----Narra Blas----
A pesar de haber decidido separarnos como grupo, unos días después, volvimos a quedar en el que fue nuestro estudio para hablar. Cuando llegué, solo estaba Álvaro ya allí.
Blas: Hola.
Álvaro: Hola.
Me senté junto a él y esperamos a los otros tres que llegaron poco después.
Dani: Tenemos que hablar de todo esto y dejarlo claro ya.
David: Sí, será lo mejor.
Álvaro: ¿A vosotros también os ha llegado el anónimo?
Carlos: Parece que van a seguir detrás nuestra después de lo que nos han hecho.
Blas: Y seguirán mientras no pongamos medios o encontremos las pruebas para que los metan en la cárcel.
Puse la carta que me había llegado sobre la mesa y los chicos me imitaron. Cogí la de David, que era la que más cerca me quedó, y la leí:
"Os habréis librado del accidente, pero no de nuestra venganza. Andaros con ojo, puede ser que ataquemos cuando menos os lo esperéis y donde más os duela, no es un secreto para nadie que lo más importante para vosotros es vuestra familia y no vemos el por qué no dar de lleno ahí.
Recordad que estamos pendientes de todos vuestros movimientos, así que no hagáis una tontería y no penséis que por estar juntos, más unidos y protegeros, será suficiente."
Al parecer todas eran iguales. Volví a dejarla sobre la mesa y miré a los chicos que estaban cabizbajos y pensativos.
Blas: ¿Qué pensáis hacer?
Álvaro: Supongo que lo más sensato es pensar en qué hacer para que no dañen a nuestras familias, ¿no?
Carlos: Parece que no solo dejar Auryn es suficiente para ellos...
David: Tenemos que buscar una alternativa para que nos dejen en paz o, al menos, no se nos acerquen.
Dani: Quizás separándonos por un tiempo, logramos que se olviden de nosotros un poco.
Blas: ¿No es mejor que nos cuidemos entre todos? Unidos podremos ayudarnos mejor.
Dani: Soy capaz de cuidar de mi familia solo.
Blas: No estoy diciendo lo contrario, solo que...
David: Creo que no es mala idea, ¿quién sabe?, a lo mejor logramos que decidan dejarnos en paz.
Blas: ¿Vosotros qué decís?-miré a Carlos y Álvaro.
Carlos: Yo voy a pensarlo.
Álvaro: Sí... Yo también.
Asentí y miré a los chicos. Suspiré y negué con la cabeza, se iban a salir con la suya y a ellos parecía darles igual.
Blas: Me voy a casa, cuando tengáis decidido qué hacer, me avisáis.
Carlos: Sí-carraspeó-.Yo también me voy.
Así nos despedimos y me fui a casa, donde mi pequeña Nuria de ocho años, me esperaba para que jugara con ella.
Mireya: ¿Qué ha pasado?
Blas: Nada, no hemos decidido nada-suspiré-, quedaremos otro día para decidirlo. Tienen que pensar qué es lo mejor.
Mireya: ¿Qué deben pensar?
Blas: Si unirnos contra todo o separarnos.
Mireya: Pero ya os habéis separado.
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Destinados al Mismo Camino
Teen FictionSecuela de Al Caer el Sol, contada por los hijos. ¿Qué pasa cuándo quieres volver a unir a personas que antes eran hermanos pero ahora son desconocidos y no quieren hacer nada por volver a hablarse? ¿Y si por el camino te cruzaras con el rencor de p...