Middleton School

Conociendo a los alumnos lll

Soy Yeilyn González, tengo 17 años y voy a segundo de carrera. Es mi primera vez en ir a hacer los exámenes de Middleton School y la verdad estoy muy nerviosa.
El portón del lugar era algo tenebroso debido a su color, ¿Qué demonios era? ¿Oro? No, no lo creo, ya se lo hubieran robado ¿No?
Me encogí de hombros y toque un botón electrónico que hizo que las puertas se abrieran, sonreí emocionada y comencé a caminar por el largo pasillo de piedras pulidas. Me recordaba mucho a las calles de Guatemala, adoraba viajar pero no hay nada como mi ciudad Sevilla en España. Me acerque a un guardia de seguridad que vestía de una manera muy peculiar.
-Disculpe...
El me miro seriamente.
-Necesito encontrar el salón de exámenes de admisión.
El guardia ni siquiera me estaba prestando atención por lo que veía, le hice varias muecas y ni siquiera parpadeaba, era muy extraño.
-¿Entiendes español?
-Señorita, disculpe que parezca algo grosero pero no estoy aquí para dar direcciones.
-Pero solo fue una pregunta.
El guardia suspiro y se quitó los lentes negros.
-Para eso está la oficina de direcciones, pase adelante.
Mire hacia a lado y note que muy cerca había una pequeña oficina con un cartel verde que decía Oficina de direcciones, sonreí como tonta y camine hacia allí. Al llegar una señora de unos cuarenta años vestida de un bonito chaleco rosa y una falda del mismo color mientras se podía ver debajo de ella sus zapatos de tacón cerrados color café oscuro.
-Buenos días.
-Buenos días pase adelante.
Cerré la puerta a mis espaldas y me acerque a ella.
-Disculpe, me llamo Yeilyn González, vengo de España y la verdad ando un poco perdida -reí-
-Estamos para servirle -Me miro, se notaba que era muy simpática-
-Bueno... ¿Qué salón es para hacer los exámenes?
-Tome este folleto, aquí encontrara un mapa con toda la dirección del internado Middleton School, pero ya que veo que tiene prisa le diré que a unos pasos de aquí se encontrara con Katherine González, una profesora del internado, ella la está esperando.
-¡Oh! excelente, tiene mi mismo apellido, genial -sonreí mientras guardaba el folleto en mi bolso- muchas gracias señora.
-Estamos para servirle -sonrió y volvió a lo suyo-
Salí de la oficina y comencé a caminar rápidamente, note a una hermosa chica que usaba una linda falda y tenía una sonrisa.
-Buenos días, ¿Usted es...?
-Oh buenos días querida... mi nombre es Katherine González, soy profesora del mejor internado del mundo, yo seré tu profesora guía para esta increíble experiencia en tus exámenes de admisión.
Se veía muy entusiasta, optimista, era ¡Genial!
-Sí, estoy algo nerviosa.
-Entonces, esos nervios déjalos atrás, respira hondo y la aventura comience.
Ella comenzó a caminar, yo también lo hice. Caminaba muy gracioso, parecía una dama, era muy elegante pero creo que todo en este internado era así, aunque dicen que también son muy locos.
-Mira, aquí será tu primera parada, puedes entrar.
-¿Vendrán mas estudiantes?
-No, este salón solo es para un estudiante, no podemos dejar que puedan copiar y ni siquiera que se desconcentren, por favor entra, escribe tu nombre y prepárate.
-Muchas gracias.
Sonreí y tome la perilla de la puerta roja que tenía enfrente. Al entrar note que solo había una silla de cuero negro y un escritorio enfrente, Middleton School es muy diferente a los colegios a los que estoy acostumbrada, en mi colegio habían puros pupitres y aquí parece que es la silla del rey.
Me senté y note que el examen ya estaba en el escritorio, mire que enfrente tenía una pizarra eléctrica, ¿Por qué habría una pizarra? Me encogí de hombros y antes de escribir me lleve una sorpresa al escuchar una voz proveniente de la pizarra, ni siquiera era una pizarra, era como un tipo de televisión.
-¡Wow!
-Buenos días joven Yeilyn González, gracias por tomar esta experiencia en Middleton School, el día de hoy tendrás tres exámenes, el que tiene en tu escritorio es el de matemáticas, física y química, cuando lo termines lo guardas en la gaveta que esta abajo y tomas el otro examen. Si necesitas sacapuntas, borrador u otro lápiz, lo puedes encontrar en esa misma gaveta. Buena suerte y recuerda ¿Estas capacitado para entrar?
Esa voz era algo terrorífica, parecía la voz de ese maldito payaso de la película del juego de miedo, era gracioso pero a la vez tenebroso. Mire el examen, coloque mi nombre y me concentre. A la media hora pude terminarlo e hice lo que me dijo la voz siniestra. Saque el otro y note que era el de literatura y ortografía, este era más fácil, lo termine en diez minutos.
Y el último ¿Dónde estaba? Note que la pantalla otra vez se puso oscura y la voz dijo:
-Para el último examen, ve a la oficina de la directora Ana Rodriguez, Katherine te ayudara a encontrarla, buena suerte.
Me puse de pie y tome mi bolso, Salí de la pequeña oficina y mire a Katherine que me veía muy alegre.
-Eso fue rápido, ¿Cómo crees que te fue?
-Pues creo que muy bien, me pareció muy fácil.
-¿Segundo año cierto?
-Sí.
-Muy bien, ahora tienes que ir a la oficina de la directora, te llevare con mucho gusto.
Camine junto con ella y subimos a un elevador, ella puso el número 3, era el tercer piso supongo y las puertas se abrieron, ella me hizo una seña que saliera.
-¿Es esa puerta?
-Sí, la puerta negra te llevara a la dirección.
-Wow parece la oficina del mismísimo infierno.
-Cariño, el infierno está por venir.
No entendí sus palabras, ella me guiño el ojo y las puertas del elevador se cerraron, sacudí mis pensamientos y camine hacia la puerta negra, tome la perilla y la abrí. La directora Ana se encontraba enfrente de una enorme ventana atrás de su escritorio, era morena y muy hermosa como me la habían descrito.
-¿Acaso no sabes tocar?
Me sorprendí con lo que me dijo, ella se dio la vuelta y me miro.
-Hazlo de nuevo.
Hice lo que me dijo y Salí de la oficina, toque la puerta y ella me dejo pasar. Me puse muy nerviosa debo admitir, ella se sentó en su silla de cuero negra y me señalo la silla de enfrente.
-Gracias -Me senté-
-Querida, Middleton School es un instituto que quiere sacar a profesionales, como yo y mis queridos compañeros de trabajo, no me defraudes.
-Muy bien.
-El último examen es muy fácil, un dibujo, una obra de arte se podría decir o simplemente algo que cuente una historia.
-Bien.
-Toma esta sencilla hoja blanca y hazme tu mejor trabajo.
Asentí y comencé a dibujar, me consideraba buena dibujante, había hecho muchas pinturas y lo bueno es que tenía pinturas y pinceles, colores, crayolas, marcadores, era increíble. Me tomo veinte minutos terminarlo pero cuando finalice se lo entregue.
-Muy bien, un lindo paisaje pero ¿Tiene historia?
-Sí.
-Cuéntamela.
-Es la historia de una hermosa chica española cuyos padres murieron en un accidente de avión, ella...
Cuando termine mi historia, la directora se puso de pie y lo guardo en unos casilleros plateados que tenía, se acercó de nuevo a mí.
-Te hare una última pregunta.
-Muy bien.
-¿Estas capacitada para entrar?
Abrí mis ojos algo nerviosa, yo podía decir que si pero mis exámenes podían dar otros resultados, no me retractaría, quería entrar a esta institución.
-Por supuesto que sí, considero que hice un buen trabajo y eso es lo único que diré.
-Bien, muchas gracias Yeilyn, tus resultados saldrán esta noche, pendiente de tu correo electrónico, buenos días.
Ana regreso a su posición, me puse de pie y Salí de la oficina, al estar con ella sentía que todo se volvía oscuro, ella podía causar algo de miedo pero solamente mi mente pensaba en los resultados.
........
-¡LIONEL!
-Gracias, muchas gracias, solamente quiero agradecerle a mi familia por apoyarme en todo momento, este premio es increíble para mí, sude y llore, hice mucho para ganarme esto, se los agradezco.
-¡Messi! ¡Messi! Unas palabras por favor.
-Bien.
-¿Ahora estudiara en el internado Middleton School?
-Sí, es un orgullo saber que estaré en el mejor colegio e internado del mundo, es un honor estar allí.
Me baje de la tarima y me acerque a mi familia, mi madre me abrazo y me dio un par de besos, se notaba que estaba muy orgullosa de mi. Era mi cuarto trofeo como mejor matemático de mi institución en Argentina y me sentía muy feliz de que una persona tan humilde como yo estuviera en un lugar tan alto como este. Venimos de una familia media, no somos la típica familia millonaria como lo serán los demás estudiantes de Middleton School pero creo que la inteligencia le gana al dinero, creo que sin inteligencia no hay dinero.
.........
Me llamo Toni Kroos, soy un chico de Alemania y vengo de una familia muy humilde y tranquila. Mi amigo Manuel Neuer vino hacia mí y me dijo que quería que yo estudiara en el internado Middleton School, me sentía perfectamente bien para hacer esos exámenes y gracias a Dios todo salió bien y podre estudiar mi segundo año de carrera en la institución.
