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Era el cumpleaños de Anne y Harry habia dicho que pasaria a buscar a Niall para que pudiera saludarla. En el tiempo que Harry y Niall habian pasado juntos Anne le habia agarrado demasiado cariño al rubio, el mismo que él tenia por ella. Entonces el oji-azul habia arrastrado--en realidad su madre lo habia guiado--hasta el centro comercial a la mujer que le habia dado la vida y le habia pedido que eligiera un buen regalo para la madre de su novio.


Habian conseguido un perfume caro y una linda camisa, según su madre. Por lo que, Niall se encontraba preparandose para ir a la casa de los Styles. Habria una comida y estarian todos los familiares, lo que lo ponia verdaderamente neevioso.


El timbre de la casa sono cuando él se estaba abotonando, como podia, la camisa que su madre habia dicho que era azul.-¡Mamá. Abre la puerta!-Grito y escucho que su madre decia algo pero no llego a entender.

Termino de abotonar la camisa sintiendo que habia hecho algo mal pero no le dio importancia y se giro hacia donde sabia que estaba su cama para luego estirar sus manos hacia la superficie blanda. Encontro los jeans con rapidez y se dispuso a ponerselos.


Por otro lado, Maura se dirigia hacia la puerta mientras tarareaba alguna vieja canción que habia sonado en la radio. Abrio la puerta y se encontro con un castaño que conocia demasiado bien. Le sonrió a la mujer mostrando sus hoyuelos y esta le hizo una seña para que pasara, devolviendo  el gesto.


-Hola Harry, ¿Como has estado, cariño?.-Pregunto con normalidad, pensando ai seria el momento indicado para decirle lo de Niall y el padre. Se sirigio a la cocina con Harry pisandole los talones mientras le contestaba:


-Muy bien, señora Horan. ¿Y usted?.


-Bien cariño.-La mujer se dirigió hacia la mesada de la cocina, donde tenia una bandeja con galletas hechas hace una hora. La tomo y se encamino hacia la mesa donde Harry se habia sentado, dejandolas frente a él.-Come.


El castaño rió mientras asentía y estiraba su mano para poder tomar una. Los Horan amaban cocinar, al menos la señora Horan y Niall amaba comer. Lo habia aprendido hacia poco tiempo, también se habia dado cuenta se que odiaba compartir se su comida.


-Harry, tengo que hablar contigo.-El castaño se puso nervioso al instante mientras tragaba con rapidez la galleta que tenia en la boca para poder responder.


-Claro, dígame qué sucede.-Sonrio de forma amble hacia la mujer.


-Mira Harry, se que eres un buen chico y entenderas esta situacion.-Hizo una pausa antes de proseguir.-No puedo estar más agradecida de que estes con mi hijo, eres un rayo de luz en la vida de mi pequeño.-Harry sonrió mientras veia como Maura estiraba su mano hasta la la de él, tomandola cuando la tuvo cerca.-Es por eso que espero que comprendas que...Niall tiene que irse.


Harry la miro fruncio su ceño notoriamenten, sin terminar de comprender lo que le habia querido decir.

A través de tus ojos-Narry StoranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora