Capítulo 12

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—Luis por favor vota esa goma de mascar-grita mi profesor haciéndome mirar de golpe al chico mencionado.

-No profesor esta muy rica-la mastica exageradamente haciéndola sonar y creando burbujas con ella para explotarlas con sus propios dientes.

-La votas o te sales?-mi profesor se acerca al asiento del chico señalando la salida del salón.

-Profesor José Monroe no sea pesado-hace intento de poner cara de cachorro,pero se que no le funcionará con este hombre tan estricto y poco comprensible.

-Yo he hablado-Luis toma su goma de mascar y la echa en el safacón,hace cara de dolor al echarla solo porque hace unos pocos minutos la ha comenzado a mascar y supongo no quiere votarla.

-Oh perdón y buen día Señor José-Thomas se presenta en la puerta llamando la atención de todos los alumnos presentes.

-Thomas espereme fuera del aula por favor-el chico mira hacia su izquierda uniendo tanto sus labios hasta ponerlos en una sola linea,le hace ver furioso.

-Profesor,que no puedo llegar un poco tarde por primera vez en su hora?-se pasa la mano por su cabellera haciendo el intento de recojer un mechón de cabello que se ha atrevido a salir.

-Puedes pasar-Thomas asiente acomodandoce su mochila-solo porque es la primera vez.

-Gracias profesor-comienza a dar pequeños pasos hacia un lugar vacío mientras yo le acompaño con la vista hasta donde va.

Creo que hoy el profesor no esta de buen humor, aunque si tiene razón en las cosas que ha estado llamando la atención,después de unos minutos veo que Esthela tiene en mano mi espejo que le había prestado hace unos días ya pasados, no presto atención a eso porque siento que no es una prioridad para mi.

-Esthela paseme ese espejo-el maestro extiende su mano hacia mi amiga y puedo ver como esta queda sorprendida y sin saber que hacer.

-Pero profesor ese espejo no es mío-empieza a tratar de darle una explicación a Monroe para convercerle como lo hizo Thomas hace unos minutos atrás.

-Pásemelo que todos aquí saben que no me gusta que se hagan cirugías con maquillaje en mi hora de clase-Esthela se para y le deposita el espejo en su escritorio,todos tienen sus miradas clavadas en ella observando detenidamente como la chica se termina rindiendo ante la autoridad del hombre.

-Kattie el profesor José me quito tu espejo-alzo mi ceja pensando en que estoy tan distraída que a pesar de que vi el espejo no le di para nada importancia en que es mio.

-Dile que ese espejo es mío y ya veras como te lo devuelve en seguida-Esthela se pone en pie para hacer lo que le dije,se detiene y vuelve hacia mi.

-Verdad que el profesor está obsesionado contigo-llega a estar en frente del maestro y empieza a hablar con él, desvío mi vista para encontrarme con Thomas viéndome detenidamente.

Tocan el timbre ya de salida lo que indica que al fin ya han terminado por hoy las clases, me dirijo con Esthela y Feilly a la salida del colegio.

-Señorita Kattie quiero hablar con usted-Oh no ya viene el estúpido de Monroe a hablarme tonterías del espejo-solo quiero preguntarte si me quieres? porque yo te amo-miro hacia los lados pudiéndome dar cuenta que los amigas no están conmigo han continuado caminando sin mi dejándome atrás.

-A ver y usted por que me hace ese tipo de preguntas a mi?-le miro fijamente con una mala cara haciendo el intento de que sepa que no me ha agradado la idiotez que a podido decir.

-Porque te amo,quiero que seas mía,mi chica-me sujeta de un brazo haciéndome acercar mucho de él, con toda la fuerza que tengo me vuelvo a echar hacia atrás y al menos logró una distancia cómoda-Quieres salir conmigo hoy?-me aprieta más fuerte la mano y siento un poco de dolor en ésta, su mirada se ve desesperada por la respuesta que daré.

-Esta bien-suelta mi mano la observo y veo un moleton en ella,no me gusta como se ve puede que más tarde se me forme un hematoma bien visible,le doy la espalda para irme al alcance de mis amigas las cuales van a una distancia que si camino rápidamente puedo alcanzarles.

Pasadas unas horas de llegar a mi casa,me ducho y me coloco unos jeans,una camiseta larga y me suelto el cabello,para luego irme a donde el profesor,cuando llego al parque donde él me dijo que nos encontraremos pues veo a José esperándome ahí, me abraza e intenta agarrarme el trasero,pero yo no lo se lo permito porque no pretendo dejar que me toque,tardo un tiempo hablando con él en ese lugar,se distrae mirando una pareja muy abrazados aprovecho que no esta mirandome saco de mi bolso una inyección tranquilizadora que siempre le pongo a mi objetivo para poder llevarla al lugar donde la asesinaré,ya él un poco tonto bajo los efectos del tranquilizador me lo llevo a su auto como puedo,llegamos a su último lugar donde estará,lo amarro y le pongo todo lo que necesito para hacerle daño.

-Mhmhumhh...-trata el hombre de hablar,mientras yo sonrío como loca.

-Solo no hables en lo que yo te doy algo de cariño-tomo un cuchillo y le corto una oreja comienza el hombre a moverse de manera desesperada por el dolor insoportable que provoca esto,busco un clavo entre las cosas que uso normalmente para mis víctimas,le clavo su ojo derecho el clavo dentro del ojo para causar mucho más dolor.

Quito de la boca de Monroe la cinta que le impide hablar-solo dejame ir-dice llorando de dolor y moviendo su cabeza a diferentes lados.

-No-escupo su rostro y le doy una cachetada-ya me tiene arta con tus acusaciones hacia mi,es estrezante que me molestes todos los días con esa porquería de que me amas,entiende por un carajo que yo soy muy niña para un anciano como tu-comienzo mis carcajadas-debes buscarte señoras de 78 años,son las que están adecuadas para un viejo como tu, eres un estúpido y mereces morir ya esto es lo último que dices en toda tu vida.

Tomo el cuchillo nuevamente y despego uno por uno todos sus dientes,por último clavo el cuchillo en la parte de su cuello en el lugar izquierdo,limpio todo como siempre dejo un poco de pistas para burlarme de las autoridades y voy tranquilamente a mi casa,ya llegada a mi casa me ducho y me acuesto a reposar un poco sobre todo lo sucedido.

Cambios Drásticos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora