Sindrome de estocolmo, Robert Lewandowski

Volviendo al principio 43

Solo quería salir para despejarme y pensar las cosas, pero termine secuestrada por... mmm, no se quien me subió al auto, no se quien me dejo en este lugar oscuro, solo se que estoy bajo el poder de Robert, ya sabia el motivo pero no me había dado los tres días que me había dicho que me podía tomar para pensarlo, sinceramente nunca uno esta preparado para ese tipo de respuesta, ahora estoy privada de ver el mundo exterior hasta no se cuando. El lugar era frió y húmedo, eso me generaba terror y escalofríos, mi vestido estaba en condiciones y mi cuerpo no tenia moretones, estaba tal cual de como salí, era un lugar tenebroso y escalofriante, desolado, no tenia escapatoria ni podía pedir ayuda, nadie me podría escuchar. Mi cabeza daba vueltas y me sentía un poco descompuesta, ya que el cloroformo me provocaba eso. Todavía yo seguía tirada en el colchón por los leves mareos, me retorcía del dolor espiritual y las lagrimas no pararon de salir de mis ojos, me detuve cuando escuche pasos sigilosos detrás de mi y sentí como rápidamente la mano de Lukas se poso en mis labios, impidiéndome protestar. Me retorcí de la angustia queriéndome zafarme, pero simplemente provocó que mi cuerpo fuera atraído hacia el, hasta que mi espalda hizo contacto con su pecho.

-Tranquila Daniela- lo escuche decir

Lo ignore, y seguí con la táctica de alejarme de el. Lance patadas y golpes con las manos, pero su brazo rodeo mi cintura y detuvo mis movimientos. Derrepente se apareció Robert y se acerco hacia nosotros para decirle algo al oído a Lukas, algo así como que: "no saben que esta acá" y le pidió que se retirara, no entendí muy bien ya que la desesperación no me dejaba escuchar con claridad. Lukas se fue dejándonos solos a los dos en la misma habitación, yo le daba la espalda a Robert de rodillas en el suelo, lo odiaba mucho, la impotencia era lo único que me dominaba, ademas del miedo

-Cariño, sabes por qué estas acá?- dijo el, pero yo opte por ignorarlo

-Pensas ignorarme?- insistió el, pero yo seguía con mi estrategia de seguir haciéndolo

El se acerco hacia mi, pero yo no me gire, estaba petrificada, se agacho para que su cara este a la altura de la mía, rozaban nuestras mejillas pero yo seguía mirando hacia un punto fijo inmóvil sin dejar caer una sola lagrimas mas

-Recorda, que las personas que mas amas, podrían sufrir daños irremediables por tu culpa- dijo en un susurro en mi oído, depositando un beso en mi cuello rígido. Me gire hacia a el y sus ojos me miraban e hizo que me estremeciera, mis mejillas se tornaron rojas, el me intimidaba demasiado y eso me gustaba, uff que masoquista que soy!

Nos quedamos mirando un par de segundos y dije lo siguiente:

-No te creo una sola palabra querido- dije sonriendo con ironía mirándolo a el

El se sorprendió por lo que dije, levanto una ceja y pregunto con un hilo de vos -¿ A no?

Su pregunta me hizo reaccionar y no debía enfrentarlo, porque sabia que el en verdad hablaba enserio, lo buscaba con prepotencia 

-No me subestimes ni pases los limites 

Me sentí medio incomoda pero no tenia que enfrentarlo porque no sabia de lo que el seria capaz de hacerme. no le respondí ni lo mire a los ojos, trague saliva incomoda 

-Si no me crees- y me extendió la mano para que yo se la agarre pero solo me quede mirandosela-veni conmigo y te llevo a ver a tus "amigos"

-Te odio tanto y con mi vida- le dije mirándolo con bronca 

-Uy preciosa! en mis sueños no te veía así de enojona- dijo muy cerca mi boca

-Cómo me veías entonces?-pregunte muy sumisa 

-Yo te veía disfrutar- y me dio una sonrisa el muy caradura

Se dirigió a la puerta para salir y salio riendo, me dio miedo pero...

-NO TE VAYAS !- suplique-No me dejes...

El se dio vuelta para mirarme seductoramente y se dirigió con lentitud hacia mi, me agarro el mentón y me penetro una mirada fría y calculadora

-Voy a volver y te voy a ayudar a tomar la decisión.