¿Sabes cómo Amar?

Capítulo 16

Su beso pasa de ser apasionado a uno más erótico, están excitados y sus cuerpos añoran sentir la tibieza del otro,  poco a poco pierden la noción del lugar... él la acorrala con todo hacia el árbol y ella comienza a besar su cuello con suma atracción extasiándose más cuando él suelta profundos jadeos cerca de su oído jalando de su cabello.

"Necesito hacerte mía..." - su susurro es tan grueso y casi entrecortado,  que ella toma sus labios en medio de un sutil mordisco.

Silvia toma un impulso y lo empuja por su abdomen logrando separarlo con fuerza.

Soltando un último suspiro, un mar de emociones encontradas la quebrantan frente a él, sus lágrimas comienzan a caer con una mirada llena de impotencia,  decepción o incluso un porcentaje de angustia al saber que no puede negarse a estar con él.

Jorge la mira con mucha culpa al ver sus ojos cristalizados, creándole un nudo en la garganta... a pesar de la resistencia que ella hace para no tocarlo, se rinde ante el abrazo que le da refugiándola en su pecho sin importarle que se moje su camisa con sus lágrimas, ella lo aprieta con fuerza por sus costillas con los brazos; sollozando en su pecho como una niña asustada.  Jorge le da pequeños besos en su cabeza  para tratar de calmarla.

La confusión lo invade,  no sabe cómo reaccionar ante sus lágrimas repentinas,  lo único que puede hacer es sentirse mal por escucharla desahogarse así.

- ¿Qué pasa,  Silv?

Ella no responde,  prefiere esperar a que su cuerpo se sienta menos vulnerable y su corazón inquieto le permita poner en orden sus ideas,  lo único que necesita es seguir abrazándolo.

Jorge inclina su cabeza hacia un lado para poder darle pequeños besos por todo su perfil hasta llegar a sus labios siendo correspondido con mucha dulzura y suavidad, mientras ella lo acaricia con la mano en su cuello.

Silvia se separa lentamente tratando de secar sus lágrimas con rapidez.

-Todo esto se ha salido de control...

- Ya lo sé, pero vaya... dejémonos llevar por lo que sentimos.

Ella logra salir de aquella posición donde él la tenía acorralada.

Silvia decide cortar aquel arranque pasional saliendo de las sombras, obligándolo a seguirla para hablar en medio de la vereda.

- ¿Crees que me siento bien al dejarme llevar, cuando tú tienes una PROMETIDA?"

Jorge se acerca tomándola con pertenencia por su espalda baja para hablar en susurros cerca de sus rostros, cortándole la respiración al hacerle sentir aquel cuerpo tan fornido y varonil vibrar al contacto de sus cuerpos.

- Ya no puedo alejarme de ti,  entiéndelo... y sí, yo tengo a Claudia pero tú tienes a Andrés o el Camilo ese.

- La diferencia es que yo no tengo ataduras,  ya te dije que son mis amigos.  Jorge,  ya vive tu vida lejos de la mía.

Silvia se gira para dar algunos pasos apresurado,  pero Jorge la detiene sin soltar su brazo: "Quiero que estemos juntos..."  - ella se suelta con brusquedad, comenzando a frustrarse: "¿Y después qué?,  cuando se te vaya el encanto... ¿me dejarás a un lado para seguir con tu novia?"

Jorge niega con la cabeza y en un preciso movimiento la toma por las mejillas a unos cuantos centímetros de besarla.

- Silvia, ¿Qué es todo esto?

El tono alto y molesto de Andrés los asusta, él está sumamente serio cruzándose de brazos, mientras termina de guardar una distancia detrás de Silvia.