Daydream. Lágrimas de hielo

~Capítulo 15~La prometida de Donghae

-Hola, Seohyun. Qué bueno verte—La saludé con la mano mirándola irónica. "maldita traidora"

Su labio inferior empezó temblar al mismo tiempo que parecía tratar de pronunciar mi nombre. Ella parecía bastante sorprenda por mi repentina aparición—

-Ha pasado mucho tiempo—Pronunció al fin, subiendo la manos hasta el brazo de DongHae y aferrarse a él para luego sonreírme un poco tímida— ¿Cómo has estado, (TN)?—

-Perfecto—sonreí levantando las manos de manera irónica—Más que perfecto. ¿Sigues viviendo por aquí? Hasta he notado que ya tienes novio. Vaya... quién lo diría—

-Entremos—Habló Donghae sujetando a Seohyun—

-Amor—le sonrió ella colocando sus manos en su rostro y sujetarlo para reposar un pequeño beso en ellos—No seas mal educado. No estaría nada mal que charláramos un rato—

-Claro—sonreí exagerando mi timbre de voz—Que falta de educación ¿Por qué no me invitas a pasar, DongHae? ¿Una taza de café? Me duelen los pies ¿Sabes?—

-Claro—giró él, observándome como si nada y esbozando una sonrisa un poco entristecida—(TN) ¿quieres pasar para que charlen un rato? Tu presencia en mi casa va alegrar a muchos—Mordí mis labios sintiendo la ironía de sus palabras, pero no me importaba... ya me estaba metiendo en la boca del lobo y estaba a dispuesta a más—

-Muchas gracias—sonreí levantando la barbilla y empezando a caminar hacia adelante, recta y esterilizada. Mostrando orgullo y dando imagen de seguridad. Nadie podía derribarme... nadie y menos Seohyun.

-¿Pasan?—sonreí colocándome delante de ellos. Donghae me observó con los labios entreabiertos y pude notar que con claridad que desvió sus ojos en un movimiento rápido por el escote de mis pechos, haciéndome sentir desnuda y pudiendo comprobar que solo trataba de controlar los mismos impulsos que yo tenía hacia él: abrazarlo y besarlo para sentir sus manos sobre mi piel desnuda, sus labios recorriendo mi cuerpo... había cambiado de opinión... lo quería solo para mí.

Donghae se chocó con mi mirada y luego se giró para darme la espalda, y extendiéndole la mano a Seohyun ingresaran a la casa. Ingresé también a ella y cerré la puerta.

-Caminé por el pasillo, recordando muy bien la casa. Un olor a especias mescladas en un guisado llegó a mi nariz. La madre de DongHae siempre me había parecido una excelente cocinera... y le fascinaba que le ayudara porque siempre eme había tratado como a una hija, pero ahora no creo que le sea muy agradable verme.

Caminé tras ellos hasta llegar a la sala, en donde tuve la agradable y, a la vez, desagradable sorpresa de encontrar al padre de DongHae allí, sentado y con una revista en manos. Tragué saliva sintiéndome nerviosa... ¿Qué es lo que han de pensar ahora de mí? No me extrañaría que su madre termine botándome de su casa.

-Buenas noches—Saludé cuando ingresé. Sus ojos se despegaron en segundos de la revista y se clavaron en mí, completamente enmudecido y sin decir ni una sola palabra—

-¡Madre!—Gritó Seohyun ¿Ahora llamaba madre a la madre de Donghae?—Tenemos visita—

-¿ah?—Salió una mujer con un mandil, la cual reconocí de inmediato. Ella seguía tan hermosa como la recordaba. Se veía un poco alborotada pero al verme dejó caer un pequeño depósito de plástico de la mano y entreabrió los labios, dejando mostrar su sorpresa al tenerme allí, en su casa—

-Buenas noches, señora Lee—Sonreí levantando la mano—

-Buenas noches—Habló dejando de lado su sorpresa y frunciendo las cejas para hablar con dureza en sus palabras—