― ¿Que hice mal? ― pregunte en cuanto subimos al auto de Harry. Habían pasado las horas rápidamente, y las palabras que había pronunciado después de aquel beso seguían grabadas en mi cabeza.
―No debiste hacer eso… ― comento luego de unos minutos de haber estado callada. ― No… no debimos. ― dijo en un murmullo. Su voz fue quebrada, al borde del llanto.
―¿Por qué dices eso? Lyla yo…
―Callate… ― pidió mirándome con sus hermosos ojos tristes. ― Tú… tú tienes novia y yo…
― ¿Tu qué, Lyla? ― pregunte con seriedad, de tan solo imaginarme lo que pudiera decir. Comenzaba mi cabeza a crearse ideas perturbadoras, y debía admitir… que me estaba volviendo un celoso compulsivo y eso realmente no me gustaba.
―Yo trato de olvidarte… ― hizo una pequeña pausa, y cuando estaba a punto de hablar, ella lo hizo. ― Y te juro Zayn Malik, que lo lograre… cueste lo que me cueste. ― lo dijo con tal tono que me dejo helado. Salió corriendo de aquel lugar, desapareciendo rápidamente de mi vista. Hubiera salido tras de ella, pero mis piernas se habían quedado inmóviles y pegadas al suelo.
―Harry, quiero que me lleves a un acantilado y me tires de ahí sin pensarlo dos veces. ― dije con voz apagada.
―Ya, déjate de tonterías Malik. ― su vista se encontraba fija en la carretera. ― ¿Enserio creíste esas estúpidas palabras? Conozco a Lyla. Se como es, por algo es mi mejor amiga, y no puedo creer que haya dicho eso. Me NIEGO a creerlo.
―Yo… ya no se qué hacer Harry. ― musite ― Si tratar de conquistarla nuevamente, pero, tampoco me da la oportunidad de acercarme un poco ― dije― O… darme por vencido y dejar que se olvide de mi, dejar de atormentarla y que sea feliz. Quizá sería lo mejor ¿no crees? ― Voltee a verlo.
―Tonterías ― susurro Harry, aun sin mirarme. ― ¿realmente eso quieres? ¿Qué se olvide de ti, sea feliz con alguien más… mientras tú te mueres por ella?
―Pero Harry…
―Ya Malik ― me interrumpió ― Deja, no volveré a decirte nada. Toma tu mismo tus propias decisiones, porque ya veo que no tomas enserio los consejos que yo u otro de los chicos te pueda dar. Solo… haz lo que creas ‘correcto’. ―rodo los ojos al decir esto último. ― Yo… ya no opinare nada. ― y el resto del camino fue en total silencio.
Quizás Harry tenía razón, y no quería escuchar o tomar enserio la ayuda que el podía otorgarme. Quería hacerlo todo a mi modo, y realmente estaban saliendo mal las cosas. Pero tenía demasiados problemas rondando en mi cabeza. Tenía que terminar toda relación con Jessica, y tener la oportunidad de acercarme a Lyla.
En cuanto baje del auto de Harry, camine hacia el edificio, para después entrar al elevador que me llevaría a mi departamento. Estaba cansado tanto física como mentalmente. El elevador marco en piso numero 5 y en cuanto se abrieron las puertas salí por este. Necesitaba urgentemente descansar. Últimamente no dormía bien, y poco a poco, el sueño y cansancio se iba acumulando en mi cuerpo. Las ojeras comenzaban a notarse.
Me tumbe en la cama dispuesto a dormir y despejar la mente un rato, pero al instante en que mi cuerpo cayó sobre en colchón el rington de mi celular, anunciando que tenía una llamado, irrumpió el cómodo silencio que se había hecho en la habitación.
― ¿Si? ― conteste con voz cansada.
―Amor… ― pronto la voz de Jessica se escucho por el teléfono. Podía notar cierta felicidad en ella. ― Llegare mañana a las 8 am. ¿Puedes pasar por mí al aeropuerto? ―Solté un gran suspiro.
―Jessy… Realmente estoy muy cansado, no quiero levantarme temprano y…
―Amor, por favor… Tengo que hablar contigo sobre demasiadas cosas. ― insistió mí… novia. ― Te veo mañana. Adiós. Te amo… ― No respondí, solo termine la llamada.
De acuerdo. Esta era la oportunidad para terminar de una vez por todas con ella, y tratar de acercarme poco a poco a Lyla. Tenía que pensar muy bien como lo haría.
Primero, tenía que conseguir su número. Marque al número de Cher que rápidamente contesto, e hice lo necesario para que me lo diera. No fue muy difícil. Cuando colgué con ella, teclee rápidamente el numero, revisando varias veces para no equivocarme. Pense muy bien todo lo que diría, y sin pensarlo dos veces –ya que podía arrepentirme- presione el botón verde esperando a que contestara.
― ¿Hola? ―su dulce voz se escucho por el auricular del teléfono.
―Lyla…
―Zayn…
―No cuelgues, por favor… solo, escúchame. ― dije rápidamente, ya que daba por seguro que haría tal cosa. ― Te amo Lyla, no sabes cuánto, y hare lo posible por conquistarte nuevamente. Solo, quiero que me des la oportunidad de acercarme a ti. Prometo ir despacio. Por favor… perdona las estúpidas palabras que te dije aquella noche…
―Zayn… no insistas. ― dijo ella con voz apenas audible.
―Si Lyla, si insistiré. No me rendiré hasta tener tu amor de nuevo. Hasta que estés entre mis brazos y nos digamos lo mucho que nos amamos. Te amo Lyla, e insistiré las veces que sean necesarias para volver a tenerte conmigo.
―…. También te amo. ― dijo, para colgar rápidamente. Una estúpida sonrisa se asomo en mis labios y rei como un tonto enamorado.
Me deshice de mi ropa, quedando únicamente en un bóxer negro, para después ponerme el pantalón de mi pijama, y me metí entre las sabanas, sin quitar aquella sonrisa de mi rostro.
Pero, oh… tenía que resolver un problema aun. No sería tan difícil. Solo tendría que meditar muy bien mis palabras, y por fin sería feliz con Lyla.