El secuestro

Capítulo 20

-¿Qué es lo que más amas?-Le pregunté, mientras él agregaba un poco más de queso a las palomitas.

-¿Amar o gustar?-La luz era escasa, pero podía sentir una atmósfera realmente tranquila y una sonrisa que me acechaba.

-Vamos con gustar.

-Creo que estas palomitas-Arrojó una al aire y la capeó exitosamente con la boca-Son excelentes.

-Creí que los videojuegos eran tus favoritos.

-Acompañados con palomitas serían mi segundo amor.

Había una película de terror con gritos ambientando la sala de estar. Mientras que yo estaba momificada en un grueso cobertor, "Señor" estaba en el suelo, comiendo gustosamente las palomitas.

-No entiendo por qué esta película-Dijo-Es realmente mala.

-Pero cuando la chica rubia apareció mostrando los senos no pareció molestarte-Soltó una carcajada.

-Vamos cariño, los senos grandes no me impresionan-Se sentó a mi lado y me rodeó con su brazo-Aunque al perecer el abdomen bien cincelado del chico tampoco parecía molestarte ¿O sí?-Le di un golpe en el hombro.

-Los abdómenes bien cincelados no me impresionan-Mientras la película continuaba, él le prestaba atención, podía jurar que estaba tratando de memorizar cada diálogo o frase importante de las escenas, incluso creo que intentaba buscar detalles de qué burlarse luego, mientras que yo estaba distraídamente viéndolo ver la película.

-¿En qué escuela estudiaste?-Apartó la vista del televisor.

-¿En qué escuela estudié?-Me vió con incredulidad y le puse una mirada de "Hablo en serio"-Harvard-Puse los ojos como platos ¿Harvard? ¿En serio? ¿Mientras que yo planeaba irme a un internado a Canadá él estudió en Harvard?-Recién me gradué.

-Oh ¿Así que tengo un novio súper dotado?-La palabra "Novio" me volvió a incomodar, pero a él parecía no importarle.

-Que no te sorprenda, yo tengo a una novia con una habilidad increíble para hacer caer una bola de papel en un bote de basura en un solo intento-Me daba un poco de coraje que alabara pequeños detalles, eso no es genial, lo hace cualquiera, pero ir a Harvard, tener una mansión, un estupendo atractivo físico y un coeficiente intelectual alto, eso, eso era realmente increíble.

-Sí pero yo no estudié en una escuela de prestigio...-Tomó mis labios.

-Sh-Asentí. Me zafé de sus dedos.

-¿Qué significa el corazón?

-¿Qué corazón?

-El que está en el techo de la cocina, cada día desde que llegué lo veo. Y siempre he tenido esa curiosidad de saber qué significa.

-Oh-Pensó un momento-Cuando llegué aquí, siempre quise expresar de una manera no muy abierta lo que sentía, el infierno que era estar aquí siendo la causa de cientos de muertes. Digamos que el diseño es lo que soy interiormente.

-Pero no hay nada específico en ese diseño...

-¡Exacto!-Me interrumpió-Soy un completo desastre.

-Entiendo lo de las figuras desiguales en el techo, pero el corazón...

-Significa todo. Significa que aunque haya contribuido de manera notoria a la trata de blancas, no soy tan "Monstruo". Todos tenemos la capacidad de sentir, a eso me refiero-Lo miré.

-Cuando te vi, no me pareciste un monstruo-Tomó mi mano y le dio un beso.

-Lo sé.

Al día siguiente no se despidió, pero dejó una nota, lo que se supone que debería arreglar la situación.
Cuando por fin había vuelto de no sé donde, había algo en su muñeca.

-¿Te tatuaste?

-¿No te gusta?

-Me gusta-Le dije-¿Dolió mucho?

-Digamos que el tatuador no fue muy amable-Reí-Es una ecuación-Me dijo-La más hermosa del mundo.

-Jamás pensé que algo químico fuera hermoso.

-Esto lo es-Lo vi con más detenimiento. Era complicado y parecía más bien un símbolo egipcio que una ecuación.

-¿Qué significa?-Fue entonces cuando llegó Tedd algo atareado, con gotas de sudor corriendo por su frente y una vena que estaba a punto de salir de su cabeza. "Señor" mantenía la calma, se puso rápidamente su campera de cuero que no sé realmente de donde salió y ambos se fueron a toda prisa. Intenté no sentirme herida, más que nada estaba algo preocupada.

No se despidió. Lo que indicaba que tenía prisa y era en serio importante.
Fui a revisar a los cachorros y ambos estaban echados en mi cama, les dejé un poco de comida en un rincón y me dejé caer a un lado de ellos, uno se levantó y se puso encima de mi Me.

-Al parecer estamos solos-Mientras le acariciaba su cabecita algo nos sobresaltó a los tres, un ruido, no, no, más que eso. Este era ensordecedor. Esperé a que se repitiera pero no hubo nada. Supongo que algo se había caído o fue un trueno.

Fue entonces cuando escuché las voces de Tedd y "Señor" en el fondo, digamos que me molestó un poco la forma tan precipitada de irse. Me quedé de nuevo a un lado de mis cachorros, ya que "Señor" no pensaba decirme su verdadero nombre, debía ser lo suficientemente creativa para inventar dos y no arrepentirme luego.
Mientras estaba en una guerra conmigo misma detecté un sonido vibratorio, alcé la vista y una de las cámaras de movía de un lado al otro. Podía sentir que "Señor" me llamaba.

Le mostré el dedo medio y la cámara dejó de moverse, fue entonces cuando la puerta se abrió y "Señor" entró con el rostro y la mandíbula tensada.

-Oye ¿Por qué la seña obscena?-No estaba molesto, pero me un leve sentimiento de culpabilidad rebotó en mi cerebro.

-Por nada.

-No te comportes como ese tipo de chicas y por favor dímelo.

-No-Le di una pequeña sonrisita.

-Lo siento-Me dijo-Solo que fue de mucha urgencia.

-No importa-Estaba siendo sincera.

-Sí importa-Me rodeó con sus brazos, estaba con un aire húmedo.

-Tienes prioridades, te entiendo-Me alcé de puntitas y le di un pequeño beso, con mi labio superior tocando su labio inferior. Pegó su frente a la mía y suspiró.

-Tú importas mucho más que cualquier prioridad.

-Te creo-Me besó otra vez, con un poco más de intensidad.

-Los cachorros nos están viendo-Giré y ambos tenían los ojos muy abiertos, con nosotros dos reflejándonos en ellos.

-¿Ya sabes como llamarlos?

-Sal y pimienta por el momento-Hizo un gesto de desaprobación y luego me lanzó una mirada divertida.

-¿Sal y pimienta?

-¿Se te ocurre algo mejor?-Miré hacia abajo y por el rabillo del ojo vi de nuevo su tatuaje, algo rojizo e hinchado de los bordes, lo acaricié con mi pulgar y sentí el contorno del dibujo, era suave.

-Es la ecuación de Dirac-Me dijo sonriendo-Se describe el fenómeno del entrelazamiento cuántico. Si dos sistema interactúan el uno con el otro durante un cierto periodo de tiempo y luego se separan, los podemos describir como sistemas separados, pero de alguna manera sutil están convertidos en un solo sistema. Uno de ellos sigue influyendo en el otro, a pesar de estar a kilómetros de distancia o años luz-Estaba encontrando una nueva belleza en el tatuaje, lo que antes me parecía un dibujo con símbolos griegos ahora es algo mucho más significativo-Esto es el entrelazamiento cuántico-Continuó-Dos partículas que, en algún momento estuvieron unidas, siguen estando de algún modo relacionadas. No importa la distancia entre ambas, aunque se encuentren en extremos opuestos del universo, la conexión entre ellas es instantánea-Y esto, es lo que es tener un novio graduado de Harvard.

-Wow...-Es lo único que pude articular.

-Eso es lo que eres para mí-Esbocé una sonrisa de oreja a oreja-Te amo-Y me volvió a besar.