Capítulo 3:

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----Narra Rubén----

Un día más camino del instituto, menudo aburrimiento...

Mayte: Rubén vamos.

Rubén: No, hoy no voy al instituto-me tapé hasta arriba.

Mayte: ¿Por qué?

Rubén: Porque hoy no pega ir.

Mayte: Anda, vamos-me zarandeó un poco.

Rubén: Vaale-dije perezosamente y sin gana alguna de levantarme.

Me vestí con toda la calma que tenía, fui al baño, me peiné y bajé a la cocina a desayunar.

Cuando terminé, me lavé los dientes, cogí mi mochila, me despedí de mi madre con un beso en la mejilla y salí de casa. Saqué mi móvil del bolsillo de mi pantalón junto con los auriculares, los conecté y me puse a escuchar música hasta llegar al instituto. Debo decir que no soy para nada popular y ni tengo muchos amigos. A decir verdad me paso los días de instituto solo. Pero en realidad así lo prefiero, paso de estar con un grupo de amigos que me pone una cara por delante y otra por detrás.

Las tres primeras horas se pasaron lentas, demasiado lentas y, cuando tocó el timbre para el recreo, cogí mi mochila y salí al patio. Me puse en una esquina y seguí escuchando música mientras miraba el twitter. De pronto, dos chicos se me acercaron, eran dos de mi clase que siempre estaban molestándome y llamándome "rarito" o "solitario" ¿qué más les daba a ellos lo que yo hiciera? 

Raúl: ¿Por qué tan solo? ¿No tienes amigos?

No contesté, decidí pasar de ellos a ver si así me dejaban en paz.

Toni: Venga hombre, que hemos venido a hacerte compañía.

Rubén: Dejadme en paz, anda.

Raúl: ¿O qué? ¿Nos echarás tú?

Rubén: No, podéis hacer lo que os dé la gana, pero a mí dejadme tranquilo.

Toni: ¿Te pondrás a llorar como una niña?

Raúl: Toni él no se puede poner a llorar como una niña porque es un poco niña.

Los dos rieron.

Rubén: Creedme que no queréis ver lo que esta niña os hace.

Toni: ¿El qué? Yo quiero saberlo.

Rubén: Dejadme en paz.

Raúl: No tan rápido, ahora que nos has amenazado, termina lo que has empezado.

Rubén: No tengo ganas.

Toni: Eres un cobarde-rió.

Rubén: Lo que tú digas.

Me levanté para irme, pero esos dos no me dejaron y me arrinconaron contra la pared.

Raúl: He tenido un mal día y tengo ganas de pagarlo contigo, así que no te vayas.

Rubén: ¿Sabes? Yo tampoco tengo una vida muy buena y no por eso voy y te lo cuento a ti, porque no me importa nada tu vida.

Toni: La niñita tiene agallas.

Destinados al Mismo CaminoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora