Capitulo 26- Reencuentro

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Corrí, corrí como nunca antes, me dirán cobarde, pero en una situación así, solo tenía fuerzas para alejarme de la situación.
Las lágrimas salían como si de un grifo se tratara. Paré de correr y me recosté contra un árbol del patio, me deslicé por este y terminé en el suelo con mi cabeza escondida entre mis piernas. No podía parar de llorar, me sentía rechazada, sentía que mi mundo se caía abajo. Repasemos, fui muy decidida a declarar mis sentimientos con la persona que amo, en el fondo tenía la esperanza de que el sintiera lo mismo, pero no, él solo me miró y destrozó mi alma, mis sentimientos, mi orgullo, y también mi dignidad. No sabía si odiar a Dustin por ser tan cruel, o a mí por tonta, por creer que algún día iba a tener una oportunidad con él, no lo sé. Cometí el peor error de mi vida al declararme, rompí mi amistad con mi mejor amigo, y ahora me siento sola, abandonada, rechazada, muchos sentimientos negativos en este momento. Levanté mi cabeza de a poco y noté que el lugar estaba desolado, ni un alma pasaba por el patio, pero bueno, ¿Quién viene un sábado al colegio?
El sentimiento de vacío hizo que más lagrimas salieran de mis ojos, volví a mi posición anterior y lloré, nunca fui así, siempre me mantuve fuerte delante de mí misma, y de otras personas. Pensé que mi mundo se venía abajo, mi amistad se vino abajo, mi orgullo se vino abajo, todo lo que tenía se vino abajo. Estaba destrozada pensando en que ya todo estaba roto, pero algo, más bien alguien, me dio una señal de que no.

Lentamente levanté mi cabeza y me encontré con un chico, pelo castaño, ojos celestes, esos ojos, tenía la impresión de que ya los conocía. Me sequé las lágrimas y le di una sonrisa, algo así como una mueca con los labios apretados. El chico me devolvió una sonrisa sin mostrar los dientes y se sentó en frente mío.

-No tienes que fingir sonreír conmigo...- me dijo el chico comprensivamente mientras me miraba con una sonrisa de lado.

-Agradezco eso- le contesté casi en un susurro, pero él logró escucharme.

-Y bueno, ¿Qué pasó?- me preguntó tranquilo mirándome.

-Es una historia muy larga...- le dije sin ganas.

-Pues, tenemos tiempo- me dijo mientras se ponía a mi lado. El chico se recostó contra el árbol, pasó un brazo por encima de mis hombros y yo recosté mi cabeza en su pecho.

Le conté toda la historia, desde que nos conocimos, hasta ahora. El chico me escuchaba mientras acariciaba mi brazo y de vez en cuando asentía en señal de que me estaba escuchando y no se había dormido en la mitad de la historia.
Terminé de contar la historia y solté un suspiro audible.

-Wow... Eso sí que parece una película, pero te voy a decir una cosa, toda historia tiene un revoltijo en el medio, pero al fin y al cabo también siempre tienen un final, aveces feliz o aveces no tan feliz, pero estoy seguro de que solo es un momento y vas a superarlo- me dijo en forma de aliento mientras se levantaba y estiraba sus manos hacia mí. Yo lo miré extrañada, no sé qué pretendía que hiciera.

-¿Qué se supone que tengo que hacer?- dije con el ceño fruncido.

-Ven, vamos a ir a ¡McDonald's! Eso siempre sirve para curar los problemas ¿No?- dijo mientras yo agarraba su mano y me impulsaba para levantarme.

-Claro que si- le dije sonriendo, bien, la primera sonrisa sincera del día.

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Habíamos llegado a McDonald's hacia aproximadamente unos 20 minutos. Ya habíamos comido y ahora estábamos hablando.

-Y... ¿Por qué viniste a "consolarme"?- le pregunté curiosa mientras hacía comillas con los dedos.

-Odio ver a la gente llorar, y a parte estabas ahí tan sola, y yo también estaba ahí tan solo preguntándome que le pasaría a esa hermosa chica misteriosa, así que decidí ir a ver qué sucedía- me explicó con una sonrisa.
Yo también sonreí, era lindo él, era una buena persona, no sé qué más necesitaría para llegar a la perfección.

Nos fuimos de McDonald's después de unos 30 minutos y ahora nos encontrábamos caminando hacia ningún lugar. Hacía algo de frío en el día de hoy. Sentí un escalofrío por todo mi cuerpo, y el chico llegó a notarlo, pasó uno de sus brazos por mis hombros, lo que causó otro escalofrío en mi cuerpo.

-Y bien, ¿Cómo te llamas?- le pregunté. Qué tonta, ¿Cómo no se lo pregunté antes?

-Me llamo Matthew, me puedes decir Math- me dijo. Pude notar como una sonrisa se posó en sus labios. Ese nombre me sonaba de algún lugar, también sus ojos, su cabello, todo en él me sonaba. Me di cuenta de algo y rápidamente fruncí mi ceño en una muestra de confusión.

-Espera... ¿No quieres saber mi nombre?- le pregunté algo extrañada.

-Ya sé tu nombre, Maddie- me dijo el chico entre una carcajada.

-¿Qué? ¿Tú cómo sabes mi nombre?- dije parando de caminar haciendo que el giré sobre sus talones y me mire.

-Bueno, prácticamente todo el instituto lo sabe, eres nueva, estás en el equipo de volley, eres popular, pero humilde- me explicó. Reí ante su comentario, claramente yo no era popular.

-¿Qué dices? ¿Popular pero humilde?- le dije conteniendo mi risa.

-Claro que si, eres popular pero no lo crees ni eres una fresita plásticas, como la mayoría- me explicó nuevamente.

*********

Estábamos en una plaza sentados en un banco. No decíamos nada solo nos mirábamos. No sé qué estaría mirando él en mi, si tendría un grano o algo así, pero yo estaba intentando descifrar el lugar de donde lo conocía. De repente un recuerdo muy borroso de un bar y de Dustin borracho llegaron a mi mente. ¡Ya sé de dónde lo conocía! El chico del bar que me olvidé de pedirle el número de celular, sabía que alguna es la vida nos haría encontrarnos nuevamente. Abrí los ojos como platos al recordarlo.

-Math...- le dije casi en un susurro mientras recordaba quien era.

-Mad...- me dijo el mirándome sin entender.

-Ya sé de dónde nos conocemos...- le dije sonriendo triunfadora, como si hubiera recordado la raíz cuadrado de 4.213.098.

-Wow Mad, que poca memoria tienes, y que rápido olvidas a las personas- me dijo riendo entre dientes.

-Espera, ¿Tú ya sabías que te conocía? ¿Me hiciste tener que pensar todo este tiempo de dónde me sonaba conocido tu rostro?-  le dije indignada pero divertida.

-Mad, enserio necesitas más memoria, yo nunca me olvidaría de alguien como tú- me dijo él un poco más serio pero con una sonrisa en su rostro.

-Yo misma lo dije, el destino nos juntaría luego, y míranos ahora- le comenté riendo bajo.

-Quizá nuestro destino sea estar juntos, ¿No lo crees?- me preguntó mientras miraba a la nada y luego a mi. ¿Lo creo o no lo creo? Quizá lo crea, el destino hizo que Dustin me rechazara porque quizá después venía algo mejor. No lo sé, pero lo averiguaré.

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Holaaaa❤️ últimamente las estoy haciendo desear demasiado😂 Lo que pasa es que fin de año es una época realmente muuuuuuy complicada, por eso estoy tardando un poco más con los capítulos. Acuérdense siempre de que los amo mucho, y hablando de eso, ¡Falta muy poco para llegar a los 2k! Para mí es mucho😂
¡Acuérdense de recomendar la historia, votar y comentar! Eso sonó muy a youtuber (no sé cómo se escribe)  :z

LOSS AMOOOOOOO❤️

Besos xoxoxo

El mejor error de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora