Capítulo 23

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La noche ya se había asomado por aquella iglesia. Todos se encontraban situados en la estancia cenando las proviciones que encontraron. Parecían pasársela bien.

Clementine estaba sentada en el suelo alejada del grupo. Parecia estar reflexionando. Pero su consentración fue interrumpida por la vos de Carl.

-¿Pensando?-dijo el chico mientras se sentaba al lado de la castaña.

-Hola.- dijo en una sonrisa.

-¿Estas bien?-preguntó curioso Carl.

-Si, solo estaba. Si, pensando.-contestó.

-¿Quieres hablar sobre eso?

-No. Esta bien. No es nada.- dijo tranquila. Su mirada se posó al frente. Sintió algo en su brazo.

-¿Qué es esto?- prenguntó confundida.

-Vi como mirabas los chocolates cuando Michonne me los dio. Este lo acabo de tomar de su bolso, espero que no se de cuenta.- le explicó.

-Oh... Carl no era necesario...

La interrumpió.

-Esta bien. Yo quiero dartelo.- Carl le mostró una sonrisa.

Clementine también le sonrió.

-Gracias.

Carl miró hacia la mesa en la que estaba la comida.

-¿Quieres ir por un plato?- le ofreció pero Clementine se negó.

-No, disfrutare mi chocolate.- contestó de forma amable. Carl se levantó y fue hacia la mesa de comida.

En eso Abraham empezó a hablar.

-Me gustaría proponer un brindis.-dijo el pelirrojo.- Miro alrededor de esta habitacion y veo sobrevivientes. Cada uno de ustedes se ha ganado ese título.

Todos lo miraban atentos.

-Por los sobrevivientes.- dijo alzando la copa con el vino de comunion. Todos también lo hicieron.

-¡Sobrevivientes! Salud.

-¡Salud!

-¿Esto es todo lo que quieres ser?- volvió a hablar. Se cruzaron varias miradas.- Levantarse en la mañana, luchar con los muertos, buscar comida, irse a dormir por la noche con los ojos abiertos. ¿Sacudirse un poco y empezar de nuevo? Porque puedes hacerlo. Es decir, tienes la fuerza. Tienes la habilidad. La cosa es que, para ustedes, por lo que pueden hacer, eso solo sería rendirse. Ahora, llevemos a Eugene a Washington y él hará que los muertos mueran realmente y que los vivos vuelvan a tener este mundo. Y eso no es una mala comida para llevar para un viaje por carretera.

Nadie decia nada. El silencio solo rodeaba las palabras de Abraham.

-Eugene ¿Qué hay en DC?- dijo este dándole la palabra al hombre de cabello casi largo.

-Infraestructura ideada para resistir pandemias aún para esta de magnitud irreparable.- dijo Eugene.- Eso significa comida, combustible, refugio. Empezar de nuevo.- terminó de decir. Abraham sonrió.

-Más allá de como termine, no importa cuanto tome para resetear el botón e iniciarlo. Tú puedes estar a salvo allí. Más a salvo de lo que estuviste desde que todo esto comenzó.

Rick, con Judith en brazos lo miraba sin decir nada.

-Ven con nosostros.- le dijo Abraham.- Salva el mundo para ese pequeño.- muchos se miraban de acuerdo.- Sálvalo para ustedes mismos. Salvarlo por la gente allá afuera... A quien no le queda nada excepto sobrevivir.

Nadie hablaba esperando a la reaccion de su lider. Este rio seguido de hablar hasta que fue interrumpido por un leve sonido.

-¿Que fue eso?- le dijo jugueton a su pequeña hija.-Creo que sabe lo que estoy apunto de decir.- dijo hacia a todos.- Ella esta adentro. Si ella esta adentro, yo tambien. Estamos adentro.

Muchos reaccionaron con ternura aceptando la desicion. Otros aplaudian.

-Hagamoslo.- dijo Abraham.

Después del discurso algunos se pusieron a conversar. Carl sostenia a su pequeña hermana en brazos mientras la admiraba.

-Es hermosa.- la dulce vos de Clementine resonó en los oidos de Carl haciendolo mirarla.

A Clementine le traia muchos recuerdos la bebe y estos la atormentaban.

-Yo siempre quise tener una hermana.-dijo mientras estiraba su mano para acariciar suavemente el cabello de Judith.- Una hermana mayor. Con mi niñera fingiamos ser que ella era mi hermana mayor. Fue la primera persona que vi convertirse.- dijo con los ojos cerrados negando con la cabeza despejando los recuerdos de su mente. - Es muy afortunada de tener a Rick como padre y a ti como hermano.- le dijo a Carl. Este bajo su levemente su cabeza. Luego la volvió a subir en dirección hacia Clementine.

-No es mi hermana.- dijo con la voz entrecortada.

Clementine lo miró sorprendida.

-¿Q-Qué...?

-Bueno... No lo sé. Mi mamá estaba con otro al mismo tiempo que con mi papá. Murió al dar a luz a Judith así que no sabemos de quien es.- dijo mirando a la chica. En su rostro se notaba el dolor. Clementine lo miraba con comprensión.

-Sigue siendo afortunada de tenerlos.- la chica soltó una pequeña risa.- Ya tienes algo por lo que seguir adelante.

Carl miró a Judith y la pequeña a él, una sonrisa llegó a Carl Grimes de parte de su pequeña hermana haciendolo sonreir a él tambien.






















CLEMENTINE | Carl GrimesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora