Maraton 4/5 XXV

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Regina sonríe...llevaba puesto un vestido amarillo, corto, ajustado a su figura. Él se acerca a ella con una bella sonrisa, la toma de la mano y juntos se sientan en la cama.Franco: Estas Hermosa- Le dice y ella responde con un leve sonrojo. Él se acerca a sus labios, una de sus manos baja hacia la pierna derecha de Regina, la cual acaricia suavemente, provocando que un leve gemido se escapa de sus labios, pero es callado con los de él, ahí sentado al orillo de la cama, él Deja sus labios para bajar a sus piernas, comenzando por la derecha, quita una de las zapatillas que ella llevaba puesta, le iba besando cada rincón, Regina no pudo evitar soltar otro leve gemido ante esa acción, repitió lo mismo con la otra. Franco se levanta, se dirige hasta su consola musical y ahí le da "Reproducir" a una hermosa canción de Juan Luis Guerra... ♪ ♫ Tengo un corazón, mutilado de esperanza y de razón. ♪ ♫ ... él se acerca de nuevo a los labios de Regina continuando con las caricias, esta vez se notaban más ardientes.
No decían palabra Alguna, sus ojos hablaban por ellos, se notaba el amor, el deseo y la pasión en sus miradas. Sus besos se tornaban cada vez más apasionados, dejaron de ser aquellos besos tímidos de hace unos minutos. Los labios de Franco abandonaron los de Regina para bajar a su cuello, conoce muy bien su punto débil, sabe que adora que bese su cuello, fue bajando hasta su pecho y subió nuevamente hasta llegar a sus labios.
♪ ♫Quisiera ser un pez para tocar mi nariz en tu pecera, y hacer burbujas de amor por donde quiera, pasar la noche en vela mojado en ti. ♪ ♫ ... Continuaba sonando la canción...
Ambas manos de Franco, comenzaron a subir el vestido de Regina, ella le ayudó a quitarlo, para tirarlo en algún lugar de la habitación, quedando solo con lo que traía debajo. Los dos se sientan en la mitad de la cama, Ella frente a él, va quitando botón a botón su camisa, y besa el torso que va quedando al descubierto y así desapareció aquella camisa, quedando junto a su vestido. Luego para que todo sea parejo, Franco decide quitarse el jean que llevaba puesto, para luego retomar su lugar. Pero esta vez, la tomo e hizo que se sentara frente a él, mientras la besaba, acariciaba su espalda hasta llegar al broche de su brasier, el cual desprendió y arrojó al suelo, junto con las otras prendas, se queda observándola unos minutos.
Regina: ¿No te gusto? – Preguntó.
Franco: No, me encantas- Respondió, para luego volver a besarla y recostarla. -Ahora solo disfruta- Le dijo separándose de sus labios.
Comenzó a besar su vientre y bajando Fue recorriendo cada centímetro del cuerpo de Regina con su boca, él le deslizó un panty negro que llevaba puesto, los labios de Franco se posaron en la parte intima de ella, jugueteando con su lengua en aquel lugar, Regina se saboreaba y mordía sus propios labios. Franco se despojó de última prenda que llevaba puesta, Regina se acostó boca abajo, él le besaba la espalda, ella sonreía a sentir cada beso, se acomoda su cabello para un lado mientras Franco llega hasta su cuello, ella se gira Y así entre besos y caricias, Ahí sobre ese lecho, él sobre ella, Franco entra con dulzura en Regina, sin dejar la pasión y la sensualidad a un lado, la besaba ahogando sus gemidos, sus miradas eran fijas la una en la otra, los besos eran apasionados, sus lenguas se saboreaban, Cuando pudo liberarse de sus labios, entre suspiros ella le dice "Te Amo". Sus manos estaban entrelazadas, Regina las cierra con fuerza, Franco la hacía vibrar con movimientos dentro de ella, es ese mágico momento sus cuerpos no anhelaban separarse nunca.
Esa noche la luna estaba más brillante que nunca, las nubes se habían ido, la lluvia había cesado, Regina se recuesta rendida sobre el pecho de Franco, él la acariciaba dulcemente el cabello y le dice "Te Amo".Patricio regresa al edificio, había olvidado algo, Pedro lo observa sorprendido.
Patricio: ¿Pedro Ya llegó Regina?
Pedro:
Esteemmmm, mmmmm, No, aún no.
Patricio:
Ok, subiré al apartamento por un documento que olvidé... Ah! Necesito que vigiles muy bien a Regina, si sale con alguien, con quién sale, a qué horas llega, cuanto tiempo dura por fuera.
Pedro: Pero Señor...
Patricio: Te remuneraré por esto...
Pedro: Señor es que me queda muy difícil, recuerde que yo estoy es por turnos.
Patricio: Bueno en los turnos que estés.
Pedro: Está bien Señor.- Patricio entra al ascensor – En las que me pone Franco. Franco! Regina! , Patricio! , Dios esto será una batalla. – Pedro insiste llamando al celular de Franco, no tuvo respuesta, intenta al de Regina, no responde; ambos estaban ocupados, abrazados, descansando de la faena vivida. A los pocos minutos baja Patricio.
Pedro: ¿Todo bien Señor?
Patricio:
Si, ¿por?
Pedro: No por nada, por si se le ofrecía algo.
Patricio: No Tranquilo, Gracias.Regina: Fuiste todo un pez...
Franco: Mojé mi nariz en tu pecera. – Ella se sonrojó, él la besó.
Regina: Esos besos tuyos que saben a gloria.
Franco: Eso opino de los tuyos. – Franco desliza una de sus manos y la posa sobre el vientre de Regina. – y él o ella ¿cómo se sentiría?
Regina: Jejeje no lo sé, cuando nazca se lo podrás preguntar.
Franco: Jajajaja No seas burlona...
Regina: No no lo soy... - Franco la tomó por las mejillas y le dio un beso alocado, con carcajadas de parte de ella, después el beso cambió a ser apasionado, ella lo abraza por el cuello, entre los besos Franco le sonríe.
Franco: Es pasar la noche en vela...- Le dice acariciando con su pulgar los labios de Regina.
Regina: Lo asumo. – Y sonríe.Patricio manejó su auto hasta el aeropuerto de donde saldría pronto el vuelo en el cual iba pilotear.
Copiloto: Hubo cambio de Rutas.
Patricio:
¿Cómo así?
Copiloto: Si el controlador hizo cambio de Rutas, creo que iras de Copiloto para Colombia.
Patricio: ¿Colombia? Me gusta la idea. Bueno, supongo entonces ya no irás con nosotros.
Copiloto: Exacto, iré de copiloto para Chicago.
Patricio: Buen viaje.Delfina envío un nuevo mensaje a Patricio:

Tu esposa te engaña con quien menos lo piensasPatricio Rivero: ¿Por qué no me dices tú quién eres y por qué sabes lo de Regina?Te puedo decir que estoy de tu lado, conozco a la persona que sale con tu esposaPatricio Rivero: ¿Lo conozco?No lo sé, supongo que sí.Franco amó de nuevo a Regina, sus besos y sus caricias la hacían vibrar a cada momento. El Teléfono suena en la madrugada, Regina quedó recostada boca abajo sobre la cama, Franco se levanta a contestar algo preocupado por la llamada.
Pedro: Por fin!!
Franco:
¿Qué sucede?
Pedro:
Patricio estuvo aquí, preguntó por Regina.
Franco:
¿Qué dijiste?
Pedro: Que aún no llegaba.
Franco:
¿A Qué horas? ¿El que se hizo?
Pedro: Eso fue a los minutos de Regina haber subido, él Se fue nuevamente.
Franco:
Gracias Pedro.
Pedro: Ah, y también me dijo que lo mantuviera informado de cada paso de Regina, creo que sospecha algo. – Franco pone una de sus manos en la cabeza y bosteza.
Franco:
No lo creo, ya le habría hecho una escena de celos a Regina. Me voy a descansar, Hablamos luego. – Franco regresa a la cama, vió a Regina acostada, dormida, desnuda. – No hay pintura más hermosa que tu cuerpo al natural. – Le besa la espalda y la cubre con una de las sabanas, se acuesta a su lado, abrazándola contra su cuerpo, y ahí juntos se quedan dormidos.


Tras viajar cuatro horas y treinta minutos Patricio llega a Bogotá, era de madrugada, a pesar de eso sale un poco a observar la ciudad, o lo más cercano al aeropuerto.
Patricio: Nunca había estado en Colombia, se ve agradable.Regina despierta, los rayos del sol caían sobre su rostro, observa que Franco no está a su lado, se cubre con la camisa de él y camina hasta la cocina.
Franco: Buenos días Princesa Dormilona.
Regina:
¿Qué haces?
Franco:
Preparé una taza de chocolate.
Regina:
Wow! Si sigues así me engordarás.
Franco: Si exageras... He escuchado que el chocolate es bueno para mujeres embarazadas.
Regina:
¿Si?
Franco: No jajajaja, solo que quise preparártelo.
Regina:
Jejejeje y eso me enamora más y más de ti.
Franco: Mi Amor, ¿crees que Patricio sospecha algo?
Regina:
No, no lo creo. Sabes muy bien cómo reaccionaría.
Franco: Tienes Razón...
Regina: Si tengo algo de miedo cuando se entere...
Franco: No te preocupes...Hay que ir a Trabajar, ¿nos duchamos? – Regina sonrió y asintió con su cabeza.En la empresa había mucho trabajo por realizar, Esteban y Regina no se vieron durante la mañana, cada uno estaba ocupado en lo suyo. Franco, por su parte, mientras trazaba líneas en sus planos se imaginaba su vida de padre y sonreía.Patricio llega al medio día al apartamento, tira a un lado su uniforme, deja la maleta en la sala, sale al balcón, decide llamar a su madre:
Josefina: ¿este milagro?
Patricio:
¿Mamá cómo van las cosas en la empresa?
Josefina:
Tu papá no logra salirse del déficit. Recuerda que estamos depositando toda nuestra esperanza en tu matrimonio.
Patricio:
Si, si, si mamá si lo recuerdo.
Josefina:
Debes embarazar rápido a Regina y cuando eso suceda debemos hacer qué Eugenio muera sorpresivamente. – Patricio se va para la habitación ahí estaba el bolso de Regina, un sobre se estaba saliendo de él, causando en Patricio curiosidad.
Patricio:
Mamá te llamo ahora.
Josefina: ¿Pasa algo?
Patricio: Nada, te llamo luego. – Se fija en el sobre, esta rotulado a nombre de Regina además lleva el logo de un clínica. – ¿Regina enferma?. – Saca las hojas que ahí estaban, poco a poco comienza a leer aquellos resultados... al final lee: "Test de Embarazo à POSITIVO".



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