Capítulo 13

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-Hey-escucho una voz reconocida hablándome desde la lejanía.

-Que quieres ahora?-le miro para confirmar si es quien creo es por la tonalidad de voz.

-Solo te vine a decir que me voy a volver a Alaska-baja su cabeza acercándose más a mi, me mira quizás esperando alguna reacción interesante-me voy mañana mismo-se pasa su mano por una de sus cejas y se muerde la mejilla por dentro-no me dirás nada?

-Que te vaya bien-me mira tan serio que siento que en cualquier momento me golpeará,pero aun así ignoro su facción-adiós-le doy la espalda y entro a mi hogar,paso de inmediato a mi habitación estando segura de que es un lugar privado donde se que puedo desahogarme.

Realmente si que me duele que Thom se vaya de verdad lo quiero,pero no creo que me convenga y menos ahora que se va,me da mucha pena por mi no por él sino por mi porque nunca tuve la oportunidad de dejarme llevar por lo que siento por él.

Me doy lugar a pensar en todas las oportunidades que tuve y que perdí, todas las veces en que nuestros labios se unieron para saborear el rico sabor,para recordar aquella noche en que casi le entrego una de las cosas mas importantes "mi cuerpo",pero justo ese día tuvo que suceder algo y no pudimos hacer nada esa fue la única noche que estuve dispuesta a lo que fuera,pero no pude,ahora que él se va le quiero más,quiero ir a su casa y besarle.

Después de dormir un buen rato me despierto y busco algo para comer,luego quedo pensando otra vez en Thom,termino de tomarme el sumo y me dirijo a casa de Thomas,toco varias veces su puerta y él me abre dejándome pasar, como siempre está solo en su casa,pregunta que es lo que deseo pronunciándolo con un tono de dureza y altanería haciéndome lamentarme por haber venido,trato de continuar con lo que decidí al principio diciéndole que solo quiero charlar un poco ya que yo estoy sola en casa,lo cierto es que no quiero aún que se entere cuanto lo aprecio,hablamos,nos reimos,recordamos algunas cosas y todo eso,ya es hora de irme a casa otra vez,ya que mamá esta apunto de llegar,Thomas me da un beso de despedida y yo le respondo,no quiero desaprovechar esta última oportunidad,ya es la última que quizás tengo junto a él, duramos un largo rato hasta que el aire se nos termina.

-Siempre recuerda que te quiero-dice Thomas en un susurro el cual me hace sentir un escalofrío en todo el cuerpo alertandome de su aire chocando en mi oído.

-Te quiero-le abrazo y una lágrima inoportuna sale de mis ojos cayendo en su camiseta.

-Estas ebria?-me aleja lentamente para mirarme a los ojos con mucho detenimiento.

-Quizás es el alcohol que me tome en la fiesta que aún me esta haciendo efecto-le digo entre carcajadas agarrando sus manos las cuales se encuentran tibias lo que hace el contacto agradable.

-Es para asegurarme de que estas consciente de lo que acabas de decir-me envuelve en un cálido abrazo haciéndome suspirar y sujetarle tan fuerte que siento que es parte de mi cuerpo.

-Ssshhh-coloco un dedo en sus labios-si lo estoy, pero ya me voy-doy la vuelta para regresarme a casa.

-No te iras sin darme otro beso-anuncia desde una lejanía no muy exagerada.

-No te lo daré-le anuncio continuando caminando hacia mi trayecto destinado.

-Si que te gusta que te lo de a la fuerza-escuho como sus pasos chocan con el suelo acercándose a mi.

-No me gusta-en realidad si me gusta,pero ya saben yo siempre con corazón de chica dura.

-Entonces-siento su cálido cuerpo emanando calor lo que indica que esta muy cerca esta vez.

-No-me alejo para no estar cerca a él-adiós-mis pies empiezan a continuar con su rumbo,me agarra por mi antebrazo derecho y me hace voltear quedando a pocos centímetros.

-Se que te gusta-me susurra para luego morder lentamente mi oreja-solo déjate llevar.

Sonrío y termino yendo a casa,ya mamá por lo visto ha llegado de su trabajo, me detengo a charlar un poco quizás mucho y luego me surge la idea de investigar sobre las cosas tan raras que me han estado sucediendo ya me encuentro últimamente muy asustada y preocupada, además he estado matando muchas personas sin razón alguna y sin dejar ni una sola pista de que yo lo halla hecho, es como si toda mi experiencia de asesinato es bastante clara y que conozco todo los trucos para dejarlo todo limpio,que los investigadores duran tanto que ya no están pasando los avances de esas investigaciones por TV,es algo muy sorprende e inexplicable.

Voy a mi computador a investigar y busco historias sobre eso,comienzo a sentir la frustración por todo mi cuerpo alterandome un poco no encontrar absolutamente nada sobre esto,continuo buscando y después de 3 horas de buscar alcanzo encontrar una información que dice:"En el 1876 un niño de 14 años confiesa que ha matado a muchas personas en el poco tiempo que tiene de vida,que estos hechos eran cosas de su mente,pero que él estaba arrepentido de todo lo que había hecho". Luego en otros minutos de buscar mas encuentro que a ese pequeño niño,las personas de su comunidad junto a su propia familia primero lo torturaron y luego lo quemaron,esto es un poco cruel,ya el chico se había arrepentido, bueno....quizás digo eso porque ninguno de mis familiares fueron víctimas de estos asesinatos,lo más extraño fue que cuando ya el cuerpo del niño estaba hecho cenizas en su pantalón había una carta que no estaba quemada ni nada,la cual decía:

Para:Alex
Gracias por el cumplimiento de tu deseo,me has obedecido y ya eres mi muñeco de asesinatos.
Att:Tu Amo

Inmediatamente mis ojos leen esto voy directo a mi mesita de noche y busco algo impaciente la carta que he encontrado aquella vez sobre la mesa de la sala, la encuentro y comienzo a darle una releida,un pequeño gritito sale de mi boca,esta dice justamente lo mismo, muerdo fuerte mi lengua y vuelvo al computador trato de centrarme para seguir leyendo cosa que se me dificulta un tanto,al buscar desesperadamente encuentro que la carta del pequeño tenía dentro un broche de color negro con forma de triángulo.

Me pongo en pie y doy unos pasos hacia atras alejándome de el computador,es como si esa historia se estuviera repitiendo en mi,el shock porque es lo mismo que me está pasando a mi es tan fuerte que me hago una rotura en mis labios sin si quiera percatarme de que lo estoy mordiendo muy fuerte,pienso y pienso pero todo es lo mismo con la excepción de que mi carta ni tiene el broche negro, es aterrador, ya al menos se más o menos de que trata un poco esto.

Cambios Drásticos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora