DISCULPEN POR EL ERROR DE AYER... ANDO CANSADA
Llegué a casa en cuestión de segundos, habiendo pasado por una tienda de ropa, comprando ropa de deporte y zapatillas. Donghae me dejó en un taxi y luego también se marchó, llevándose mi cartera, mi ropa y zapatos para que Siwon no los viera, puesto que había dicho que había salido a correr. El taxi me dejó a unas cuadras de la casa alboroté mi cabello y regresé corriendo hasta la casa.
Al llegar mi marido estaba esperándome en la sala, con las piernas cruzadas y su mano en su barbilla, observado detenidamente hacia la nada, y muy pensativo.
Tragué saliva y caminé hasta él. Actúa normal (TN). No pasa nada.
-Buenos días amor-sonreí acercándome para tomar asiento a su lado y reposar un beso en sus mejillas-Vaya sorpresa la que me has dado. Duró muy poco tu viaje-
-Se canceló todo-Habló observándome con ojos serios y perdidos en pensamientos. ¿Por qué tenía tanto miedo en estos momentos? No... (TN). Solo actúa con normalidad. No va a descubrir nada.
-Eso es bueno. Te he extrañado mucho cariño-Sonreí curvando los labios-
-¿Estás muy feliz hoy?-Preguntó arqueando las cejas-Te noto extraña-Lo observé expectante. ¿Qué si estaba feliz? ¿Tanto se me notaba?
-Claro cariño. Hace tiempo que no salía a correr. Sabes que paro asfixiada y de vez en cuando necesito un poco de aire fresco-
-Genial-se inclinó y me besó en los labios-Vete y date una ducha cariño. Te espero para desayunar.
Asentí sonriente y me dirigí a la habitación, y luego al cuarto de baño. ¿Estaba feliz? Era más que eso. Me sentía realizada y totalmente completa. Ahora más que nunca tenía la necesidad de buscar a DongHae para estar siempre a su lado, entre abrazos y caricias... lo necesitaba tanto a mi lado.
El desayuno, como siempre fue silencioso. Cada uno en un extremo de la gran mesa, en silencio mientras leía el periódico. Me aburría y cada vez caían en cuenta que esta vida tal vez jamás fue para mí.
Pasé el día redecorando la casa, buscando nuevos muebles y cortinas que combinaran la casa. Tenía que ocuparme de algo o terminaría escapando para ir a buscar a Donghae. La idea de que estuviera con Seohyun en estos momentos me volvía loca.
-Cariño-me llamó mi esposo llegando hasta la sala, en donde me encontraba-
-Dime ¿Qué ocurre?-
-Ya tengo nuevo guardaespaldas para ti-Abrí los ojos como platos. ¿Nuevo? ¡No! Quiero a Donghae como guardaespaldas-
-¿Quién es?-
-Ah. El señor Lee. Ha aceptado ser tu guardaespaldas nuevamente-Sonrió curvando los labios-
¡Si! Pegué un brinco en mis adentros, sin poder evitar dibujar una sonrisa en mis labios, que rápidamente traté de ocultar bajando el rostro-
-Era lo mínimo que pudiera esperar-Dije seria-Gracias por complacerme cariño-Me acerqué para abrazarlo y reposar otro besos en sus labios- ¿Cuándo volverá a la trabajo?-
-Acaba de llegar-sonrió-Pasa-Ordenó tras la puerta. Solté de inmediato a Siwon, viendo cómo Donghae ingresaba con el ceño sin expresión alguna, la barbilla recta y mirando siempre al frente.
Hoy traía puesto una casa blanca de Lino, unos pantalones que le quedaban a la perfección, cayendo por sus caderas. Su cabello estaba levemente alborotado y traía también una hermosa corbata negra con rayas blancas que combinaba a la perfección con su traje.
ESTÁS LEYENDO
Daydream. Lágrimas de hielo
FanficLa ha amado desde que tiene memoria, ella siempre ha sido la única mujer por la que ha dado podo por el todo; pero los sentimientos son inciertos y las apariencias también. Él es un hombre entregado a ella, es su primer amor y está dispuesto a hace...