Franco levantó en sus brazos a Regina.
Franco: ¿Te puedo dar un beso?
Regina: ¿Por qué lo preguntas?
Franco: Porque estamos en Público. – Regina le acarició el rostro y lo besó. - Eso supongo que es uno Si.
Regina: Eso es un Gracias.
Luego se dirigieron de nuevo a recoger el carro, llegaron al edificio.
Franco: Pedro, cómo vas?
Pedro: Bien Franco... y ustedes cómo van?
Regina: Bien, (Ella hablaba algo tímida).
Franco: Regina, Pedro es de confianza, cuando necesites algo le peudes decir.
Pedro: Si Señora, Tranquila que conmigo todo está bien Guardado. – Franco se acerca y le da un beso a Regina en la mejilla.
Regina: Aaaah Ya entiendo.La Mujer que vio a Franco y a Regina llegó a su casa algo alterada. Tumbó todo lo de la mesa de centro.Franco: ¿Vas a entrar a mi apartamento?
Regina: Y ¿por qué no entras tú al mio?
Franco: ¿Segura?
Regina: No, pero de qué me sirve estar segura si siempre termino en tus brazos.
Franco: ¿O sea eso es un sacrificio para ti?
Regina: Mmmmm quieres cambiar de altar?
Franco: Jajajaja Y luego yo soy el loco.
Regina: Jajajaja Entras?
Franco: Convénceme. – Regina le dio un beso en la frente, otro en la mejilla, otro en el mentón, le iba a dar uno en la boca y se quedó observándolo. – Ya? Aun no me convences. – Lo besa con pasión y él le responde el beso, se acercan a la puerta y se recuestan en ella, Escuchan que el ascensor abre prontamente se separan, ella disimula e introduce la llave. La persona pasa desapercibido.
Regina: Entonces vas a entrar?
Franco: Me convenciste.Ellos entran, Franco la abraza por la cintura, ella sonríe, frente a frente le dice:Franco: Has cambiado mi vida.
Regina: Tu cambiaste la mia.
Franco: ¿Qué quieres hacer ahora?
Regina: Tú me dijiste que me ibas a sorprender todo el día.
Franco: Mmmmm quieres ver una película?
Regina: Siii, pero voy a fritar palomitas, te parece?
Franco: Me encanta la idea...- Se fue hasta su apartamento y trajo varias películas.
....Franco y Regina se acostaron en la amplia cama matrimonial, frente al televisor, abrazados, con una gran taza de palomitas...
Franco: Mira Traje estas...
Regina: De miedo??
Franco: ¿No te gustan?
Regina: Pues no es que no me gusten, sino que te puedo dejar sordo...
Franco: Jajajajaja, no importa.
Juntos veían la película, concentrados, Regina era más el tiempo con sus manos en los ojos....
Franco: Aahhh No así no se vale.
Regina: Pero me da miedo.
Franco: De qué, Nooo seas Bobita.
Regina: Mejor cámbiale, ¿por qué no vemos otra, de comedia? Si?
Franco: Miedosa jajajaja, está bien.
Regina: Aaaaay tu eres un chillón, ahí con la cebolla...
Franco: Ah si? Con qué así nos tratamos? Mmmm pues tu eres mmmm
Regina: Jajajaja Te gané de nuevo.Aquella Mujer delgada, alta de cabello castaño claro, se sentó frente a su computadora quería averiguar más sobre Franco Santoro. Nada de lo que ella no supiera aparecía en internet. Delfina es una mujer del pasado de Franco, la misma que los vio juntos.
Delfina: ¿Quién podrá ser esa Mujer? Volví para reconquistar a Franco y esa Mujer no será un obstáculo para mí.
Las risas de Franco y Regina eran contagiosas.
Franco: Creo que si disfruté esta película Mi Amor...
Regina: Eh? Me dijiste Mi Amor?
Franco: Qué? es que acaso no eres Mi Amor?
Regina: Desde que me hiciste Tuya...- Se dieron un tierno beso...Patricio se quedó a dormir junto a Virginia, pensaba en cómo podría hacer para poderse acostar con Regina, aún la veía como su mejor amiga, pero también pensaba en el problema económico por el que atravesaba su familia.
"Debo hacer algo que haga feliz a Regina y la tranquilice por un momento, no puedo estar evadiéndola todo el tiempo; debo ser inteligente antes que se aburra y me pida el divorcio"
Virginia: En qué piensas?
Patricio: En que mañana tengo que ir al apartamento muy temprano.
Virginia: Pero supuestamente estás viajando.
Patricio: Tienes Razón. Bueno, mañana si salgo de viaje, y Tú debes esperarme.
Virginia: Jajajaja ni que fuera tu mujercita... Ah Perdón, recordé que aún no es tu mujer.
Patricio: Cállate.
Regina: Ya vengo, voy a ponerme una pijama.
Franco: Y para qué?
Regina: Pues para dormir!!!
Franco: Dormir?
Regina: No estarás pensando...
Franco: Hacerte el amor toda la noche? Si!
Regina: Y si no quiero?
Franco: Mmmmm a mí me invitaron a este apartamento con el propósito de cambiar de altar.
Regina: Tengo algo que no he usado, ¿Me lo puedo ir a poner?
Franco: Dios Mio!!! Te quiero ver sin ropa y tú dices que vas a ponerte algo?
Regina: Es algo que compré para mi Primera Noche, creo que en nuestra primera noche no lo usé.
Franco: Ve!!! – Regina sonrió y corrió hacia el baño, a los minutos sacó una pierna – Jajajaja apresúrate. – Las carcajadas de Regina se escucharon adentro.
Regina: ¡Aquí Estoy! – Regina salió con un hermoso baby doll blanco de dos piezas, Franco quedó boquiabierto, Regina se sonrojó y se tapó el rostro con sus manos. Franco se levantó de la cama y se acercó ella quitando sus manos.
Franco: No te debe dar pena, te ves hermosa.
Regina: Nunca me había puesto algo así.
Franco: Pero siempre hay una primera vez.
Regina: Las mías lo han sido contigo. – Ambos sonrieron. Franco la besó delicadamente, un beso estremecedor, un beso que no podían terminar, la respiración de ambos se acelera, entre beso y beso la sonrisa de Regina fluye, en segundos la lencería blanca desapareció, estaban totalmente desnudos de pie uno frente al otro, acariciando cada centímetro de sus cuerpos, Regina ahora besa la espalda de Franco, él se gira y detalla el pecho de Regina.
Franco: No te había dicho lo bien que pinté ese lugar de tu Cuerpo. Mi parte Favorita. – Regina muerde su labio inferior, pone su dedo índice en los labios de Franco, él lo besa, caen a la cama, sintiendo como sus cuerpos vibran, él le acaricia una de las piernas a Regina, la cual ella levanta un poco, es ahí cuando Franco poco a poco la estremece de placer.
Regina: Quiero ser siempre tuya... quiero que solo tú me llenes de placer.
Franco entra en ella con tanta pasión que Regina exhala un fuerte gemido, arqueándose, sintiendo una explosión dentro de ella, "Te Amo" al oído con su respiración fuerte, aún Franco continuaba haciéndola suya, los leves movimientos generaban en Regina una sonrisa placentera, finalmente Franco la mira a los ojos, su cuerpo estaba bañado en sudor, le acaricia el cabello y de nuevo la hace gritar de un profundo placer. Él cae acostado a su lado, sonriendo, ella le acaricia la mejilla, aun sus respiraciones estaban aceleradas.
Franco: Me dijiste que me amas. – Ella lo abraza con fuerza, clavando su nariz en el pecho de Franco.
Regina: Es lo que siento. – Franco la abraza con fuerza, le da un beso en la cebeza.
Franco: Ahora sí, ¿Dormimos?
Regina: Si, Mi Amor.
Así abrazados cierran su día inolvidable, su día juntos.A la mañana siguiente, la luz del sol comienza a entrar por la ventana, Regina abre sus ojos, observa el rostro de Franco y sonríe, él abre sus ojos y le da un beso en la frente.
Franco: Que lindo es despertar de esta manera.
Regina: Opino lo mismo.
El timbre suena, ambos se sorprenden...
