Cambios Drásticos.

Capítulo 14

—Olle no me mires que saben que eso no me gusta—le dirijo una mirada a aquella chica me siento tan fría que no se como es que de ser alguien tan social he pasado a ser alguien tan apartada,tan antipática y a la vez grosera.

—P...pero...—trato de que sienta mi mirada tan clavada que se sienta intimidada por mi,su mandíbula comienza a temblar de una manera algo extraña y de inmediato desvío mi mirada para observar como un chico se aproxima al baño de chicos —perdón Kattie—la miro nuevamente dándole algo de desinterés con una ceja alzada y una media sonrisa,se pone en pie y se desaparece del lugar,camina tan rápido que es sorprendente en lo que me he convertido.

Maldito Thomas solo quería joderme,sabia que alguna tontería se traía en manos,quizás solo quería que le demostrara y dijera lo que siempre ha querido,pero yo de tonta le creí su barbaridad de que se ira de la ciudad,maldigo en voz baja y Bash se encarga de interrumpir mis pensamientos de pura mierda,se pone en mi frente y empieza a dar golpesitos en el suelo con sus zapatos de tacón tratando de llamar mi atención,se sienta a mi lado y tarda unos minutos ahí mirando a todos los que pasan cerca.

—Sé de todos tus asesinatos tonta—frunzo mi ceño sintiéndome extrañada por lo que me digo,me acomodo en la mesa colocando mis codos en ella y poniendo mi rostro entre mis manos para hacer creer que prestó bastante atención a lo que ella dice.

—De que me esta hablando?—opto por hacerme la desentendida, la perdida,la que no tiene idea de que ella esta hablando,no voy a irme a lo cierto de inmediato,sería una imprudencia estar diciendo mis cosas a personas que pueden delatarme en minutos,ella no es nada buena y mucho menos conmigo.

—Tu sabes pequeño engendro del diablo de que te hablo—planto una mirada de sorpresa y a la vez burla de lo que ella dice,solo escuchar la palabra diablo dirigida hacia mi me llena de emoción,nunca nadie me había juzgado con aquella palabra,pero el hecho de que lo haga me esta comparando con el dueño del mal,no soy la dueña del mal,de hecho ahora que lo analizo me dice engendro del diablo,bueno,pues quizas si lo sea,pero da igual.

—Ummm...si creo que si ya se—doblo un poco mi boca y pongo mi mano en ésta, ella simplemente está con sus ojos entre cerrados esperando que lo diga absolutamente todo-pero sabe que?-me acerco a ella ahora nadie más pueda escuchar nada de esta conversación, podría ser peligroso si alguien llegase a enterarse de algo de esto—yo también se algo de usted.

—No me chantajearás—dice entre carcajadas,rompo en carcajadas yo también y todos los que ahora se percatan de nuestra presencia en la cafetería del instituto nos observan algo sorprendidos pareciera como si nos estamos divirtiendo juntas y lo cierto es que aquí todo sabemos que no tengo una muy buena relación con la porquería de persona que tengo en frente.

—Usted me odia porque estaba interesada en el profesor José—abre sus ojos notándoce algo asustada,podría decirle como se esto,pero lo veo innecesario de hecho prefiero que se quede llena de dudas,mientras mas intrigas ella tenga mucho mejor para mi.

—Mira tonta le diré a toda la policía que tú eres la asesina—me señala con su dedo dándole un toque de alguien que juzga a otra,sin embargo yo lo veo algo ridículo, solo se que si me voy a la cárcel será la última que asesinaré y me gozaré su muerte—ya verás idiota.

Me pongo de pie y tomo mis cosas,la dejo sola sin si quiera despedirme,no me interesa tener buenos modales con alguien como ella,acaba de cometer el peor error de toda su vida,tratar de sobornar a una asesina que por ahora es una de las más buscadas del lugar definitivamente voy a tener que quitar a esta mujer de en medio, la mataré,no quería pero la verdad es que nadie la mando a meterce en lo que no le importa,esta vieja ya a vivido suficiente,voy a enviarla al seol,nada mejor que sentirte como la dueña de la vida de los demás, controlar la cantidad de días que puede vivir.