Me separo de los brazos de Rich. Le doy un beso en la mejilla y le sonrío.
-Rich, voy a cambiarme. Enseguida bajo.
-Intentaré no liar alguna.
Bajo por las escaleras. Llevo unos pantalones ajustados vaqueros y una camisa blanca. Nada del otro mundo.
-Muy guapa. Venga vamos, ya he conseguido una mesa.
-¡Perfecto!- Me pongo mi abrigo gris y mi bufanda de cuadros. Ya estoy lista.
Salimos de casa y me subo a su coche. Los padres de Rich tienen mucho dinero. Su padre es abogado y su madre médica. Y por el BMW que tiene, se puede ver a simple vista. Se sacó el carnet el año pasado. Es de los mayores del curso, debido a que ha repetido unas dos veces.
-¿Estás segura de hacerlo? Todavía te puedes quedar en casa.
-Sí Rich. Vamos.
Llegamos al restaurante. Me quito el abrigo y Rich le dice algo al que se encuentra en la barra.
-Sí perdone, soy Rich Moncez. Acabo de reservar una mesa.
-Oh sí, claro. Aquí tiene la mejor mesa Moncez. Como siempre.- Responde el camarero. Era un señor de unos cincuenta años. Se le veía muy noble y respetuoso.
Nos sentamos en la mesa. El restaurante tiene pinta de ser muy caro. Pero bueno, he cogido unos ahorros.
-Tranquila, pago yo.
-De ninguna manera. Cada uno paga lo suyo.
-No. Has venido porque yo te lo he pedido. Así que, pago yo y no hay más que hablar. La próxima vez pagas tú.
-Está bien.- Gruño. Sonríe al ver mi cara de enfado de niña pequeña.
Estamos terminando de cenar cuando se oye la sirena de la policía en la parte trasera del restaurante.
-¡Vamos Rich! Tenemos que salir ya a ver que pasa.
-Espera que pago.- Le da el dinero al camarero y nos dirijimos a donde estaba la policía.
-Mierda.. Otra víctima de este asesino no... Ya van demasiadas este mes.- Se oye decir a un policía.
-Oiga perdona agente, por favor, ¿me podría decir como murió esa persona?- Pregunta Rich.
-No sé si debería decírselo... Pero se trataba de una mujer joven. Unos 20 años. Ha muerto de una apuñalada. Como todos los demás.
-¿Y cómo saben que se trata del mismo asesino?
-Porque siempre deja una firma. Les cruza los brazos y les tumba rectos de manera que parez...
-¡Agente Williams! ¿Se puede saber qué hace? ¡Venga aquí, ya!- Una voz se oye al fondo. Supongo que será el jefe.
-Rich... Esto es más serio de lo que parecía.
-Sí enana, sí. Hay que andarse con cuidado. No le digas nada de esto a nadie. Ni al amiguito ese tuyo.
-Vale Rich, acompañame a casa por favor...
-Claro que si guapa. Sube y te llevo.- Me da un beso en la cabeza para tranquilizarme.
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"Mítica chica"
Teen FictionMaría no es la mítica chica. Es diferente, no es como las demás. Su problema es que tiene miedo, nunca se ha atrevido a expresar sus sentimientos. Hasta que se da cuenta de que estaba enamorada del chico equivocado. Y cuando se da cuenta, ya es tard...