Ashley

Ya ha pasado un año de lo ocurrido pero, sigo sin borrar aquellas imágenes de mi cabeza...

Es imposible no pensar en el pasado si lo tienes al frente tuyo.

La noticia se hizo viral. Ahora está por todas partes. La gente que me ve por las calles no deja de pedirme fotos y cosas así.

Yo siempre mostrando una sonrisa aúnque, por dentro esté destrozada por completo. Siempre llego a casa en silenció y comienzo a llorar en mi habitación.

No he vuelto a ver a mis amigos... ni a Chris. Pensé que saliendo de esto estaríamos todos juntos pero, simplemente no fué así.

Estoy últimamente más delgada, mi cabello ahora es un poco más largo y mi estatura sigue siendo la misma. No se la razón de por qué mi cabello va creciendo cada vez más, bueno. Detalle.

(...)

Ya es de noche. Me puse mi gorra y me fuí a casa. En el camino pude ver a las personas con sus paraguas porque probablemente iba llover. No me importa en verdad... Si me mojo me va a dar lo mismo.

Seguí caminando. Estába muy decaída. Mis ojos estaban rojos, me dolían las piernas. Pensaba y pensaba...

-Si tan solo ahora tuviera a alguien que me cuide y quiera...

Las gotas de lluvia calleron en mi nariz avisandome que ya la lluvia estaba comenzando.

-Esperen... Esa no es... ¿Ash?.

Lo dijo una voz femenina. Dí un pequeño salto al escuchar esa voz. Giré y encontré a Sam y a Mike. Los dos estaban con paraguas y al verme se acercaron corriendo a abrazarme.

-¡Ashley! ¡Woo! ¡Estás bien, estás bien!.
Dijo Sam, emocionada, mirándome de pies a cabeza.

-S-Sí... Supongo que sí. ¿Estoy viva, no?.

No demostraba estár muy emocionada por verla pero, si que lo estaba. Era hermoso volver a encontrarme con dos grandes amigos, tal vez nunca nos llevamos tan bien, ni tuvimos el tiempo necesario para hablar y conocernos mejor pero, lo importante era que, somos amigos.

Mike me observaba con una sonrisa, mientras, Sam me tomaba de las manos y daba unos pequeños saltos.

Pasamos un rato charlando de lo que estabamos haciendo últimamente. Yo les dije lo que hacía y ellos se preocuparon. Era de esperar.

-¿Todavía no logras... Superar el trauma?.
Dijo Sam, pasándome un paraguas.

-N-No.
Fuí sincera y tomé el paraguas, luego lo abrí.

-T-Tranquila Ash. Algún día lo vas a lograr. A mí también me está complicando mucho pasar del trauma pero, se puede, así que tranquila.
Dijo Mike, posando una de sus manos en mi hombro.

-S-Si...
Mi mirada permaneció en el húmedo suelo.

-¡Eh, Mike!, ¿Cierto que es genial volver a verla?.
Sam se veía bastante emocionada.

-¿M-Mmh?.
Levanté mi mirada.

Obvio, ya estamos casi el grupo completo!.

-¿Grupo com-comp-completo?.
De pronto la emocionada era yo.

-E-Eh, si... Casi completo.
Noté algo de nervios en ella.

-Estamos casi todos pero falta... Chris... Pensábamos que los íbamos a encontrar juntos pero, ahora estás sola y bueno...
Mike.

C-Chris...

¿Qué pasó con Chris?...

-Bueno, ya ven. No estoy con él... Y no se donde está.

Los chicos se quedaron mirando y luego posaron una de sus manos en mis hombros. Fuímos a pedir un taxi. De pronto llegamos a una casa grande y de color morado, un fuerte morado. Entramos allí y me llevé la sorpresa de encontrarme con los demás.

Estaban todos sentados en un sillón. Todos, todos menos Chris. Chris no, Chris no estaba.

Los demás apenas verme saltaron a mis brazos, me apretaron y casi lograron que cayeramos al suelo.

-¡Ashley!.
Em.

-¡Estás bien!.
Matt.

-Ya, basta. La van a matar.

Dijo Sam bromeando. Luego me ayudó a levantarme.

-¡Woow! ¡Estás bien, Ash! ¡No sabes cuanto me alegro!.
Dijo Jess. Esta sonreía y estaba ya casi por apretar a su novio.

-E-Es genial volverlos a ver, chicos.

Mi alegría volvía. Desde hace mucho que no. Todo mí mal humor había desaparecido. Había encontrado a mis amigos. Mi familia...

Mi madre murió de un infarto al darse cuenta de los problemas que nosotros pasábamos. Maldita noticia. Eso mató a mi madre, y mi padre no aguanto más sin ella, dos semanas después lo encontraron colgado en su habitación.

En el momento que me dijieron lo que les había ocurrido a mis padres quedé más destrozada que nunca. Me apoyé en el psicólogo, él en ese momento era mi única salida...

Pero ahora tengo a mis amigos y estoy segura de que ellos me cuidaran la espalda, y siempre estaran allí para mi...

Bien, amigos!. Gracias a Diós ya estámos la mayoría juntos.
Dijo Sam jugando con sus manos.
-Lamentablemente uno del grupo no ah dado ni una señal de que esté bien...

Dijo Mike haciendo que, de alguna manera, vuelva a sentirme algo mal.

Mi sonrisa se volvió a apagar y posé mi vista en el suelo.

Chris era mi mejor amigo y tal vez, tal vez, podríamos haber llegado más lejos. Él me amaba...

Y era obvio que yo lo amaba a él.

Todos me miraron apenados y hubo un gran silencio en la sala. Sam se sentó a mí lado y me abrazó...

-¿Sabes qué?...
Dijo, levantando con sus dedos mi mentón y observándome con una sonrisa.

-...¿Q-Qué?.

-¡Vamos a ir a por él!.
Dijo de una manera tan segura, que pude deducir de inmediato.

Los chicos se alarmaron un poco pero, luego de unos minutos asintieron. Por fín. Después de tanto tiempo sin sonreír, lo volví a hacer, todo gracias a mis amigos, gracias a Sam... Ahora

Vamos por ti, Chris.

Salir Adelante ; EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora