Franco: ¿Qué?!!
Regina: Perdón, pero...
Franco: Creí amarla, pero estando con ella sentía un vacío, no sé, debe ser porque andaba con los dos.
Regina: Pero te dolió!!!
Franco: ¿Qué te pasa mi vida? ¿Por qué esas preguntas?
Regina: No sé...
Franco: Está bien, Me sentí liberado, la verdad, estaba a punto de casarme pero no sentía que quería pasar mi vida entera a su lado. Y tú ¿Lo amaste?
Regina: Sabes muy bien que no, que me enamoré del amor, como dice Esteban. Contigo he sentido, amor, pasión, adrenalina hasta miedo.
Franco: ¿Miedo?
Regina: Si, de perderte.
Franco: Nunca, Te prometí estar siempre cerca de Ti. Recuerdas los votos? – señalando su pulsera.
Regina: Si, mira la mía.- Franco se abalanzó sobre ella y la besa. - ¿Nos bañamos?
Franco: Claro Mi vida. – Ambos entran a la ducha... Allá se amaron de una manera tierna, entre caricias, burbujas, agua y besos apasionados.Luego de uno minutos, ambos bajaron tomados de la mano... Paula se acerca con Marco en brazos.
Paula: Este joven no ha querido comer.
Regina: ¿Por qué campeón?
Franco: Ven acá!!! – Le extiende los brazos.
Paula: y tu brazo?
Franco: Me dieron un masaje que lo ha dejado mejor. - Regina sonrió algo apenada.
Regina: Eeehh, ¿Y Esteban?
Paula: De eso te iba hablar.
Regina: Sucedió algo?
Paula: Tu padre despertó.
Regina: ¿Qué? ¿En serio? – Expresó emocionada- ¿por qué no me avisaste?
Paula: Ehhh pues porque... ay Regina no quería interrumpir.
Franco: Entendí, Jejeje, Mi vida si quieres ve al hospital
Regina: Y la audiencia?
Franco: Yo voy a la audiencia, tú ve al hospital.
Regina: Pero debo ir a la audiencia contigo.
Franco: y yo al hospital contigo.
Paula: Claro y Paula se queda con Marco...
Regina: ¿Te puedes quedar con él? ¿Si? ¿Si?
Paula: Claro que si, ahora decídanse ustedes.
Regina: Hagamos esto, vamos a la audiencia y de ahí al hospital.A la hora de la audiencia, Regina entra primero, Franco se quedó un poco atrás firmando un documento, ella entra y se detiene un momento al ver a Josefina, su ex suegra se gira mirándola con ojos llenos de furia, Franco entra y toma de la mano a Regina brindándole fortaleza entre sus manos, siguen y se sientan al otro lado de donde se encuentra Josefina.
Franco: Ella es Josefina? – Le pregunta en voz baja.
Regina: Si, pensé cuando entré me iba atacar con sus sandeces.