—Toma —le había dicho Zayn esa tarde de noviembre en el pequeño salón de su piso de estudiantes. Se había sentado a un lado de Louis y le había pasado el porro recién encendido tras darle una larga calada —. Se la pillé el otro día a Damien, últimamente está vendiendo maría de mejor calidad, y además me lo ha dejado más barato —explicó Zayn. —. Fuma, te va a relajar.
—Eso espero.
Louis había aceptado el porro y en solo dos segundos ya le había dado más de tres caladas bajo la atenta mirada de sus amigos, Niall y Zayn; los únicos que habían aceptado dejar a un lado sus apuntes universitarios para socorrerle en su crisis existencial.
—Entonces... —musitó Niall, quien había preferido optar por la comida antes que las drogas y estaba engullendo una hamburguesa doble mientras miraba a Louis con curiosidad —... ¿a qué se debe esta visita?
Louis resopló, soltando humo de su boca en el proceso.
—Sam y Harry me han echado "sutilmente" de casa.
Una risa floja se escapó de la garganta de Niall, pero carraspeó al notar la mirada de odio de Louis clavarse en su existencia.
—¿Qué pasa, querían la casa entera para follar? —inquirió Zayn con diversión.
—Querían una "tarde romántica de pareja" —hizo comillas con sus dedos antes de chasquear su lengua —. Así que sí, supongo que ahora están follando en cada rincón de la casa.
—¿Y estás enfadado porque te da envidia que ellos follen y tú no? —preguntó Niall, notando la actitud poco amigable de Louis —. ¿O porque te han echado de tu propia casa?
—No —negó Louis —. No, no estoy enfadado. Solo estoy molesto. Pero no por eso, es solo que... —resopló, pasándole el porro nuevamente a Zayn —. Joder, no lo sé, en estos cinco meses que llevo compartiendo piso con Harry ya he visto más peleas entre ellos que en un reality de las Kardashian. Ahora parece que están genial pero... les doy una semana para que vuelvan a discutir.
—Bueno, ya sabes cómo es Sam, no sé de qué te sorprendes —Niall se encogió de hombros, restándole importancia al asunto.
—Ya —farfulló molesto —. Siempre he sabido cómo es, pero nunca lo había vivido desde tan cerca —admitió —. Tienen literalmente cinco días buenos al mes, el resto, son peleas. Y yo vivo con Harry, siempre está triste y sé que la culpa es de Sam. ¿Se supone que tengo que hacer oídos sordos a la manera en que le trata? Porque estoy a muy poco de decirle un par de cosas al respecto; y no son agradables. No estoy muy seguro de poder aguantar en silencio durante mucho más tiempo.
—Voy a aconsejarte, Louis. No te metas en nada —le advirtió Zayn seriamente, y Niall le secundó, asintiendo con la cabeza.
—Sé que tu afan de querer utilizar tus habilidades de psicólogo te superan, pero al fin y al cabo Harry no es quien ha estado durante prácticamente toda tu vida a tu lado, ese ha sido Sam —puntualizó Niall —. Eres literalmente el único amigo del que no se ha olvidado, ni siquiera cuando te fuiste de la ciudad, así que no veo por qué deberías meterte en un asunto que no te concierne en nada y arriesgarte a perder a tu mejor amigo. El problema solo lo tiene Harry.
—Pero que sea mi amigo no quiere decir que no pueda decirle que está equivocado —discutió Louis, arrebatándole el porro a Zayn y fumando como si no hubiera un mañana.
—¿Y qué ganas diciéndole eso? Tú mejor que nadie deberías saber que cuando alguien está en una relación toxica, no se da cuenta. Harry no va a dejarle aunque le intentes poner en su contra, Sam probablemente se enfade por haber intentado romper su relación y el único que termine perdiendo en todo esto, serás tú.
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Housemates
FanfictionCuando compartes piso con el novio de tu mejor amigo, las prohibiciones son muchas, pero Harry llegó a la vida de Louis de la manera más caótica posible, y ambos conectaron como si se hubieran encontrado a sí mismo reflejado en el otro. Un alma geme...