-Neuer, ¿Crees que será un buen año? -Le pase el balón-
-Tengo enormes expectativas -sonrió-
-Me pareció muy sensual la directora, ¿A ti no?
-Conozco a esa perra desgraciada desde hace un par de años, que no te engañe esa bonita cara, es una odiosa.
-Wow, deberías de respetarla, después de todo es tu superior.
-Para nada, mi único superior es mi padre.
-No entiendo como entraste a Middleton School.
-Pues saben que se pierden un excelente portero.
-No eres tan especial.
-¿Ah no?
-Bueno... si lo eres.
-Eso era lo que quería escuchar -sonrió-
.......
Mi nombre es David Luiz, vivo en Brasil desde el día que nací, así que prácticamente conozco todo lo que salga sobre Middleton School. Es un internado muy original, tiene mucha tecnología y a pesar de ser muy formales y estrictos te dejan hacer lo que se te plazca. Si te quieres pintar el cabello de rojo o verde hazlo, si quieres pintarle las uñas de negro hazlo, si quieres ir al colegio casi desnuda hazlo. Ellos no te exigen tu apariencia física... bueno creo que con lo de desnuda si me pase, sería muy humillante para la institución. En fin... mis padres me recomendaron entrar al internado, yo dije que sí pero creo que fue una mala idea. Tengo 17 años y voy a primero de carrera, me retrase para entrar en la escuela así que seré uno de los mayores de primero, me considero alguien alegre, carismático pero cuando quieren hablar de la leyenda que trata del internado Middleton School me pone realmente nervioso.
Detesto esa historia, el terror no va conmigo. Es una leyenda que te la cuenta desde el 2013 obviamente, pero que nadie la cree, se ha hecho tan famosa como si se tratara de la mismísima llorona o la sucia. Pero no esto es diferente y es muy probable que haya pasado.
No quiero contarla ahora, me daría miedo, preferiría esperar a contarla en el internado tal vez con algún loco aficionado al terror. Seria increíble.
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Robín Van Persie, era un holandés con una gran forma de ser, tenía 18 años y esperaba conseguir el amor antes de graduarse, solamente quería a alguien que lo quisiera por lo que era y no por lo que tenía, entonces Middleton School se volvió un lugar especial para él, debido a que todos estaban a su nivel y era muy probable que conseguiría a una buena mujer.
Robert Lewandowski, un chico polaco con un gran cerebro, dice que será científico algún día. Llamo la atención en el internado debido a que había hecho muchos proyectos y a pesar de que algunos habían terminado en explosiones, ayudaría a crear muchas cosas.
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Mi nombre es Jonathan Calleri, tengo 16 años, soy un niño con un increíble cerebro. Voy a primero de carrera en el internado Middleton School. Como sabrán mi madre murió cuando tenía cinco años y mi padre me abandono.
Tuve que comer de la basura muchas veces y otras iba a comederos, era difícil pintarse de payaso o hacer trucos peligrosos cuando los autos paraban debido a los semáforos en rojo. A penas conseguía algo para poder comprar agua limpia y algún pan. Pero no era suficiente.
Un día fui a un colegio público, le comente a la directora que no tenía dinero para nada, le conté mi historia y ella al parecer sintió lastima por mí pero fue suficiente para ayudarme. Ella me dio libros y me explico muchas cosas. Lo increíble de todo esto es que al parecer yo le entendía a todo sin ni siquiera haber ido a una escuela. La directora estaba tan sorprendida que hablo con unas personas al parecer del gobierno. Me bañe todos los días, me cambiaba con diferente ropa gracias al gobierno y no volví a comer de la calle. Cada vez que crecía mi cerebro conseguía más información, las matemáticas eran perfectas, la ciencia increíble, mi ortografía esplendida, solo era un chico de la calle que se convirtió en un maldito genio como diría mi difunto abuelo.
La directora Ana Rodriguez supo de mí, ella me llamo para que hiciera los exámenes y los termine en tiempo record, estaba muy sorprendida de mí y me dijo que quería que estudiara en Middleton School, por supuesto que acepte. Y mi fama ya era tan grande desde que hice el invento de un teléfono celular, soy millonario o billonario o cómo diablos le quieras decir por mi propia cuenta. No necesite de un padre cobarde y no me caí rendido por mi madre muerta. Era solo yo y debía salir adelante, agradezco por tener este cerebro, es increíble.
-Dime Jonathan... ¿Estas capacitado para entrar?
-Dígame usted señora Rodriguez, ¿Usted está capacitada para dirigirme la palabra?

(No lectoras fantasmas y like porfavor)
By:Karencita1715