capitulo 3: Resiliencia

704 26 3
                                    

Resiliencia: capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos.

-Buenas noches señorita O'conell..-dijo la profesora-¿otra vez tarde?, la próxima va falta entera.

-perdón, se me hizo tarde-titubeo casi en un susurro.

-pase, pase y siéntese. 

Amanda busco con su mirada un lugar , el que ocupaba siempre estaba ocupado por uno de sus amigos. 

El único lugar vacío era ese que no quería... cerca de simón..lo odiaba ,solo verlo la irritaba,ponía sus dias patas para arriba, siempre le arruinaba la vida con esas bromas fáciles, y es que la molestaba mas que nada porque ella siempre defendía el amor...en cambio, él, lo detestaba, era una "perdida de tiempo" y él mismo le prometió que se iba a encargar de demostrarle  que era todo fantasía, solo creencias en libros y cuentos.Nada en este mundo era color de rosas. 

Un par de años atrás, cuando Simón llego al colegio ella se enamoró de sus ojos, su sonrisa y todo lo que él era, su belleza varonil y más que común gracia , se hicieron instantáneamente tema de generalizada admiración, especialmente en Amanda...se hicieron buenos amigos.

Pero cuando él descubrió los sentimientos que ella le dedicaba, comenzó a molestarla y la ponía constantemente en ridículo con sus bromas...por eso, para estas alturas del año, ya hacia mucho tiempo que ni se miraban.

-Dame mi lugar!!-dijo Amanda.

-Señorita O'conell, ordené que se siente, no que movilice al salón-mustio la profesora.

-Es que..este...es mi lugar-y miró a Alan con ojos grandes en señal de movete!

-siéntese con Becker, señorita, además quiero continuar con la clase, luego se intercambian.-finalizo el tema.

Amanda frustrada mordió con fuerza su labio inferior y pensó que nada le podía ir peor...o si?, estar sentada con él no era una buena señal. Tomo asiento , casi al borde de la silla, ni siquiera lo miró , menos dirigirle la palabra, estaba tensa y de mal humor , respiraba con dificultad, rogando que la clase termine.

Simón la miraba divertido, sabia que se había portado mal con ella durante mucho tiempo, pero para que mezclar las cosas?es una chiquilla infantil que cree en cuentos de hadas y de amor...por favor...que estupidez-pensaba-mientras algo desconocido se movió dentro de su pecho.

Simón sabia que sus padres del corazón lo amaban y se amaban,si!...,pero eran contadas las parejas que tenían un... y vivieron felices para siempre...

Pero la forma de sus labios rosados, su piel blanca y esas lineas que formaban unos ojos perfectos, el cabello cayendo sobre sus hombros de una manera delicada y su aroma, ese aroma embriagador que sintió apenas tomo asiento y lo hicieron cerrar sus ojos por un momento, lo sacaron de sus pensamientos dándose cuenta que estaba mirando y estudiando de manera excepcional cada rasgo de su cara, no podía quitar sus ojos de ella, cuando se dio cuenta giro su cabeza lentamente al frente. 

Ni idea que carajos decía la profesora, algo de leer unos apuntes de literatura, luego se los pediría a Matias.

Amanda se sentía nerviosa, justo estaba donde menos quería. En ese momento se percato que la miraba descaradamente, seguro estaba tramando algo -pensó- no le daría el gusto. Giro su cabeza desafiante y lo encaro. No le tenia miedo.

-Se... te perdió algo?- le dijo seria, con mirada atenta pero imperturbable.

Simón sintió como un balde de agua fría le caía y lo descoloco de sus pensamientos devolviéndolo a la realidad.

Y QUÉ...?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora