Unión (saga lux- fanfic )

Capítulo 24

Ha pasado una semana, una muy larga semana. Seguimos sin saber nada de Daemon.

Dee y yo nos la hemos pasado cada día juntas mirando televisión, comiendo o durmiendo es todo lo que queremos hacer en estos momentos. Archer vino por ella hace unas horas, me invitaron a ir con ellos pero yo me negué no quería salir de mi casa para nada. Hoy era un día especial y quería al menos compartirlo con mi bebé, hoy cumplía siete meses de embarazo, mi panza ya estaba más grande y mi pequeño o pequeña era muy activo, en las noches no paraba de moverse y no me dejaba dormir, pero sentir a una vida dentro de ti lo valía todo.

Salí al jardín y me encaminé a una de las sillas que estaban junto a un pequeño pero frondoso árbol, a Daemon y a mí nos encantaba estar debajo de este árbol, se respiraba paz y era un muy buen lugar para pensar. Si tan solo supiera que está pasando con Daemon sería mucho mejor. Esta semana me he sentido más sola que nunca, con el simple hecho de entrar a cada habitación de la casa me recuerda a Daemon, su ropa, su olor, su risa, sus bromas, su todo está encerrado en estas cuatro paredes; me siento tan estúpida en las noches tratando de hablar con una fotografía de él, cada día es lo mismo no puedo dormir si la fotografía no está cerca. Me levanto llorando en las mañanas antes de que salga el sol, y solo un pensamiento está en mi cabeza, ¿en donde esta mi luxen, en donde está Daemon?

Perdí la noción del tiempo, me encontraba en el mismo lugar y la noche comenzaba a caer, me levanté y me dirigí a la cocina tenía que comer sino el bebé sufriría las consecuencias de no hacerlo. Comí un poco de fruta con yogurt, al finalizar lavé mi plato y subí a mi habitación no sin antes realizar una pequeña visita al cuarto que sería de mi bebé.

Abrí la puerta lentamente y encendí la luz, toda la habitación estaba como la habíamos dejado antes de todo este caos, los muebles ya estaban aquí, solo faltaba pintarla y colocar algunas decoraciones pero no quería continuar el trabajo si Daemon no estaba conmigo. Unos minutos después de cerrar la puerta escuché varios gritos afuera, me quedé como estatua y me dispuse a escuchar, no distinguía las voces y yo no hacía nada por moverme de aquel lugar, hasta que escuché a alguien decir.

-Búsquenla por toda la casa lo más seguro es que este en la parte de arriba pero comencemos aquí abajo hay que ir eliminando habitación por habitación.

Mi dios, ahora que hacía, quienes eran esas personas, mi corazón comenzó a latir mil por hora caminé silenciosa a mi habitación y puse seguro a la puerta. Estaba tan asustada, ahora que hacía en donde me escondía. Mientras trataba de conseguir un lugar en el cual esconderme, comencé a oler humo, como si se estuviera quemando algo. Abrí lentamente la puerta y me arrepentí de hacerlo, la planta baja era iluminada por el fuego, cerré rápidamente y me dirigí al baño, espero que lo que he visto en la televisión sirva en estos momentos. Tomé varias toallas que se hallaban debajo del lavamanos y comencé a mojarlas, las empapé de agua y enseguida las coloqué en el piso junto a la puerta, esto conseguiría que el humo no entrara solo espero que funcione. Estando en el baño no tenia escapatoria si el fuego seguía aumentando moriríamos quemados.

-Kat... Kat- escuchaba una voz a lo lejos, pero no podía abrir mis ojos.

-No reacciona tenemos que llevarla a la base rápido.

Mi último pensamiento antes de sumergirme en la oscuridad, fue que no quería regresar a ese lugar de nuevo.