Los ojos de Novalee parecían que se iban a salir de sus órbitas en cualquier momento, ni siquiera pestañeaba. ¿Mallory había quedado embarazada? ¡Wow! Estaba realmente feliz por ella, tan sólo no sabia porque estaba llorando, ¿Sería de felicidad? No, no parecía, lloraba por todo menos por felicidad y de eso estaba segura.
- ¿P...pero por qué lloras? - le preguntó, Mallory la miraba atentamente esperando su reacción.
Se suponía que un bebé era un motivo de felicidad, pero cuando tenias inseguridades sobre tu relación y no sabías como tu pareja reaccionaria, entonces era un motivo de angustia. ¿Cómo iba Dante a reaccionar? Nunca habían tocado el tema de un bebé y aunque él hacia cosas dignas de un nombre enamorado sabía que un bebé era algo realmente delicado para tratar.
- No sé como Dante lo tome, se suponía que nos estábamos cuidando...- Mas de una vez su novio le había preguntado si se cuidaba, siempre insistía y eso en este momento era lo que mas la atormentaba, porque sabía que si él le insistía tanto en que se protegiera, era porque no quería niños ahora, ¿verdad?
- Tienes que hablar con él, no sabes como se lo va a tomar - soltó su amiga de repente, ella negó en rotundo -. Mallory sabes bien que eso de ocultarle un embarazo a un hombre nunca ha terminado bien.
Eso le quedaba claro, pero Dante y Bruno eran totalmente diferentes y el hecho de que su pareja hubiese reaccionado mas bien de lo que pensó, no significaba que Dante lo fuera a hacer también.
- Tengo miedo - se sinceró, los ojos le escocían aún en lágrimas.
Novalee se acercó a ella y la abrasó - Dante es un chico bueno y comprensivo, te quiere Mal y dudo que vaya a reaccionar como un patán, él no se ve así.
- Yo sé, lo he pensado pero, ¿Qué tal si se enoja?
- Si se enoja es su problema, no vas a estar sola y lo sabes, nos tienes a Bruno, Kendall y a mí, de hecho tienes hasta a Skylar y aunque no sea lo mismo sabes que no te va a faltar amor.
Su amiga suspiró resignada ¿Qué haría ella sin aquella sabia rubia ?
- ¿Podemos ahora tener una noche de chicas? Sabes que ahora que soy mamá no tengo la misma libertad.
Mallory asintió - ¿Tienes tiempo para unas cuantas tazas de café y musica de fondo? - le preguntó, Novalee sonrió y besó la cima de su cabeza.
- Por supuesto que sí.
La noche pasó y le dieron las diez, entre risas y anécdotas no se habían dado cuenta del retraso, tan sólo cuando Dante llegó y se sorprendió al verla, cayó en cuenta de que hacia poco mas de una hora debía estar en su casa con su hijo y su... Bueno, su novio aún.
- Rubia dorada, ¿Quiere que la acompañe q casa? - se ofreció su cuñado, ella negó en rotundo, su lugar era allí, con su novia que tenía cosas que decirle.
Realmente, desde que él había llegado, el ambiente se notó tenso, cosa que para Dante, no pasó desapercibida.
- No Dante gracias, creo que Mal te necesita mas que yo.
Él la miró y ella desvío la mirada, su novio fruncio el ceño, realmente la estaba notando rara desde que llegó. De hecho, había intentado acercarse a besarla y ella lo había esquivado ¿Qué había hecho mal ahora?
Novalee se despidió cortésmente, no sin antes dedicarle una mirada significativa a Mallory que ella captó y que asintió, Dante tan solo las observaba, sabia que había algo que él debía saber.
- Pasen buenas noches chicos - se despidió y ya por fin salió de la casa, lanzando un suspiro cuando la puerta se cerró detrás suyo.
Ya en el auto, decidió marcarle a su novio quien al segundo tono abrió la llamada, hipnotizandola con esa profunda voz que causaba aquellos efectos en ella desde el primer momento.
- Muñeca... Dime que ya vienes en camino por favor - su voz se oía agitada, ella sonrió divertida imaginándose el por qué de aquello, si ella mas que nadie sabía lo que se sentía lidiar con el pequeño Cayden.
- Claro que sí, voy en camino ¿Ya cenaron mis amores?
Escuchó a Bruno suspirar y rió por lo bajo, en su interior gozaba de que él supiera lo que se sentía, de que supiera a lo que ella se enfrentaba cada día mientras él estaba en el trabajo.
- Si mi amor, ya cenamos ¿Por qué?
- Quería llevarles algo.
Escuchó como de aquel lado había un movimiento incesante, como si rebuscara en algo .
- ¿Qué haces mi amor? - preguntó, el sonido por primera vez en lo que iba de la llamada paró y Bruno al parecer se trasladó a otro lugar de la casa donde había una televisión encendida.
- Preparo leche para el mini dragón, ¡Dios ya van dos en la última hora!
Novalee rió, si Cayden seguía así pronto presentaría problemas de sobrepeso, tenia más apetito que Kendall y eso era mucho decir, puesto que su hermano tenia un agujero negro en vez de un estómago.
- Ya llegaré para tu relevo, tan solo esperenme despiertos, los extraño a ambos.
- Te extrañamos también muñeca, adiós, sabes que no me gusta que conduzcas y hables por teléfono a la vez.
Asintió, aun sabiendo que él no podía verla y lanzó un beso para luego colgar, se sentía cansada pero su día ni estaría completo sin pasar tiempo de calidad con los dos hombres de su vida antes de dormir.
Terminó de cambiar al bebé con el trajesito que Dante le había llevado, agradeció mentalmente a su hermano por prestarse para aquella misión que realmente le tenia los pelos de punta. Estaba nervioso, eso tenia que salir bien a como diera lugar.
Escuchó la puerta abrirse y luego los tacones de ella repiquetear por el pasillo, dejó a Cayden en la cama rodeado de sabanas y se escondió en el armario donde guardaba las municiones que complementarían su misión.
- Oh pero qué tenemos aquí - esa voz... Ya estaba en la habitación y por una rendija de las puertas del armario vio como se acercaba a la cama para tomar el bebé. Bien...solo dos pasos más.
Se acercó a la cama rodeada de almohadas ¿Por qué estaba Cayden allí y no en su cuna? Alcanzó a ver sus manitos agitándose en el aire y escuchar sus balbuceos, tampoco veía a Bruno por allí.
Fue a tomar al bebé en brazos, Bruno lo había cambiado por un enterizo blanco que ella no había visto jamás, justo al frente tenía letras negras y alrdededor del cuello del pequeño había un collar con... ¿una sortija?
Oh Dios mío...
Se quedó petrificada al ver que era una hermosa sortija la que iba colgada del cuello del bebé, casi le da un infarto, pero eso no fue todo lo que la hizo creer que estaba a punto de un colapso, sino las letras que estaban escritas en la camiseta blanca de Cayden.
"Mommy...¿Will you marry my Daddy?"
![](https://img.wattpad.com/cover/51845436-288-k223237.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Aquí y Ahora (+18)
Любовные романы-Se supone que no deberías estar seduciendo a tu jefa...-. Le dijo, con respiración entrecortada al notar como el hombre que la tenia acorralada contra la pared de la sala de juntas adentraba una mano bajo su falda. - No...-trató de detenerlo-alguie...