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-Ni, bebé.-Maura movió suavemente el hombro de su hijo, intentando despertarlo. Hoy por la mañana, cuando despertó, se llevó una gran sorpresa al ver a su ex-esposo sentado en su sofá, viendo televisión. No recordaba que aún tenía la llave de la casa, pero lo que le extrañaba era porque estaba allí. No iba a visitar a sus hijos desde hacía un tiempo, ¿Por qué justo ahora?

-No, mamá, quiero dormir.-Gruño el rubio mientras tapaba su cabeza con las sábanas. Maura rodó sus ojos, sonriendo a medias.

-Te quiero despierto en menos de 5 minutos, tu padre te está esperando.-Comentó y escucho un bufido por parte de su hijo.
-Puede esperar.-Contestó con simpleza. La rubia, cansada de que su hijo la ignorara, tiro rápidamente de la sabana de Niall logrando que este soltara un par de maldiciones.

-¡Mamá!.-Lloriqueo mientras se hacía un pequeño bollo en la cama. Estaba sólo con su bóxer y hacia demasiado frío.-¿Podrías irte? Estoy sólo en bóxer y...-Lo interrumpió.

-Bebé, no tienes nada que no conozca.-Niall hizo una mueca de asco mientras intentaba sentarse en la cama.

-¡Mamá!.-Exclamó y la mujer río.

-Ya.-Dijo riendo suavemente.-Te buscaré tu ropa y la dejaré sobre la cama, ¿Bien?.-Aviso mientras se encaminaba hacia el ropero del chico. Niall asintió aunque siempre le molestó la idea de que le buscaran la ropa que tenía que usar. Él quería poder elegir que usar pero...la última vez que había hecho eso todos se habían reído. El rubio supuso que se había puesto cualquier cosa, por lo que, desde ese momento, su madre elegía la ropa que se pondría. Aunque él no estaba seguro de que tan bien podía vestirlo su madre.

Varios minutos después el rubio se encontraba deslizando su bastón hacia la sala, donde podía escuchar las voces de sus padres, que hablaban casi en susurros.

-Campeón.-Bobby se paró del sillón donde se encontraba, dejando a Maura hablando sola. En realidad, estaban discutiendo. Se acercó con rapidez a su hijo menor y lo abrazo. Niall forzó una sonrisa, sin devolverle el abrazo. No podía dejar de recordar lo que Greg le había contando y pensar que su padre ahora era un completo desconocido. Él...aún no podía creer que un padre hiciera eso con sus hijos.

-Hola.-Murmuró mientras se apartaba con rapidez del abrazo. La mano de su padre tomo su muñeca, como lo hacía Greg, y lo encaminó con cuidado hasta el sillón donde antes se encontraba. Le dirigió una mirada a su esposa, ordenándole que se vaya.

-Quiero hablar con él.-Explicó y Niall frunció un poco su ceño, porque no sabía con quien estaba hablando. Supuso que se trataba de su madre, por lo que no le dio importancia. Maura a duras penas acepto, soltando un suspiro y encaminándose hacía la cocina. No dejaría del todo sólo a Bobby con Niall, sabía que ese hombre estaba tramando algo.-¿Tienes algo nuevo para contarme, campeón?.-Se cruzó de brazos, recostándose contra el sillón.

-No.-Murmuro algo confundido por la pregunta de su padre. Bobby sonrió con malicia, sabiendo lo que su hijo escondía.

-Vamos, ¿Piensas que porque estoy lejos no me enteré?.-Pregunto con algo de gracia en su voz, Niall se removió en su asiento, pensando que tal vez sabía de lo que estaba hablando su padre.

-¿Enterarte? ¿De qué estás hablando, papá?.-Susurró con lentitud.

-No estoy para idioteces, Niall.-La paciencia de su padre había llegado al límite.-Greg me lo dijo.-Maldito Greg, nunca creyó que lo haría. ¿Por qué no lo dejaba hacer su vida?.-Styles te convirtió en una de esas mierdas.-Murmuró Bobby, mientras apestaba sus puños. ¿Que había hecho mal para que a sus dos hijos les gustarán los hombres? Si, decía dos porque aunque Greg tenía esposa y un hijo sabía que aún seguía lamentándose no haber podido estar con Connor.

A través de tus ojos-Narry StoranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora