9.

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[no he subido en años así que les dejo de regalo el fanart medio kk que hice de amy, espero les guste xdxd]

Oct.

Seis de la tarde. Alguien toca la puerta. May, como la chica activa que es, decide correr hacia la puerta con el cabello rosa rebotando por todas partes. Flynn y yo estamos tan cansados por dormir tarde que seguimos acostados en nuestras pijamas. Él está usando una de ositos y no puedo evitar que me parezca adorable.

-Uh, ¿está luke?

Mis ojos se abrieron tanto que creí que se saldrían de mi rostro. Flynn también lo había escuchado y había reaccionado de la misma forma.
Dejó su cómic a un lado, ni siquiera sabía de qué era esta vez; yo lancé mi celular al otro extremo de la cama y corrí hacia mi amigo para que me diera un sitio dónde esconderme además de decirle a May que le dijera a Michael que yo no estaba.

-Diablos, Luke, debajo de la cama-Me apresuró.

Mala idea, yo era demasiado grande.

-¿Por qué tienes que ser tan grande?-Gritó en un susurro. Yo le encogí de hombros buscando otro sitio en cuestión de segundos.

-Pregúntamelo a mí.

-Eso estoy haciendo, Luke.

-Cierra la boca, tonto. -Ambos nos reímos un segundo olvidando la situación incómoda que estábamos intentando evitar.

Al final, opté por quedarme detrás de la pared que daba hacia la puerta; así escucharía lo que Michael tenía por decir y me mantendría escondido.

Flynn pasó por mi sitio sin mirarme y se encaminó al baño; sólo para darle de alguna forma el mensaje a May de que yo no estaba aquí.

En sentido figurado. Porque sí estaba, sólo que no para Michael.

-No, Luke no está.-Habló decidida como siempre. -¿Necesitas algo?

Su voz firme y poderosa hizo titubear a Michael como un pequeño gato inseguro e indefenso. Diablos, hubiese amado verlo.

Verlo débil, quiero decir.

-Sí, a Luke. -Incluso atrás de la pared pude ver a May alzar su ceja derecha y luego rodar los ojos. Para luego finalizar con, ahí estaba, el suspiro de irritación. -Quiero decir, uh, necesitaba hablar con Luke. No es que necesito a Luke en sí, ¿vale? Uh, ¿no está?

Casi pude observarlo asomar la cabeza para buscarme, y desde mi sitio de escondite podía percibir el aroma de las flores que traía. Rosas, tal vez no tan frescas.

Quise reír demasiado fuerte porque así como podía ver los gestos de May, podía ver los de Michael. ¿Y cómo no? Habían sido unos largos meses.

-Michael, ¿no?-Suspiró May tan alto que pude escucharla. Y supuse que Michael asintió. -Luke está detrás de esta pared en este momento. Por supuesto que está, él vive aquí, ¿qué demonios piensas que tiene un coche y sale de fiesta a las cuatro de la tarde? -Rió irónica. Honestamente, no una de sus mejores bromas. Cuando estafa enfadada, no pensaba.-Luke está pero no te quiere ver.

-¿Luke no me quiere ver o tú no quieres que vea a Luke?

Eso era todo. Suficiente, Michael Clifford.

-Luke no te quiere ver.-Dije, saliendo detrás de la pared. Era la verdad. No lo quería aquí ahora. Pero cuando lo vi en una nueva sudadera gris con las flores en la mano, me tembló el estómago. Aquí estaba, como si no hubiese pasado nada. Aquí estaba, intentando ser el chico perfecto.

Estaba apenado con las mejillas ardiendo y los ojos brillantes. Sentí lastima porque se miraba tierno. Pero diablos ¿quién era para ponerse a pelear con mi amiga por una estupidez?

-Quiero decir, yo. Yo no te quiero ver. -Pausé desviando la mirada. No podía hacerlo así. -Michael,-Continué parado a unos metros de May, él y la puerta. -lo que haya pasado aquella noche no quiere decir que vamos a volver, ¿entiendes eso? -Dije con un poco menos de volumen. May era mi amiga, pero esto era asunto de Michael y mío. La aparté un poco, y ella entendió retrocediendo tres pasos. -No puedes venir a mi cuarto cuando quieras, no puedes hablarle así a mis amigos cuando quieras...

-¡¿Tus amigos?!-Bramó él molesto, escupiéndole un poco a May en el rostro, quien no hacía por apartarse completamente y dejarnos pelear con ganas. -Luke, nosotros, Amy, Ally, Calum, yo...nosotros éramos tus amigos, ¿no te acuerdas? -Se le veía triste más que nada. Debo admitirlo, nuestra amistad había sido real. Y lo extrañaba, tal y como se lo había dicho. Pero nosotros ni podíamos volver a ser, porque nunca habíamos sido.
Sacudió las flores y unos pétalos cayeron a la alfombra.

-Eran.-Enfaticé. Y por supuesto que hice la debida pausa dramática. -Eran mis amigos.

Michael torció los labios y puso la cabeza hacia abajo.

Habíamos hecho un avance y llegaba a cagar todo. ¿Por qué Michael? ¿Por qué eres tan estúpido?

-Por favor, Michael, vete.

Suspiré, un tanto decepcionado por haberme mostrado débil ante él y regresé a mi punto detrás de la pared.

May no lo dejaría ir tan fácil. Se había empeñado a hacer el papel de hermana mayor sobre protectora conmigo. Me cuidaba, a veces demasiado.

Pero, volviendo al asunto de Michael, me molestaba que no pudiera cerrar su boca un segundo.
Todo giraba en torno a él, como si fuera la gran mierda.

Vale, es mi gran mierda. En el peor sentido.

-Mira, Mikey...-La voz de May sonaba dulce, algo que nunca había hecho más que cuando estaba por decir algo ofensivo o a cerrarle la boca a alguien.

Ojalá le cierre la boca de una vez.
Ojalá ambos lo hicieran, porque ambos eran dinamita y fuego a la vez. Nada saldría bien si ellos dos pelearan.

-Para serte sincera, no sé ni siquiera qué haces aquí. -Escuché su risa burlona y comencé a preocuparme, no quería que lo humillara. De reojo observé la cabeza gacha de Michael levantarse y regalarle una sonrisa hipócrita por igual. -¿Qué haces como un perrito faldero corriendo tras Luke cuando ya lo heriste demasiado? Ese chico estaba hecho pedazos y a penas se está reconstruyendo, deja de arruinárselo, ¿quieres, Michael?

Michael gruñó enfadado. No podía soportar ser humillado por alguien como May. Alguien tan parecida a él.

-Nunca lo amaste. En realidad, simplemente no querías estar solo. Seguramente Luke te hacía sentir algo en tu miserable vida después de que tu adorable novio, ya sabes, se fuera. Pero a Luke nunca lo amaste, porque uno no lastima a quien ama.

Me levanté de un brinco y en menos de dos segundos estaba parado en el mismo punto que antes, ahora moviendo a May de la puerta.

-Claire, es suficiente. Es suficiente, no tienes que ser así.

Vi cómo se reía de mí, o de la situación. Me miraba con los ojos bien abiertos, como si hubiese dicho la cosa más estúpida del mundo.

-Pero...¿Luke?

Negué con la cabeza y con los labios le ordené que se quedara aquí, que volvería en unas horas.

Entonces tomé a Michael del brazo y lo arrastre hacia afuera para seguir caminando.

I'm Not Okay::mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora