Enemigo. Editando/Corrigiendo

capitulo 21

La impotencia inundo mi sistema, no sabia que hacer.
-Matt, ya sabes que hacer. -Un chico se acerco a mi con una jeringa, le gruñí, odio las agujas. -No, no, no ¿que dijimos. -Bufé, sentí como la aguja se enterraba en mi piel, me queje y pronto empecé a relajar me. Tenia un plan en mente, soy híbrida, el efecto de eso no duraría mucho, máximo siete minutos, no mas.-Buena noches dulzura. -El sueño invadió mi sistema, mis párpados empezaron a pesar y solo me deje llevar por la oscuridad.
***
Desperté, mire a mi alrededor, aun seguía en mi forma lobuna. Mi patas delanteras y mis patas traseras estaban atadas y estaba siendo arrastrada por el mismo hombre que me inyectó la anestesia, al parecer estaba el solo. No sentía el aroma de Isaac y eso me alarmó un poco, no podía hacer ningún movimiento o si no se daría cuenta de que ya había despertado.
Estuve unos segundos mas así asta que me asegure de que el chico estuviera solo para luego aflojar de las sogas de mis patas delanteras y luego las terceras, jale la soga llamando la atención del chico, este se tenso y rápido dio media vuelta, me deshice por completo de las cuerdas y me lance sobre el, clave mis garras en su estomago, rasguñé su rostro y sus piernas, eran heridas que no lo matarían pero que no lo dejarían perseguirme.
Salí corriendo en dirección contraria a la que íbamos. Tenia que volver a la manada lo mas rápido posible.
Seguí corriendo, no sabia que tan lejos estaba del territorio y no me detendría a pensarlo, tan vez el cazador ya habría llamado a los demás y ahora me estarían buscando.
Corrí, corrí y corrí asta que caí en cuenta de que me había perdido, tal vez si tuve que haberme detenido a pensar un poco, bufé, ¿como es que soy tan idiota para perderme?. Me tumbe en el suelo, no sabia que hacer y además tenia hambre.
Las horas pasaron y la noche se estaba haciendo presente, mi estomago rugía por comida ¿que no se puede callar por un momento?, me levante y camine un poco mas, a los pocos minutos de caminar sentí un aroma familiar, muy familiar empecé a corre y ahí estaba la entrada al territorio. Me golpee mentalmente, estaba tan cerca del territorio y no me di cuenta, de seguro fue el hambre que no me dejaba pensar bien.
El aroma de Isaac llego a mis fosas nasales, mi loba se empezó a desesperar, no la hice esperar mas y corrí siguiendo el aroma de nuestro mate. Cuando lo encontré me lance sobre el, lambí todo su rostro llenando lo de saliva.
-ya, ya, mi amor, basta -reía el, pare de lamer su rostro y lo mire atenta, el paso la manga de su remera por su cara limpiando la poca saliva que le había dejado, luego me miro con ternura -oh, Renata, estaba tan preocupado -me abrazo, le correspondí. Nos separamos y volvimos a la cabaña, subí a mi cuarto, volví a mi forma humana, me bañe y me vestí, baje nuevamente las escaleras.
-¿donde están todos? -pregunte al ver que no había nadie en casa. -hubo un problema con el alpha y están tratando de llegar a un acuerdo, toma -me entrego un plato con fruta picada, le agradecí y me senté en el sofá e Isaac se sentó a mi lado.
-¿a donde te llevaron?
-no lo se. -suspiro y me abrazo
-me preocupe.
-se hacen llamar cazadores y ni siquiera tomaron en cuenta que soy híbrida
-¿a que te refieres?
-me refiero a que esa cantidad de anestesia me hubiera echo dormir media hora si fuera una loba normal. -el asintió y beso mi cabeza.
-pues, que bueno que no tomaron en cuenta de que eres una híbrida. -le sonreí y me levante para llevar a la cocina el plato, Isaac me siguió, me abrazo por detrás, reí.
Volvimos a la sala y ya habían llegado mis padre, mamá se sorprendió al verme y se abalanzo sobre mi al igual que papá y Alan.
-hay, ya no me dejan respirar.
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Maratón; 3/3

Disculpen por tardar en subir este capitulo.