libros y leyó Bajo la misma estrella.

-Daemon yo no quiero ser tu okay- soltó una carcajada.

-Me descubriste princesa, solo quería hacerlo romántico, y se supone que tendrías que responderme con un okay

-Lo sé, pero no quiero ser tu okay, quiero ser tu infinito, que nada nos vuelva a separar, quiero que siempre estés a mi lado y nunca me dejes, quiero que seas mi siempre- dije de nuevo con mis mejillas más que mojadas.

-Siempre seré tu siempre princesa, te amo.

-Te amo Daemon......